La protectora de animales Sara ha operado y recuperado a Toti, un podenco que fue rescatado de una cueva en el municipio de Tinajo por un grupo de espeleólogos que se encontraron a la perra.

El podenco se encontraba en una cueva a unos cuarenta metros de profundidad, “no podía ni levantarse, ni moverse y debido a la deshidratación, ni tan siquiera ladrar”. Probablemente, señalan desde Sara, llevaba allí varios días sin beber ni comer.

Uno de los espeleólogos subió con una cuerda al podenco, una operación complicada que se alargó durante unas dos horas por el gran tamaño de la perra. Una vez a salvo, la llevaron a la protectora de animales Sara.

El equipo veterinario comprobó cómo su cuerpo “estaba lleno de heridas por la caída y una de sus patas estaba rota por varios sitios”. Tuvieron que operarla e introducirle acero para recuperar su pata.

“Han pasado dos meses desde su primera operación, que a pesar de ser todo un éxito, por desgracia no evolucionó favorablemente, y tuvo que entrar de nuevo en quirófano” el pasado 20 de diciembre.

Estas fiestas Toti recibió la visita de su rescatador. Para la protectora de animales Sara, se trata de “una gran historia la de esta preciosidad de podenco, una raza maltratada y olvidada”.

De hecho, más de la mitad de los perros que esperan un hogar en Sara son de esta raza, podenco. “Muchos llegaron maltratados, otros abandonados, y esperan años y años hasta conseguir un hogar que los trate con dignidad y respeto”, resalta la protectora de animales.