Los abonados siguen recibiendo facturas excesivas que no se corresponden con su consumo: las quejas se centran en los contadores y en la deficiente atención al cliente
Las facturas abusivas de Canal Gestión no cesan
Los abonados siguen recibiendo facturas excesivas que no se corresponden con su consumo: las quejas se centran en los contadores y en la deficiente atención al cliente
“El servicio de abastecimiento de agua en la isla de Lanzarote se ha convertido en un problema para la ciudadanía”. Así comienza el texto con el que la asociación Movimiento Vecinal Argana Viva ha iniciado una recogida de firmas para exigir “que cesen los abusos a los abonados y se pongan manos a la obra para una mejora sustancial del servicio de abastecimiento de agua potable”.
La petición va dirigida tanto a la empresa Canal Gestión Lanzarote como al Consorcio insular del agua, que es el titular del servicio. Las quejas de usuarios por facturas desorbitadas que no se corresponden con su consumo de agua se suceden por toda la Isla desde hace años, pero se han multiplicado en los últimos meses. Los usuarios no solo se quejan de esas facturas sino también de la impotencia a la hora de reclamar.
Diario de Lanzarote ha vuelto a hablar con algunos de estos afectados. Una de ellas es Olimpia Martín. En agosto del año pasado recibió una factura de 1.323,98 euros por el consumo de su casa en Playa Honda. “Primero me avisaron de que había un consumo elevado de agua, sin saber el importe, y les dije que fueran a verificar el contador”, señala. El fontanero, tras una visita, certificó que no había avería. “Después me llegó la factura y dije: esto es imposible”. La empresa tardó cuatro meses en mirar el contador. Sin cambiar nada, la siguiente factura es de 44,95 euros, “luego el problema será del contador, no de una fuga”, recalca.
Olimpia aún no ha pagado la factura, ha reclamado ante el Consorcio y le dicen que lo van a investigar, pero no sabe nada más. Seis meses después de aquello le llegan otras dos facturas, que juntas suman casi 800 euros, en esta ocasión por una avería. Le dicen que le descuentan el cuarenta por ciento pero solo de una factura, no de la suma de todas. “Si es la misma avería, que me hagan el descuento conjunto”, señala.
Canal Gestión tiene varias tarifas para el agua doméstica, por tramos, que están pensadas para penalizar el consumo excesivo. Así, hasta diez metros cúbicos, el precio es de 060 euros; hasta 30 de 1,03, hasta 40 de 1,75 y a partir de ese consumo se factura a 3,69, aunque en teoría, si se trata de una pérdida, se factura a 2,09. Pero los usuarios se quejan de que se esté aplicando ese precio excesivo cuando no se trata de un consumo voluntario sino de una fuga. “Esto es la ley de ellos”, dice Felipe Castro, que también ha recibido facturas abusivas.
“Si tengo un consumo elevado, vale, pero por una avería no me cobres el tramo más caro”, asegura. Le llegó una factura de 3.600 euros, aunque apareció primero el cargo en el banco antes que la factura y, haciendo el cálculo con la tarifa más barata, ese mismo consumo le saldría por 470 euros.
Castro se queja también del servicio de atención al cliente, que no aporta soluciones. Presentó reclamación a Consumo y al Consorcio y dice que no ha obtenido respuesta, a pesar de que en diciembre la presidenta del Consorcio y del Cabildo, Loli Corujo, solicitó a los abonados públicamente que presentaran todas sus quejas ante el Consorcio porque la situación era “insostenible”.
En el caso de Felipe, la posible fuga debería estar dentro del aljibe que, por otra parte, estaba casi recién arreglado. “¿Cómo sé yo que lo que me aplican es por el contador o por una posible avería?”, se pregunta.
Otra de las quejas más habituales tiene que ver precisamente con los contadores: con los cambios sin permiso o sin avisar y con el hecho de que se contabiliza el aire y no el agua. A Gonzalo Pérez le llegó una factura de 350 euros. “Voy al cuarto de contadores –explica- y está dando vueltas como un loco y hay una pequeña fuga, como el agua que sale de una jeringuilla, y el suelo mojado, a unos cinco centímetros del contador hacia mi casa”.
La siguiente factura fue de 2.600 euros, correspondiente al agua de tan solo doce días desde la última lectura. “Lo malo es que cuando fueron a ver el contador, que ya estaba roto, ya estaba la fuga, y la vieron y no avisaron”. “Legalmente no sé si tienen obligación, pero moralmente...”, señala. El precio de la factura “es todo aire, no puede ser agua”. Acabó pagando 1.400 euros por el descuento. Hizo reclamaciones a Canal Gestión y al Consorcio, pero no sirvió.
Dice que en Zaragoza, donde el servicio es municipal, a su hermano le pasó algo parecido y le anularon la factura: “Aquí sientes impotencia porque no puedes hacer nada. El Consorcio no soluciona nada y no parece que les afecte mucho una actuación inmoral para un servicio básico”.
