Balón de oxígeno para el Ayuntamiento de Arrecife. El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha rechazado la demanda interpuesta por un grupo empresarial que reclamaba que se le expropiasen miles de metros cuadrados, principalmente donde se encuentran el campo de fútbol y los colegios de Altavista.

Uno de los principales argumentos del TSJC es que como está en marcha la revisión del Plan General de Ordenación (PGO), será en este procedimiento donde las empresas tendrán la “posibilidad” de “alegar” lo que consideren.

El recurso judicial tiene su origen en la solicitud que efectuaron al Ayuntamiento, en octubre de 2012, las empresas Fabrecar, Tamicar, Bermúdez y Cabrera, y Rosario Cabrera Tavío e Hijos, para que corrigiese un “error” de carácter “grave” en el planeamiento municipal aprobado en 2004, que no recurrieron entonces, pero que ahora pretendían que se anulase en lo que les afectaba a sus parcelas.

El Plan General en vigor contempla que, para obtener diferentes piezas de suelo, en la actualidad de uso público, como el campo de fútbol de Altavista, el Ayuntamiento compensaba a los propietarios con terrenos en el polígono industrial de Tenorio.

El Tribunal destaca que las empresas que demandaron al Ayuntamiento capitalino pueden alegar en el proceso en marcha de revisión del Plan General de Ordenación

En concreto, Tenorio tiene según el PGO de 2004 unos 37.000 metros cuadrados de suelo destinados a compensar a los dueños de suelo con destino público en otras partes de la ciudad. La base de la demanda es que las empresas consideran que su suelo es urbano y el de Tenorio urbanizable, pero la Justicia no lo ha tenido en cuenta.

En su sentencia, el TSJC considera una “desviación procesal” el intento de tumbar de forma “indirecta” el Plan General aprobado hace 13 años. El Tribunal también incide en que cuando emprendieron acciones legales hace cinco años ya estaba en tramitación el nuevo PGO, bajo el control del Gobierno de Canarias.

El grupo empresarial logró en 2007 que se fijase en 8,3 millones el justiprecio del suelo del colegio de Los Geranios y en unos ocho millones el del colegio Adolfo Topham, acuerdos luego anulados por los tribunales. Por el suelo del campo de fútbol y los colegios de Altavista llegaron a pedir 18 millones de euros.