El centro de acogida de inmigrantes que el Estado pondrá en marcha en Lanzarote tiene una capacidad similar a los del resto existentes en Canarias, y no es de grandes dimensiones, ha informado el delegado del Gobierno en las islas, Anselmo Pestana.

Se trata de un centro de atención humanitaria dependiente del Ministerio de Migraciones, similar al que actualmente acoge a unas 400 personas en Montaña Mina, "quizás a lo mejor con algo más de capacidad o con la capacidad que se pueda desplegar, pero no es un macrocentro".

"Todas las autoridades canarias y todas las ONG en Canarias han solicitado una red de centros estables para poder atender con dignidad a las personas que llegan", ha defendido Pestana, al ser preguntado sobre este asunto ante de la reunión técnica de la Autoridad de Coordinación frente a la Inmigración.

Asimismo, ha señalado que Canarias cuenta actualmente con unas 5.000 plazas de acogida y la ocupación en estos días está al 50 por ciento.

El delegado del Gobierno ha dicho que el Ministerio del Interior analiza la posibilidad de aumentar el número de agentes para agilizar los trámites que permiten derivar a los inmigrantes a la península.

Según ha indicado, en lo que va de año han llegado a Canarias un total de 9.700 inmigrantes, lo que supone un incremento del 700 por ciento respecto al año pasado.

El buen tiempo inusual para estas fechas y la calma en el mar ha favorecido estas llegadas, ha destacado Pestana, quien ha confiado en que "haya otra evolución" en los próximos meses.

Asimismo, se ha referido a la necesidad de llegar a acuerdos con Mauritania, objetivo que podría lograrse con el viaje del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a ese país africano, acompañado por la presidenta de la Unión Europea, Úrsula van der Leyen.

En opinión de Pestana, un aumento de recursos económicos permitiría a Mauritania controlar las salidas de inmigrantes desde sus costas.

"El (control) más eficaz es el que se hace en las cercanías de las costas emisoras", ha subrayado, como se hizo con Senegal con un despliegue de avión "y se hará también seguramente en Mauritania".

En cuanto a Senegal, el delegado del Gobierno considera que hay "una mayor implicación de la de la Armada de ese país, un control mucho mayor en esas costas y por eso también la presión se ha ido a la costa mauritana.

A pesar de ello, la inestabilidad política en ese país conlleva más problemas económicos y "mayor desesperanza en la población y hacen que la gente intente salir".

"Lo que hay que buscar es la salida de la migración regular, se trata de no conformarnos con una migración que llega patrocinada y ordenada y aprovechada por las mafias", ha indicado.

"Eso tenemos que evitarlo, porque si se producen muertes y desgracias en el trayecto hacia Canarias es muchas veces por la falta de medios, por la inseguridad, porque las embarcaciones van sobrecargadas", ha continuado.

El delegado del Gobierno considera que no cabe conformarse: "necesitamos el apoyo de los países de tránsito o de emisión de esa migración y, después, obviamente, adoptar medidas en las que haya un flujo ordenado razonable".

Porque, a su juicio, "Europa necesita mano de obra para mantener su modelo productivo y su modelo social".