El sindicato UGT denuncia la utilización que hacen las administraciones de Lanzarote de los planes de empleo que se llevan a cabo con fondos europeos, con fondos del Gobierno de Canarias y, en parte, con fondos propios.

Según señala el secretario insular del sindicato, César Reyes, “se hace un uso mediático por parte de todos los partidos que es vergonzoso y es una falta de respeto al trabajador”, ya que muchas de las plazas de esos planes están destinadas a personas en riesgo de exclusión social “y se podían ahorrar la foto porque nadie tiene que saber en qué situación están esos trabajadores”.

Reyes añade, además, que los planes de empleo están mal orientados porque “no fortalecen el currículum del desempleado” y no sirven, por tanto, para poder encontrar un empleo después en el mercado de trabajo. También destaca que para generar la ayuda social, los trabajadores necesitan trabajar durante un año, lo que equivaldría a dos programas de seis meses, y que en Arrecife, como ya denunció el sindicato, hicieron un programa de sólo cinco meses y dejaron a varios trabajadores con once meses cotizados sin derecho a esa ayuda.

Desde el sindicato señalan que se podían llevar a cabo programas que permitan a los trabajadores tener una formación que no sea solo temporal y les aporte algo más, porque “sin una formación adecuada es imposible incorporarse al mercado laboral”.

Reyes reconoce que, en todo caso, el mercado es muy limitado y se reduce al sector servicios, a la construcción o al sector primario. Señala que los ayuntamientos o el Cabildo no tienen por qué someterse a los programas de empleo que les vengan ya dados desde el Gobierno o la UE, sino que pueden aportar un plan de empleo municipal. “Hay varias opciones”, asegura.

También considera que se pueden orientar los concursos públicos para integrar a ese colectivo añadiendo cláusulas sociales en los concursos de obras o servicios y no adjudicarlos sólo en función del precio más barato.

Precariedad en la hostelería

Por otro lado, UGT denuncia otras situaciones irregulares en la contratación que siguen siendo generalizadas. Denuncian que en la hostelería sigue siendo común la contratación por media jornada cuando en realidad se hace una jornada entera.

“Hay una elevada contratación a tiempo parcial, por cuatro horas al día o menos, -dice Reyes– que no se corresponde ni con los niveles de ocupación, que son altos, ni con los horarios de apertura de los establecimientos, es decir que no se corresponde con las circunstancias reales del trabajo”.

Señala que si en muchos establecimientos de hostelería se analizaran los contratos, “no daría para abrir tantas horas” y que la Inspección de Trabajo debería poner el acento en estas prácticas. Para UGT, hay una precariedad abusiva y generalizada en hoteles y apartamentos y casi todas las categorías laborales tienen sobrecarga de trabajo, mientas que en el aspecto salarial, “Canarias sigue a la cola de España”.

Respecto al paro, dice que ha bajado por las nuevas contrataciones, pero que se hacen muchos contratos para un mismo puesto de trabajo y hay un colectivo, el de los mayores de 55 años, “que sigue con muchas dificultades para incorporarse al mercado de trabajo”.

Reyes subraya que hay que promover mesas de contratación social y buscar una renta mínima básica para mayores de 55 años “porque va a ser muy difícil que se integren en el mercado”.