Una concentración pide “justicia para Romina” en Madrid
Denuncian la “infausta de la liberación del único sospechoso y supuesto culpable de la muerte de Romina Celeste”
Una concentración ha solicitado este domingo justicia para Romina, la mujer presuntamente asesinada, quemada, descuartizada y arrojada al mar en Lanzarote por su marido, Raúl Díaz, que el viernes quedó en libertad por no haberse celebrado juicio y cumplirse cuatro años de su ingreso provisional en la cárcel de Lanzarote.
Organizada por la comunidad paraguaya, a la que pertenecía la víctima, en la protesta se destacó en un manifiesto la “indignación” acerca de la “infausta de la liberación del único sospechoso y supuesto culpable de la muerte de Romina Celeste”.
“Estamos muy tristes con la decisión y ofendidos de quienes han permitido” que el acusado haya logrado la “libertad”, señalaron los manifestantes, que pidieron a la ministra de Igualdad, Irene Montero, que les “ayude a encontrar justicia” para Romina y “paz para su familia, que aún no ha podido guardar luto”.
En la concentración, en el centro de Madrid, se podían leer mensajes como “matar les sale barato”, “basta de impunidad” o “cárcel para el asesino”.
La puesta en libertad, este pasado viernes, de Raúl Díaz ha despertado una ola de indignación. El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) anunció el mismo viernes que ha abierto una investigación para esclarecer las causas de la demora en la celebración del juicio.
La Audiencia Provincial de Las Palmas decretó la semana pasada la puesta en libertad del acusado al cumplirse cuatro años de su detención e ingreso en prisión. Se le ha impuesto solo la obligación de firmar en el Juzgado que designe una vez a la semana, mientras que la representación de la familia exige medidas más severas ante el “alto riesgo de fuga”.
La Fiscalía pide una condena de 20 años y dos meses de prisión para Raúl Díaz, acusado de maltratar y matar en Lanzarote en enero de 2019 a su pareja, cuyo cuerpo quemó en una barbacoa, lo desmembró y lo arrojó al amar, según su escrito de acusación, en el que le imputa seis delitos.
El acusado, además, hizo creer a los amigos y familiares que su mujer, Romina Celeste Núñez, se había marchado de casa tras una discusión y denunció su desaparición a la Guardia Civil, señala el escrito, en el que se afirma que consideraba a su esposa como "un ser inferior" en el que podía desatar su rabia y "ello por ser joven, extranjera y sin recursos que ejercía la prostitución para mantenerse económicamente".
Según la Fiscalía, durante la relación que mantuvieron, el acusado agredió a su pareja y la trató con menosprecio. En su informe detalla los golpes que le propinó en agosto de 2018 cuando estaban alojados en un hotel y en días previos a su muerte, en el domicilio familiar, y por los que tuvo que acudir a urgencias del hospital de la isla, aunque no fue atendida por el médico al presentarse allí el procesado.
Conforme al relato del Ministerio Público, la madrugada del 1 de enero de 2019, el acusado golpeó a su mujer en distintas partes del cuerpo y la mató, aunque se desconocen los mecanismos que causaron su fallecimiento.
Para deshacerse de su cuerpo, lo quemó en la barbacoa de su casa -una parte ese día y el resto entre los dos siguientes-, después lo desmembró y lo ocultó en bolsas de basura que arrojó al mar en la zona de los Ancones de Costa Teguise, para lo que alquiló un vehículo el 3 de enero, sostiene el fiscal.
Una parte del cuerpo que no logró quemar fue arrojado por el acusado a la zona de Los Hervideros la madrugada del 5 de enero. Después, se deshizo de la barbacoa e instrumentos empleados para desmembrar el cadáver y demás objetos que pudieran incriminarle.
Añadir nuevo comentario