La Asociación insular de empresarios de hoteles y apartamentos de Lanzarote (Asolan) ha confirmado este miércoles que ha impugnado en los tribunales el Plan Hidrológico que está en vigor desde el pasado noviembre, que restringe la posibilidad de instalar plantas desaladoras privadas.

En la actualidad existe al menos medio centenar de plantas desaladoras privadas, vinculadas a complejos turísticos, que fueron autorizadas de forma temporal ante las dificultades en su día del Consorcio del Agua para garantizar el abastecimiento.

Sin embargo, tanto el Plan Insular de 1991 como el Plan Hidrológico de Lanzarote de 2001 y el nuevo planeamiento, aprobado directamente por el Gobierno regional en noviembre del año pasado, establecen que la desalación es una competencia pública.

El presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, indicó tras la junta del Consejo insular de Aguas del lunes pasado que el nuevo Plan Hidrológico que se prevé aprobar este año mantendrá la exclusividad pública en la desalación y marcará un plazo para que los establecimientos con desaladora privada se enganchen a la red general.

La patronal sostiene que la restricción al autoconsumo “afectará muy negativamente a la competitividad de las empresas”, “poniendo en algunos casos en peligro su viabilidad”

La patronal hotelera destacó este miércoles que el Plan Hidrológico que aprobó el Gobierno, que ha recurrido ante la Justicia, “introduce una restricción de derechos que para nada se contiene en la legislación autonómica de aguas, vedando prácticamente la iniciativa privada y el autoconsumo”.

“No solamente se introduce una regulación más restrictiva de los derechos adquiridos sino que, vía reglamentaria y sin indemnización ni audiencia al afectado ni, tampoco, justificación de causa de utilidad pública, supone, de facto, dejar sin contenido patrimonial” las instalaciones de desalación privadas, considera Asolan.

La patronal turística señala que “en muchos casos” las plantas desaladoras privadas “ni siquiera habrán sido amortizadas” y considera que “en su momento fueron y siguen siendo necesarias para el correcto funcionamiento de los establecimientos”.

“Agravio comparativo” con otras Islas

Asolan asegura que “Lanzarote es la única Isla de Canarias donde se persiste en un régimen restrictivo para el autoconsumo, lo que afectará muy negativamente a la competitividad de las empresas aquí radicadas, poniendo en algunos casos en peligro su viabilidad”.

La patronal hotelera considera que la Administración no ha dado “una respuesta convincente a dicho agravio comparativo para con el resto de los Planes Hidrológicos” que, al igual que el de Lanzarote de noviembre pasado, fueron aprobados de forma transitoria ante la amenaza de la Unión Europea de sanciones por no actualizar los planeamientos.

“Negligente gestión” durante años

Asolan sostiene que “no es cierto que el posible incremento del precio del agua se realice como consecuencia del mantenimiento de las desaladoras, por el contrario, está directamente relacionada con la negligente gestión y políticas aplicadas durante años en materia de aguas en Lanzarote”.  “La optimización del precio no debe ser a costa de los sectores económicos que sostienen la Isla”, como la agricultura, la industria o el turismo, apunta la patronal hotelera.

En ese sentido, la organización empresarial responde al presidente del Cabildo, quien dijo que el precio más caro por el agua que paga la industria turística permitía que el consumidor doméstico disfrute de una tarifa más reducida. San Ginés afirmó que se trataba de una especie de “redistribución” de la riqueza que generaba la Isla.