Por un voto se convirtió en candidata de Podemos al Cabildo. Quiere pasar de la sala de máquinas, tras años como jefa de Patrimonio Histórico, al puente de mando de la institución. Nona Perera está convencida de que podrá aglutinar a la izquierda insular, que ha solido tender hacia la fragmentación. En ese reto “no sobra nadie”, insiste.

-A Nona Perera se le conoce por haber sido durante años jefa del departamento de Patrimonio Histórico del Cabildo. El año pasado ya sorprendió que se presentara para formar parte del Consejo autonómico de Podemos y ahora a las primarias para aspirar a la presidencia de la Corporación insular. ¿Qué le ha motivado a dar este paso?

-Estar cuatro años alejada de la primera línea en el Cabildo me ha permitido cambiar la visión que tenía de la administración insular. Cuando estás en un departamento vas trabajando y atendiendo a las solicitudes que llegan, pero estás al margen y apartada de las grandes líneas estratégicas de la institución y te preguntas qué es lo que motiva las decisiones que se toman en el ámbito político. Desde luego que no es la ciudadanía. Son otros intereses los que influyen, ajenos a los problemas que tiene la gente.

-Es su primera experiencia dentro de un partido político. De estos pocos meses, ¿qué es lo que más le ha sorprendido, tanto en el aspecto positivo como en el negativo?

-No tengo experiencia en partidos políticos, pero sí en asociaciones feministas, antimilitaristas y ecologistas desde los años 70. Gratamente me ha sorprendido la capacidad de trabajar. Sin conocer a la gente, hubo una conexión con los que se han sumado a esta pequeña experiencia, porque el objetivo es el mismo. Es agradable descubrir que ha sido fácil trabajar con personas a las que no conocía de nada. Lo más difícil es conseguir que se rebajen los egos, y me incluyo. La humildad es importante. Me parece que en esto sí que se ha fallado y tenemos que aprender.

-Cuando apuesta por liderar la candidatura de Podemos al Cabildo lo hace anunciando que su vocación es abrir un proceso de confluencia con otras fuerzas progresistas. ¿Qué aportaría esa especie de ‘frente amplio’ a la vida política de Lanzarote’

-Resolución. Debemos indagar las problemáticas más acuciantes que tiene la ciudadanía y planificar cómo resolverlas. Se necesita a la gente más competente y comprometida que haya en la Isla, personas cualificadas que sepan trabajar en equipo. Y los ciudadanos tienen que sumarse, hacer un seguimiento y fiscalizar, para hacerles partícipes de todo el proceso, y que conozcan incluso las dificultades que puedan surgir. La confluencia debe ser con los partidos progresistas que se quieran sumar y también con la ciudadanía, incluyendo a los que quieran participar de forma directa en el equipo que trabaje en el Cabildo, aunque no formen parte de una organización política.

-Con las primarias de Podemos al Cabildo de Lanzarote ha dado la impresión de que se ha fragmentado la energía de la organización. ¿Cree que se puede reconstruir?

-Claro que sí. Creo que es muy duro perder por un voto, es tremendamente duro. Y hay que reconocer que la victoria ha sido no débil pero sí al límite. Estoy convencida de que no sobra nadie. Si invoco la confluencia y la participación ciudadana tengo que empezar por mi propio partido. Hay que limar asperezas, encontrar el puesto idóneo para cada uno y trabajar en equipo con grandes dosis de humildad.

“Hay que reconocer que la victoria ha sido al límite. Estoy convencida de que no sobra nadie. Si invoco la confluencia y la participación ciudadana tengo que empezar por mi propio partido”

-Hace referencia a que no solo se produzca una confluencia entre partidos progresistas sino con ciudadanos que tengan inquietudes. En un momento de desprestigio de la actividad pública como el que se percibe en la actualidad, ¿qué considera que tiene su movimiento para atraerles a la arena política?

-Ofertamos a los ciudadanos que sean partícipes en el cambio que necesita Lanzarote y pasar de las palabras a los hechos. En una Isla en teoría tan solvente económicamente y a la que vienen tantos millones de turistas debe de haber un compromiso con la formación de los jóvenes. Igual que en el plano laboral. No se pueden permitir los abusos que sufren las kellys en el sector turístico de la Isla. Ese turismo de sangre que acaba con la salud de la gente debe terminar y que Lanzarote sea una Isla ejemplar, con sueldos dignos y equiparados a las tareas que se realizan y a la riqueza que se genera.

-Dice que apuesta por pasar de las palabras a los hechos en la gestión del Cabildo. El actual grupo de gobierno, cuyo núcleo duro está compuesto por CC y PP, defiende que ha pasado de la teoría a la práctica en ámbitos de la sostenibilidad como las energías renovables o la gestión de los residuos. ¿No lo considera suficiente?

-No. Solo refleja que hay un periodo electoral a la vista. Desde que se designó a Lanzarote como Reserva de la Biosfera hasta la actualidad no se ha cumplido ni uno de los programas de desarrollo sostenible que se han ido estableciendo. La presidencia del Cabildo puede decir lo que quiera, pero los hechos son que la situación de los residuos en la Isla no está resuelta, que tenemos una alta dependencia de energías contaminantes, a mucha gente viviendo en situación precaria y un grave problema de vivienda. También falta por resolver nuestros propios consumos y garantizar la sostenibilidad en la alimentación. En prácticamente todas las facetas hay déficits, incluso a la hora de adoptar decisiones. En una Reserva de la Biosfera la ciudadanía tiene que estar representada en la toma de decisiones, pero no lo está. Se está fallando y lo cierto es que es necesario un cambio de rumbo drástico en Lanzarote.

