Las claves del Plan General: reduce el suelo público, deja sin ordenar grandes sectores e impulsa el uso comercial
Casi cuatro años ha tardado el Gobierno de Canarias en poner sobre la mesa su proyecto de Plan General de Ordenación (PGO) para Arrecife. El debate sobre el modelo de ciudad para las próximas décadas arranca ahora. La alcaldesa, Eva de Anta, ha anunciado la convocatoria de una Mesa del Territorio con la participación de agentes sociales. La aprobación inicial del planeamiento se decidirá en el pleno de la Corporación municipal, pero antes se prevé una amplia discusión.
Suelo público
Uno de los grandes cambios que pretende introducir el Gobierno en el nuevo Plan General es hacer tabla rasa con el sistema diseñado en los años 90 para que la ciudad dispusiera de suelo para espacios libres o equipamientos públicos. La fórmula que se utilizó fue compensar a los propietarios del suelo que se definió de uso público con terrenos en otros sectores pendientes de desarrollar.
En el nuevo PGO se destaca que “gran parte” de esos espacios públicos previstos “no se han desarrollado”, bien porque se adscribían a piezas de suelo que no se han urbanizado o bien porque se vieron inmersos en procedimientos judiciales. El Gobierno reconoce que “con carácter general, y salvo en casos muy puntuales”, los tribunales han rechazado las expropiaciones solicitadas por los propietarios.
A pesar de ello, el Gobierno decide poner “en crisis el modelo del planeamiento vigente” en Arrecife con el argumento de que la ciudad ha crecido y “muchos” de esos suelos públicos reservados se han “quedado encapsulados en tramas urbanas” o que “eran de escasa entidad”, que se encontraban “en los barrios” y que no tenían carácter “estructurante” para la capital de la Isla.
No obstante, Política Territorial admite que en la actualidad Arrecife tiene menos suelo público real del que marca la ley, que establece una reserva de cinco metros cuadrados por habitante. Arrecife apenas llega a tres metros por persona y registra un “déficit” de espacios públicos superior a 115.000 metros.
El Ayuntamiento ganó en los tribunales un pleito por una parcela en Valterra que obtendría por compensación y ahora el Plan General cambia de criterio y permite que se construya
Un ejemplo claro del cambio de criterio que quiere introducir el Gobierno en el Plan General en una pieza de suelo que hasta ahora tenía destino público en su totalidad: se trata de una parcela en Valterra, junto a la Vía Medular, de unos 7.500 metros cuadrados. A la sociedad propietaria, vinculada al empresario Fernando González Berriel, se le compensaba en una gran pieza urbanizable, denominada Capellanía, junto al barrio de San Francisco Javier.
En este caso, los tribunales dieron la razón al Ayuntamiento, rechazaron que el suelo en Valterra tuviese la clasificación de urbano, negaron una expropiación por 8,8 millones de euros y no consideraron irregular que al dueño se le compensara en Capellanía. Sin embargo, en el nuevo Plan General dirigido por el viceconsejero de Política Territorial, Jesús Romero, se le asigna una edificabilidad de más de 5.600 metros cuadrados, por la que se podrán levantar edificios de tres plantas de uso residencial.
Como el de Valterra hay más casos de terrenos que están clasificados en el planeamiento en vigor como urbanizables. El Ayuntamiento ha defendido en los tribunales que carecen de los servicios necesarios para ser considerados urbanos (viarios, suministro eléctrico, de agua o evacuación de aguas residuales para todo lo que se pudiera construir), la Justicia ha avalado las tesis municipales y el nuevo Plan General los eleva de categoría, a suelos urbanos.
Falta de ordenación
El nuevo Plan interviene principalmente en las bolsas de suelo que no se han construido en Arrecife y recoge hasta 23 unidades de actuación de suelo urbano no consolidado, delimita nueve áreas de renovación en suelo urbano consolidado y establece los parámetros de 12 sectores de suelo urbanizable, que son los futuros polígonos industriales y comerciales o las urbanizaciones residenciales de la capital. Los propietarios de buena parte de estos sectores han presentado a la Consejería de Política Territorial las propuestas para que sus suelos saliesen ya con ordenación pormenorizada, evitar años de tramitación y poner en marcha la ejecución de los proyectos de urbanización.
