La Isla afronta el nuevo año con numerosas incertidumbres sobre el desarrollo de infraestructuras clave como el aeropuerto, sin solución al drama del paro, con proyectos clave que siguen pendientes y con las consecuencias de la corrupción lastrando la calidad de vida de los ciudadanos.

01. DEUDA HISTÓRICA

Durante la última década, Lanzarote ha sido la tercera isla en población pero la quinta en inversión, a la cola en las prioridades del Gobierno de Canarias. Así lo acredita un informe del propio Ejecutivo regional entregado en el Parlamento a petición del jefe de CC en Lanzarote, David de la Hoz. Los números son incontestables: La Palma ha recibido 647 millones de euros a pesar de tener menos del 60 por ciento de los habitantes de Lanzarote mientras que Fuerteventura ha logrado 638 millones con unos 30.000 residentes menos. La inversión en Lanzarote fue de 626 millones, a gran distancia de lo que le correspondería.

Dirigentes de CC y PSOE, que respaldan al Gobierno, argumentan que en el último año se ha “corregido” este agravio, aunque todavía para 2015 la comunidad autónoma destinará más dinero a la televisión pública (38,1 millones) que a inversiones en Lanzarote (37 millones).

Pero la deuda histórica no se ciñe a la falta de inversiones sino que se extiende a aquellos servicios que pagan instituciones de la Isla y que le tocaría asumir al Gobierno, que sí los sufraga en el resto del Archipiélago, como los cinco millones al año del Hospital Insular que desembolsa el Cabildo. O al “injusto” reparto de las subvenciones europeas al campo: de 200 millones anuales, 140 van principalmente para La Palma y Tenerife a través del plátano, en detrimento de cultivos como el de la viña, fundamental para el paisaje lanzaroteño.

02. PUERTOS Y AEROPUERTO

Las puertas de entrada a la Isla comienzan el nuevo año con situaciones dispares: en breve se adjudicará la prolongación del dique de Los Mármoles en 430 metros para mejorar la operatividad del puerto de Arrecife. La inversión asciende a 25,5 millones, se ejecutará hasta el 2017 y es una pieza del puzzle portuario, junto a la ampliación del muelle de cruceros o el traslado de la terminal de contenedores. Del conjunto de la inversión, unos 12 millones se destinarán a los cajones de hormigón armado del nuevo tramo del dique.

El presidente de la Cámara de Comercio, José Torres Fuentes, ha reclamado que se ejecuten en Lanzarote, con el consiguiente movimiento económico, ante indicios que apuntan a que se intentarían hacer fuera. A la licitación se han presentado empresas de la Isla, en unión con constructoras de ámbito estatal: Horinsa, Tiagua, Alquifer y Lanzagrava.

Lo que no se ha despejado todavía es el futuro del aeropuerto de Guacimeta: Aena se ha llevado de Lanzarote unos beneficios ‘limpios’ de 37 millones de euros por la gestión de uno de los aeródromos más rentables de la red. Las instituciones y patronales de la Isla han exigido que el aeropuerto se amplíe, los estudios técnicos apuntan a que necesita una pista con una “longitud efectiva mínima” de 2.900 metros, medio kilómetro más que la actual. En 2015 culmina la legislatura y ni siquiera se ha elaborado el Plan director del aeropuerto para abrir el debate sobre cómo debe ser el aeropuerto en los próximos años y las alternativas para mejorar su capacidad.

03. PARO Y TURISMO

Lanzarote arranca 2015 con una extraña paradoja: ha experimentado uno de los mejores años de su historia en afluencia de turistas, rondando los 2,4 millones de visitantes y, según las encuestas oficiales, el sector turístico en la Isla generó durante los tres primeros trimestres del año 1.906 millones de euros, unos 340 millones más que el ejercicio anterior. Unas cifras de récord que evidencian el momento álgido del sector y acreditan a Lanzarote como un destino turístico de primer nivel.

Mientras esto sucede, en las listas del Servicio Canario de Empleo (SCE) siguen figurando más de 14.600 personas que en la Isla demandan un puesto de trabajo, con una tasa de paro, según la última Encuesta de población activa (Epa), que supera el 34 por ciento de la población que, en edad de trabajar, quiere formar parte del mercado laboral.

04. PROYECTOS PENDIENTES

Hay un nexo que une la reposición de viviendas en Valterra y Titerroy, que deberá comenzar en 2015, y el proyecto de la vía ciclista insular: el peligro. Por un lado el que destacan los informes técnicos sobre las casas de ambos barrios capitalinos, construidas a mediados del siglo pasado, que resaltan el “avanzado estado de deterioro generalizado”, y que ya en 2009 supuso la muerte de una persona al desplomarse el techo de su vivienda. Y, por otro lado, el riesgo que denuncian muchos ciclistas que salen a las carreteras de la Isla, que ha experimentado un auge de turismo deportivo.

En 2014 se registraron varios atropellos, alguno de carácter mortal, como el de una ciclista danesa en la carretera de Tinajo a La Santa a manos de un conductor que dio positivo en alcohol y estupefacientes. Aunque los delitos contra la seguridad vial no son competencia de las instituciones de Lanzarote, el Cabildo sí que se comprometió a desarrollar una vía ciclista insular, enfocada a una práctica deportiva más lúdica que profesional, que tendría que comenzar a materializarse en el nuevo año.

05. PABELLÓN, CORRUPCIÓN

El pabellón de Argana ha sido un auténtico agujero negro para el Ayuntamiento de Arrecife: se presupuestó en ocho millones, se pagaron 12 y lleva cerrado desde marzo de 2013. En todo ello la Justicia considera que tiene que ver la corrupción que ha anidado durante años en el Consistorio capitalino. En enero declaran dos directivos de la constructora FCC, que hizo el pabellón, por pagarle un viaje a Marruecos a la familia de la entonces alcaldesa, María Isabel Déniz.

El Juzgado lo considera parte de las dádivas que supuestamente se repartieron en una obra plagada de irregularidades: de la empresa que diseñó el pabellón para FCC era socio el jefe de la Oficina Técnica de Arrecife, que al margen de participar en el presunto amaño del concurso, debía velar por que las instalaciones estuviesen bien ejecutadas y no tuvieran que cerrar las puertas a los pocos años de abrir.

En el presupuesto de 2015 el Ayuntamiento contempla otros 200.000 euros para reformas en el pabellón, pero se sigue sin aclarar quién llevará a cargo unos trabajos que saldrían por el triple, ni cuándo.