La Confederación Empresarial de Lanzarote (CEL) se ha propuesto hacer un seguimiento a los presupuestos de las distintas administraciones públicas y su ejecución parea exigir un mayor esfuerzo inversor. Su primera reivindicación es que los presupuestos se deben aprobar a tiempo y no a mitad de año. El Ayuntamiento de Tinajo por ejemplo, aún no ha aprobado sus cuentas de este año a pesar de tener mayoría absoluta y muchos otros las aprueban a partir de abril.

“Todo lo que se pase de enero ya hace daño, porque los proyectos necesitan un tiempo de exposición, más la ejecución y al final salen en noviembre corriendo y exigiendo que contratemos a más personal para que esas inversiones no se pierdan”, señala Juan de León, presidente de la CEL. “Demandamos que hagan sus deberes porque nos va la vida y para que se pueda mantener el personal todo el año”. Tras el análisis de los presupuestos municipales, la primera conclusión es clara. “La inversión de los ayuntamientos es ridícula”, dice De León, porque ninguno llega al 10 por ciento “y cuatro de ellos no llegan ni al cinco cuando nosotros entendemos que la inversión debe estar en una horquilla entre el 20 y el 30, y todo lo que no se invierta en estos años lo sufriremos en años posteriores”. Según la CEL, el único “que ha hecho los deberes es el Cabildo porque pone 22 millones para inversiones, el 36 por ciento del presupuesto”.

“Y si lo de los ayuntamientos es ridículo, lo del Gobierno de Canarias”, dice De León, “no es ridículo, es vergonzoso”. “A Lanzarote –señala- le tocan 29 millones de los más de 600 previstos para inversión”. “No llega al 5 por ciento, así que hay Islas que se benefician mucho, pero ya que nos ha tocado esta ridiculez, vamos a hacer un esfuerzo para se ejecuten” ya que en 2012 no se ejecutó ni una tercera parte de lo previsto. Según la CEL, en este caso hay más motivos para estar descontento porque hay ocho parlamentarios de la Isla “y no se ha escuchado a ninguno que haya puesto el grito en le cielo”.

“Yo no sé qué les pasa a los parlamentarios pero cuando cogen el Binter, tiene que haber una zona entre Lanzarote y Las Palmas donde se desconectan y ya no reivindican las cosas de su Isla”, asegura. La CEL considera que los parlamentarios deben reivindicar que el año viene haya una inversión mucho mayor para Lanzarote para que se puedan llevar a cabo inversiones como el Palacio de Congresos o infraestructuras de carreteras y, en definitiva, según la patronal, la hoja de ruta que presentó la Cámara de Comercio. Reivindicación sin pelos en la lengua De León reconoce que en Lanzarote se ha echado en falta en el pasado que hubiera habido una confederación como la CEL “porque como no recibimos subvenciones decimos lo que queremos y denunciamos las cosas”.

Señala que las luchas empresariales forman parte del pasado y que hoy hay una unidad importante. “En esta federación están todas las patronales y estamos comprometidos defendiendo una sola línea y así vamos a seguir”, asegura. “50 millones estancados por culpa del Gobierno y de Gesplan” —El primer Plan de modernización de Puerto del Carmen no salió por falta de financiación y el segundo parece que no arranca por problemas burocráticos. —La Administración siempre se hace de rogar. Hay 16 proyectos y esto afecta a todas las patronales. La primera fase fue un proyecto piloto pero había gente que no tenía el dinero. Ahora hay más de 50 millones de euros y el dinero ya está en el bolsillo, pero está estancado. ¿Cómo puede ser que en esta situación las administraciones retrasen este plan cuando hay empresarios que incluso pueden perder el dinero si no empiezan las obras este año? Con esta situación de desempleo no puede haber un solo minuto de retraso en la administración pública.

Eso no puede ser. —Hay que facilitar la inversión pero también hay que tener garantías de que los proyectos se ajustan a la ley y a la planificación. —En este caso no se han hecho las cosas bien y la culpa es del Gobierno y de Gesplan. El primer plan, que era más complicado, salió en cuatro meses. El otro día el Gobierno dijo que hay tiempo hasta diciembre. Claro, y si lo ponemos hasta dentro de un año y medio, pues hay más tiempo. —¿Y por qué ese retraso, por ineficacia, por falta de recursos…? —La Administración se tiene que reconvertir. La Ley de medidas urgentes pretendía agilizar y no ha logrado nada. Seguramente sea parte de todo. Hemos pedido una reunión para hablar de esto con el presidente del Gobierno, con la consejería de política territorial, con Gesplan, el Ayuntamiento de Tías y las patronales pero aún no hay fecha.