Tenorio es el único de los grandes sectores urbanizables que sale ordenado en el Plan entregado por el Gobierno al Ayuntamiento de Arrecife. Dispondrá de 158.000 metros de uso industrial y más de 9.300 de comercial, con 28 parcelas lucrativas. Pero si se aprobase el PGO como está ahora, otras importantes piezas de suelo cuyos promotores han mostrado interés en su desarrollo y que han presentado los correspondientes planes parciales al equipo redactor, se verían abocadas a una tramitación que puede alargarse durante varios años, por los precedentes que se han visto en la propia capital de la Isla.
En esa situación estarían La Bufona, entre la sede del Cabildo y la urbanización del Cable, con más de 200.000 metros residenciales para 616 viviendas, las dos piezas de las Salinas de Naos, de unos 185.000 metros y más de 700 viviendas previstas, un polígono industrial en Altavista, al sur de Tenorio, y otro polígono industrial en la trasera del muelle de Los Mármoles.
En cambio, para otras piezas de suelo de menor entidad, el Plan General sí recoge una ordenación pormenorizada, con las parcelas resultantes, que facilita su desarrollo a los propietarios y agiliza los trámites para su urbanización y construcción. Es lo que sucede en San Francisco Javier, Altavista o Argana.
Más comercial
En todo el casco antiguo se define como uso principal el residencial, pero también son compatibles el industrial, como pequeño almacén, el terciario (comercial, ocio y espectáculo, hostelería y oficinas) y el turístico, con la posibilidad de albergar hoteles urbanos o emblemáticos. Lo mismo sucede con el entorno del Charco de San Ginés. De hecho, en la mayor parte de las zonas de la ciudad se permite como uso compatible o alternativo el terciario. Este uso cuenta con una ordenanza específica y, en el suelo en el que se aplica, se permiten prácticamente todas las actividades salvo utilizarlo como residencial o turístico.
Así sucede donde se ubicaban las antiguas naves de la conservera Garavilla, recientemente demolidas, que cuenta con unos 30.500 metros cuadrados de superficie, en los que se podrían construir cuatro plantas en edificaciones de uso comercial, con una edificabilidad de 35.300 metros cuadrados. La empresa propietaria, Promotora Parque Islas Canarias, solicitó el verano pasado la licencia que tramita el Gobierno de Canarias para la construcción de un centro comercial. Con el nuevo Plan General, tendría que elaborarse un plan específico para ordenar la manzana.
El PGO también asigna uso comercial a una importante pieza de suelo de 43.700 metros cuadrados en la parte trasera del muelle de Naos, desde las antiguas instalaciones de Agramar hasta las inmediaciones de la Comisaría de la Policía Nacional. Similares condiciones se fijan también en las cercanías de la Comisaría, donde se ubica la tradicional zona industrial y comercial de Naos.
Más detalles
GINORY. El nuevo PGO establece para el solar frente a Ginory, junto al Charco de San Ginés, edificios de siete plantas de altura, al igual que en el Islote del Francés. También permite construir en más de la mitad de la parcela de 11.552 metros cuadrados, calificada espacio libre en el planeamiento municipal en vigor. Sobre ellos se podrían levantar hasta 17.328 metros construidos en edificios con siete plantas o 25,9 metros de altura.
LAS VÍRGENES. A unos metros del barrio de Argana Alta, la zona de Las Vírgenes tiene decenas de viviendas construidas sobre suelo rústico, algunas desde los años 80. El PGO define una unidad de actuación de casi 66.500 metros, donde cabrían unas 332 viviendas. Quedan excluidas unas pocas viviendas, al noreste.
ALTURA EN BARRIOS. El nuevo Plan General de Ordenación aumenta la altura en buena parte del barrio de Titerroy para permitir cuatro plantas. En la barriada de Valterra se incrementan a tres las plantas máximas autorizadas. En el entorno de la calle Triana también se incrementa la altura de las edificaciones para que la zona tenga un carácter homogéneo.
Comentarios
1 Mismo Mar, 06/02/2018 - 08:21
2 Pufete Mar, 06/02/2018 - 09:23
3 Ciudadano Mar, 06/02/2018 - 11:08
4 Muy raro Mar, 06/02/2018 - 11:21
5 Juanca Mar, 06/02/2018 - 11:28
6 Tara Mar, 06/02/2018 - 11:38
7 Lalo Mar, 06/02/2018 - 11:43
8 El tumor Mar, 06/02/2018 - 14:18
9 Amigos del gran... Mié, 07/02/2018 - 08:52
10 Tara Mié, 07/02/2018 - 12:05
11 Anónimo Mié, 07/02/2018 - 12:12
12 Lola Mié, 07/02/2018 - 18:10
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