El doctor Martín García López dirige el equipo de investigación para el estudio de la anticoagulación de Lanzarote, que ha sido becado por el Colegio de Médicos de Las Palmas, en concreto por su trabajo sobre anticoagulantes en fibrilación auricular no valvular. El objetivo de la investigación en la que trabaja el equipo en la actualidad es estudiar la introducción de nuevos fármacos para tratar esta patología en los pacientes que toman Sintrom por presentar arritmias y no están bien controlados, y que por lo tanto tienen indicación de anticoagulantes de nueva generación.

“Se van a valorar cuáles son sus características y cuáles son los resultados al pasar al nuevo tratamiento, de tal manera que se pueda valorar de antemano el resultado del cambio en cada paciente concreto”, explica.

El objetivo último es saber si realmente va a mejorar la calidad de vida de los mismos. Para el estudio espera llegar al menos a un centenar de pacientes de la Isla. Si demuestran que los nuevos fármacos son aptos para tratar las patologías de los enfermos y se adaptan a sus necesidades se le propone al paciente cambiar de prescripción médica.

En la actualidad existen cuatro fármacos anticoagulantes de nueva generación que compiten con el Sintrom. García comenta ventajas como que el medicamento dispone de su propio antídoto y permite revertir la anticoagulación y que entre otros beneficios permitió evitar mayores complicaciones tras aplicarlo en un paciente que sufrió un accidente.

La investigación del equipo del doctor Martín García persigue un triple “beneficio”: para el paciente porque puede mejorar su calidad de vida y estará más controlado, para el médico “porque realizas una práctica clínica de excelencia” y para la administración porque trabaja por mejorar la atención sanitaria.

Junto a este médico especialista en cardiología del Hospital Doctor José Molina Orosa de Arrecife se encuentran trabajando en el estudio: Claudia Hernández Pantoja, Roberto Sierra Farinelli, Cathaysa Texenery Estévez Bolaños, Marina Gordillo Martín, Diana Segovia Herreras, Noelia Cruz Perdomo, Yapci Yurena Ramos de León y Covadonga Rodríguez Mangas, junto a Jonatan Gómez y Jorge Vilar. Aunque la lista de colaboradores es mucho más extensa dado que el estudio abarca una exhaustiva labor en la que trabajan especialistas en hematología, aparato digestivo, médicos de familia o en medicina interna.

Resalta además el apoyo del Colegio de Médicos al proyecto, así como de la Gerencia y del área de Atención Primaria. Martín García explica que la investigación va a ser la primera en el mundo que realice un estudio pormenorizado de los pacientes con fibrilación auricular no valvular en tratamiento con Antivitamina k (Sintrom o Warfarina) que tengan indicación de sustitución del tratamiento por anticoagulantes directos por presentar un mal control de la anticoagulación, lo que supone el 50 por ciento de todos los pacientes.

Se va a realizar un seguimiento de los pacientes durante un año y entre otros muchos aspectos se van a estudiar: los eventos adversos, la calidad de vida, la adherencia al tratamiento anticoagulante, los motivos de no adherencia, el conocimiento del tratamiento anticoagulante, las creencias sobre la medicación, la satisfacción con el tratamiento anticoagulante, si existe un deseo de cambio, los motivos del mismo y si se lleva a cabo.

Desde un punto de vista menos médico explica que se va a estudiar a los pacientes que toman Sintrom por presentar arritmias y no están bien controlados, y que por lo tanto tienen indicación de anticoagulantes de nueva generación. Se van a valorar cuáles son sus características y cuáles son los resultados al pasar al nuevo tratamiento, de tal manera que se pueda valorar de antemano el resultado del cambio en cada paciente concreto. Considera que es una investigación de la que se pueden beneficiar muchos pacientes.

En Lanzarote suman más de un millar los que están siendo tratados por este fármaco y asegura que “es posible que existan subgrupos de pacientes a los que la realización de este cambio sea especialmente beneficiosa y otros en los que pueda ser perjudicial”. Si bien el objetivo final es poder aplicar los nuevos medicamentos a todos estos pacientes afectados y en tratamiento con Antivitamina K que tengan un mal control de la anticoagulación. “Había una necesidad de realizar esta investigación y era factible realizarla en nuestro medio”.

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En el mercado existen cuatro nuevos anticoagulantes de nueva generación que al ser más estables en sangre no precisan de controles periódicos, como en el caso del Sintrom para un ajuste del fármaco “lo que evitaría los pinchazos”, matiza el doctor García López. También hay ocasiones en que los enfermos no son candidatos óptimos para ajustar esas dosis, por lo que la buena praxis recomienda prescribir otro fármaco.

Y el estudio permitirá saber “si estas personas presentan diferencias en algunos parámetros clínicos, entre ellos la calidad de vida”, al no tener que realizarse controles periódicos. Si bien, considera que pueden darse casos de pacientes en edad más avanzada para los que “esos controles les hace sentir más arropados”. En la actualidad, existen en la Isla 1.143 personas en tratamiento con Sintrom y 759 en tratamiento anticoagulante con los nuevos fármacos, que suman casi 2.000 personas. Pueden ser pacientes afectados por una trombosis venosa profunda, trombolismo pulmonar y la fibrilación auricular, una arritmia muy prevalente en la población y que puede provocar infartos cerebrales.

El objetivo último es saber si realmente va a mejorar la calidad de vida de los enfermos. Para el estudio espera llegar al menos a un centenar de pacientes de la Isla

Aunque han solicitado poder realizar el estudio a los pacientes de toda la Isla han comenzado con los centros de salud de Titerroy y Playa Honda. En una gráfica de las dispensaciones puede contemplarse cómo la administración de Sintrom sigue manteniéndose y los nuevos anticoagulantes están subiendo. Advierte además de que no todas las patologías pueden tratarse con los fármacos de nueva generación: “los enfermos que tienen válvulas protésicas mecánicas, por ejemplo”, y que no todos están subvencionados.

Los cardiólogos ya se están animando a prescribir los nuevos fármacos cuando comprueban que el Sintrom no está dando los resultados previstos. Al requerir un visado, los médicos de familia son más reacios, aunque, según explica, el Servicio Canario de Salud, afortunadamente, es proclive a autorizar estas solicitudes. “La administración en Canarias apoya a sus médicos”, asegura el doctor García López.

Martín García López es doctor en Medicina por la Universidad de Navarra y lleva cinco años en el Hospital de Lanzarote, donde se ha ocupado de la planta de hospitalización de cardiología, de la que asegura que es “la de mayor satisfacción por el trato dispensado”. Ejerce en la actualidad de jefe de cardiología en funciones. Es también vocal de la Sociedad Canaria de Cardiología.

Agradecimientos

Junto al grupo de médicos y especialistas que trabajan en la investigación, el doctor Martín García López y su equipo cuentan con el respaldo del Colegio de Médicos de Las Palmas, del que elogia su labor en la lucha contra las pseudociencias, y de otros profesionales sanitarios como Belén Medina para acceder al Centro de Salud de Titerroy o la enfermera Juana Teresa Martín.

También aporta su granito de arena la jefa de Residentes, Verónica Gutiérrez. En estadística destaca la labor de Iván Castillo, Manolo Verdugo y Blanca Jiménez. También agradece en particular el respaldo del presidente del Colegio de Médicos, Pedro Cabrera, y de Concepción Pérez y Aniuska Sutil, “las vocales lanzaroteñas que nos animaron a presentarnos”.