Pesca prohibida pero con mucha publicidad
La detención del responsable de una empresa que ofrecía “pesca extrema” alerta sobre la escasa vigilancia de prácticas prohibidas y la captura de especies protegidas
“Nuestro puesto de pesca en medio de la nada. Donde nuestros sueños se hacen realidad”. “Si buscas una pesca diferente, de calidad, en un destino tropical y subtropical, económico y con capturas increíbles desde costa, síguenos”.
Con textos como estos y otros muy similares se publicitaba, desde hace al menos cinco años, en varias redes sociales, una empresa de turismo activo, Extreme Fishing Territory, que ofrece a los aficionados a la pesca una jornada “increíble” de actividad pesquera en la costa de Lanzarote para capturar “monstruos del mar”, “auténticos torpedos”, como los llama el responsable de esta empresa en sus textos: “Tenemos una aventura increíble para los auténticos buscadores de monstruos desde costa”.
“Acampados en la playa donde soltaremos toda nuestra magia en busca de los grandes peces”. La aventura no era tan grande y la magia no era tanta magia. La organización metía un coche todoterreno por las caminos de Los Ajaches hasta alguna playa o cala entre Playa Quemada y Papagayo. Allí acampaban y pasaban la noche.
Con una canoa, el responsable de la empresa se adentraba varios cientos de metros en el mar, colocaba los anzuelos con un engodo de cabezas de pescado, volvía arrastrando los hilos y después instalaba varias cañas en la costa dispuestas para resistir el peso de angelotes, muselinas o tiburones.
El resto de la aventura consistía en esperar y, después, en mantener una pelea desigual con el ejemplar que hubiera picado el anzuelo. La magia consistía en cobrar una tarifa a partir de 150 euros para pescar una especie en peligro de extinción o protegida después de varias horas de lucha, hacerse una foto mordiendo una aleta, subirla a las redes y devolver al animal a su hábitat.
Extreme Fisingh Territory ofrecía también sus servicios en otras latitudes, como Cabo Verde, Angola, Sudáfrica o Mozambique. Lleva al menos cinco años publicitándose en las redes sociales y llevando a cabo esta práctica, sin que hasta el momento hubiera pasado nada.
En ocasiones utilizaba drones en este tipo de pesca. Incluso, el responsable de la empresa, Óscar Benéitez, interviene en un podcast sobre pesca en el que explica su forma de proceder. También presumía de pesca inclusiva. Bajo la fotografía de un señor en silla de ruedas en plena playa, la empresa escribe: “Si se quiere, en esta vida nadie te puede parar. En Extreme Fishing Territory creemos que todo el mundo tiene derecho a disfrutar de la libertad del mar y de la pesca”.
Ahora se enfrenta, al menos, a dos denuncias, una de la asociación Adacis y otra de Latitud Azul. Además, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha apercibido a la empresa por sus prácticas. En la última semana de mayo, el responsable de la empresa fue detenido por la Guardia Civil por estos hechos y el caso pasó al Juzgado de Instrucción número 3 de Arrecife.
Ofrecía un día “increíble” para capturar “monstruos del mar”
Adacis habla en su denuncia ante el Seprona de las posibles infracciones: captura de especies de fauna marina protegida, uso de drones, de vehículos todo terreno en playas, comercialización con ánimo de lucro de la actividad pesquera recreativa o apología y propaganda en redes sociales de esas capturas.
Por su parte, la asociación para la conservación medioambiental Latitud Azul, señala en su denuncia términos parecidos: ánimo de lucro o comercialización de especies protegidas, vulnerables o en peligro de extinción y captura de esas especies.
La denuncia destaca que la normativa obliga a obtener una autorización para este tipo de pesca con fines comerciales, pero resalta que, en cualquier caso, está prohibida la captura de cualquier tiburón. También está prohibido el engodo con animales o sustancias que contengan sangre o productos tóxicos y utilizar artes, aparejos y útiles no autorizados, especialmente los destinados a la pesca profesional.
Señala Latitud Azul que, en el supuesto caso de que las capturas fuesen accidentales, aunque las publicaciones en redes indican lo contrario, “no han sido devueltas inmediatamente al mar, sino que han sido utilizadas para hacer fotografías con los clientes para su publicación en redes sociales y bromear mordiendo las aletas o posando con las mismas”.
Esa asociación, a través de las fotos, ha identificado varias especies con la ayuda de expertos de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria: tiburón jaquetón o tiburón sedoso, tiburón azul o tintorera, mantelina, chucho negro, raya picuda y obispo. Todas ellas son especies incluidas como vulnerables, en peligro de extinción o amenazadas en la Lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Alicia Herrera, de Latitud Azul, señala que no podrán alegar que se trata de una pesca accidental “porque sus anuncios están claros”. De hecho, la empresa ha borrado la mayor parte de sus publicaciones aunque hay capturas anteriores a ese borrado. Pero es que además, el responsable de la empresa explica que lleva anzuelos especiales para poder capturar a este tipo de especies.
Señala Herrera que un problema añadido es que algunas especies no están claramente protegidas en el Catálogo de especies protegidas de Canarias y hay que acudir a la legislación española o europea. Pide un cambio de la ley y que se persigan más estas actividades.
Se trata de un maltrato evidente a estas especies, aunque las devuelvan al mar
También habla del problema de la sobrepesca en el sector de la pesca deportiva. Estas empresas también se comercializan, en ocasiones, a través de agencias. Fuentes del sector destacan que en Fuerteventura se han detectado otros casos parecidos en la zona entre Morro Jable y Jandía. Creen que “se está poniendo de moda”: hay mucha demanda y poca posibilidad de vigilar.
Hay servicio de guardapesca del Gobierno de Canarias en Tenerife, Gran Canaria y Fuerteventura, pero no en Lanzarote, donde están los agentes medioambientales del Cabildo que apenas pueden cubrir el territorio como para tener que vigilar el mar. También está el Seprona, con sus carencias, y un agente de medio ambiente del Ministerio por cada provincia, así como los inspectores de pesca que normalmente se ocupan de la pesca profesional y no de la deportiva. En cualquier caso, el angelote y la mantelina sí están protegidos y los tiburones no se pueden pescar con la modalidad de pesca deportiva.
Por su parte, Ezequiel Navío, de Adacis, considera que se trata de un maltrato evidente a estas especies, aunque las devuelvan al mar, y que esta pesca les altera los ciclos reproductivos. “Canarias concentra más del 50 por ciento de las especies en peligro crítico de extinción del país y el informe ‘Estado de la biodiversidad en España’ elaborado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) refleja que, de las 193 especies de animales y plantas en esta situación, 101 se encuentran en el Archipiélago e incluye tiburones como el angelote, que encuentra en Canarias uno de sus últimos refugios en el mundo”.
Destaca que “promover públicamente la captura de especies amenazadas de Canarias no es el tipo de turismo que necesita el archipiélago, todo lo contrario, Canarias necesita una actividad turística que, por encima de cualquier interés particular, respete incondicionalmente sus valores naturales y los proteja con conocimiento, con sensibilidad y cumpliendo las normativas ambientales vigentes”.
Comentarios
1 Uno que pasaba ... Jue, 22/06/2023 - 10:29
2 Vecina de Playa... Jue, 22/06/2023 - 10:52
3 Tierra Jue, 22/06/2023 - 15:08
Añadir nuevo comentario