-El órgano de representación en el Cabildo es el pleno, el escenario habitual de la crítica política y de los intercambios dialécticos entre los partidos. Durante las primarias de Podemos llegó a criticar que ese foro se hubiese convertido en algo así como un circo. ¿Cómo cree que se puede mejorar su funcionamiento?

-En los plenos habría que tomar las mejores decisiones, adoptar soluciones a los problemas y dar salida a iniciativas previamente presentadas y trabajadas. No creo que haya que ir a los plenos ni a insultar ni a evadir responsabilidades propias sobre otros grupos. Eso me parece una pérdida de tiempo. Parece que la gente se ha acostumbrado a encender la televisión y ver en los plenos un espectáculo. Muchas personas se pueden preguntar si para eso están pagando a unos representantes, para que se peleen entre ellos, cuando deberían ser espacios resolutivos. Muchas veces la controversia se inventa. Igual que lo que puede que ha pasado en Podemos, donde un voto se presta a ridiculizar la victoria o a que el dolor fluya más por haber perdido. Parece que somos más listos cuanto más insultamos o más guapos si le decimos los fallos al otro.

-Aunque no forma parte todavía del pleno del Cabildo, su nombre ha salido a relucir en los últimos debates, por la adquisición de un inmueble protegido, en la calle Fajardo de Arrecife, para que fuese sede del museo arqueológico insular. ¿Qué tiene que decir sobre un asunto que ha estado envuelto en la polémica?

-Asistí a un pleno, obligada, para contestar a unas preguntas que hacía el PP hace cuatro años y medio. ¿Cuál es el problema de haber adquirido la casa? No veo ninguno, excepto lo que se ha hecho después de haberla adquirido. Estoy convencida de que la casa es idónea para un museo y que es un inmueble relevante para el patrimonio cultural de la Isla. Sobre el precio, la verdad es que participé poco en la valoración de la casa, pero estoy de acuerdo en que se pagara a plazos y la cifra que finalmente se estableció como la correcta. ¿Qué se ha hecho después de comprarla? Destrozar las dos naves, cargarse los techos, los estucos, el pavimento y no sé qué más porque no participo de esa gestión. ¿Qué se le achaca al Cabildo? Que no se atendiera a otras necesidades. El dinero que se destinó a la casa en aquel momento se nos dijo que no podría ir a otras necesidades. Entre mis funciones como jefa de Patrimonio estaba formular propuestas. Junto a la adquisición de la casa también propuse seguir con los expedientes de declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) de La Geria, del Charco de San Ginés y decenas más que no se han tenido en cuenta. ¿Qué es lo caro? Que el Cabildo tenga millones en los bancos y que no se destinen a necesidades de la Isla. Eso es mala gestión. Invertir en un inmueble relevante para el patrimonio histórico me parece una buena inversión.

“Lo caro es que el Cabildo tenga millones en los bancos y que no se destinen a necesidades de la Isla. Eso es mala gestión”

-El Cabildo tiene una fragmentación política importante, con hasta ocho fuerzas representadas en la actualidad. Es más que probable que, después de las elecciones de mayo, sea cual sea el resultado, se requiera de un pacto para gobernar. ¿Qué predisposición tienen para llegar a posibles acuerdos, por ejemplo con el PSOE, y qué le piden si se da ese escenario?

-Una cuestión es, antes de las elecciones, la confluencia entre partidos de izquierdas y la ciudadanía que quiera sumarse y otra, tras las elecciones, si se da el caso de llegar a acuerdos y con qué partidos. En el actual grupo de gobierno se reparten las áreas y ya está, y entran en conflictos por cuestiones generales. Es básico ponerse de acuerdo previamente en un programa de medidas, porque si no, no se pacta. Y los ejes básicos que necesita Lanzarote deben ser una realidad en cuatro años. Creo que, en cualquier caso, va a haber muchas dificultades, pero también es un reto para demostrar capacidad.

-En los tres años y medio de Podemos en el Cabildo no le ha temblado el pulso a la hora de acudir a los tribunales. De hecho, se ha abierto la fase de juicio oral en el caso de la desaladora contra el presidente, el secretario y el exgerente del Consejo de Aguas, a los que su partido acusa de prevaricación. ¿Qué harán después de las elecciones, en este caso concreto y en otros supuestos parecidos?

-Continuar adelante. Hay cosas que, por su trayectoria, tienen que ir a los Juzgados y no hay ningún problema. No somos los que juzgamos sino los que colaboramos con la Justicia. Creo que Podemos en el Cabildo ha hecho un trabajo ejemplar y es necesario contar con la gente que ha estado ahí, en este mandato, por su experiencia. Todo lo que sea sospechoso, a los tribunales. Y todo lo que sea susceptible de mejorar, trabajar para hacerlo. Eso no va a cambiar.