Corría el minuto 13 de la primera parte del encuentro ante el Granitos Ibéricos Carballal, señalando los colegiados un lanzamiento de siete metros a favor del cuadro gallego. Bajo la portería del LandBit Lanzarote San José Obrero se situaba Javi de la Cruz, guardameta que regresaba a las canchas de juego tras superar un cáncer, y lo hacía de la mejor manera posible, parando el penalti. Una anécdota en el duro camino que ha tenido que recorrer Javi de la Cruz en los últimos meses, con una operación a vida o muerte, y 21 duras sesiones de quimioterapia.

A la conclusión del encuentro, Javi de la Cruz rememoraba el momento de su regreso, asegurando que “tenía muchas ganas, han sido meses muy duros”, y señalaba que “volver a estar sobre una cancha de juego es un sueño para mí desde hace unos meses”. Desde el verano ha estado luchando contra un cáncer, y el San José Obrero lo ha esperado hasta que estuviera totalmente restablecido.

Su particular calvario comenzó a los pocos días de cerrar su fichaje de cara a la temporada 2023/2024 por el LandBit Lanzarote San José Obrero. “Empecé con unas molestias, fui al médico y me detectaron un tumor”, recuerda Javi de la Cruz como fueron los primeros momentos, y a partir de ahí “operación y tres meses de quimioterapia, con 21 sesiones”. Hace apenas dos semanas se incorporó a los entrenamientos de su nuevo equipo, y asegura que aún le queda “mucho que trabajar, pero con la mayor de las ilusiones”. 

Desde el primer momento recibió el apoyo de Marko Dzokic, exjugador del San José Obrero y que vivió una enfermedad similar a la de Javi de la Cruz hace unos años. “Cuando lo pasas tan mal, el aspecto psicológico es lo único que está en tus manos y tienes que ser lo más positivo posible dentro de lo mal que lo estás pasando”, comenta el portero y agrega que “el apoyo de la gente que lo ha superado ayuda mucho”.

Un apoyo que agradece y que le ha servido para superar los duros meses por los que ha tenido que pasar. No duda en prestar su apoyo a todas aquellas personas que lo necesiten, y por ello, matiza que “cualquier persona que tenga que pasar por lo que yo he pasado, siempre va a tener todo mi apoyo”.

Javier de la Cruz volvía a sentirse en la noche del miércoles portero de balonmano, disfrutando de algunos minutos defendiendo la portería del LandBit Lanzarote San José Obrero. “Han sido muchas emociones las que se me han pasado por la cabeza y he tenido la piel de gallina mucho rato”, explica el jugador, y agrega que “el apoyo del público y de todos mis compañeros es inmejorable”.