Samuel Ramírez.
Sin aviso de las pérdidas
Otro caso más de cambio de contador, factura abusiva y aviso tardío. A Juani Romero, que vive en el Barranco de las Truchas, en Tías, le llegó una factura de 1.500 euros en junio de este año. “Ya tenía la avería y no me avisaron”. De lo que sí le han avisado, cuando fue a reclamar, es de que le va a llegar otra de 1.800. “Yo no he visto salir esa cantidad de agua”, dice.
“Reclamé y me dijeron que a lo mejor tengo piscina, pero no es así”
Antes de romper la terraza para arreglar la tubería, lo que hizo fue poner otra tubería, pero desde su casa ve averías en esa zona “a diario, y tardan cuatro días en venir a arreglarlas”. La empresa también le ha dicho que solo le puede hacer el descuento en una de las facturas, no en la suma de ambas, aunque sea la misma avería.
También le han dicho que no tienen obligación de avisar: “Al final les voy a tener que dar las gracias”, dice irónicamente: “¿Tres meses perdiendo agua y no avisan?”. De momento, está esperando a que le llegue la segunda factura para reclamar aunque asegura que le han dicho que “hay poco que hacer”, aparte de pagarla fraccionada, porque, si no, le cortarán el agua. “No nos podemos quedar quietos porque, si no, seguirán haciendo lo que les dé la gana”, señala.
La primera factura con un consumo elevado que recibió Verónica fue en 2013, de unos 400 euros. Pagó, a pesar de que presentó un informe de fontanería que afirmaba que todo estaba bien. Desde hace dos años ha vuelto a recibir esas facturas, tanto ella como sus vecinos. Dice que debe de haber una fuga en la urbanización que no se localiza. “Nos facturan casi el doble a todos”. Reclamó una factura de casi 300, le dijeron que había un problema en el contador, y de hecho se lo cambiaron, y que le iban a abonar lo facturado indebidamente, pero le devolvieron 4,62 euros. En esa casa, en la que ahora no vive nadie, ha llegado a recibir una factura de 30 euros sin haber abierto el grifo.
A Samuel Ramírez, en su casa de Güime, también le cambiaron el contador sin avisar. Pasó de pagar lo normal a pagar primero 170 euros y después 465, con el mismo consumo. “Reclamé y me dijeron que a lo mejor tengo piscina, que no tengo”, señala. Le han certificado que no había avería y de momento no ha pagado, pero se pregunta cómo será la siguiente factura y se plantea si no le saldría más rentable pagar una cuba de agua, llenar el aljibe y suministrarse desde ahí.
José Luis Hernández.
Membranas
En el texto de la recogida de firmas de la asociación Argana Viva se dice que los problemas de presión y aire en las tuberías se solucionarían, en parte, instalando un purgador o membrana en cada instalación. En ese caso está José Luis Hernández, que le reclama a la empresa la posibilidad de instalar una de esas membranas, incluso haciéndose cargo del coste. “Sirve para sacar el aire antes del contador, porque cuando cierran el suministro, el aire que se queda ahí te lo facturan”.
“Si consumo mucho, vale, pero por una avería no me cobres el tramo más caro”
“Me dicen que no me entra aire, pero compruebo que el contador corre y no entra agua”, señala. Le llegó una factura de 354 euros y le devolvieron 120 a los cuatro meses. Vive en Mácher y dice que en esa zona “las tuberías están hechas una mierda”. “Me dicen que hagamos una reclamación en conjunto, pero no hay manera”, concluye.
Entre las reclamaciones que se hacen en la recogida de firmas están los cortes de agua continuos y averías que se repiten una y otra vez, problemas de presión, la ausencia de un órgano que haga valer los derechos del consumidor o el servicio de atención al cliente de Canal Gestión Lanzarote, que no ofrece respuestas adecuadas y obliga a los usuarios a acudir a los tribunales.
Mientras tanto, el Consorcio del Agua, que es el titular del servicio, tampoco da soluciones adecuadas a los usuarios, ni sanciona a la empresa concesionaria, ni fiscaliza su trabajo por si estuviera incumpliendo su contrato.
Comentarios
1 la guerra Jue, 14/10/2021 - 15:47
2 Deo Jue, 14/10/2021 - 16:56
3 María Jue, 14/10/2021 - 21:14
4 María Jue, 14/10/2021 - 21:15
5 Luis Jue, 14/10/2021 - 23:39
6 Lola Vie, 15/10/2021 - 16:21
7 Óscar Sáb, 16/10/2021 - 15:07
8 Rossi Sáb, 16/10/2021 - 20:46
9 Vecino Lun, 18/10/2021 - 12:25
10 TERESITA DE JESUS Lun, 18/10/2021 - 14:35
11 Paola Vie, 05/11/2021 - 23:14
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