El secretario general del PSOE de Arrecife, José Montelongo, se ha desvinculado de la decisión del alcalde del Consistorio capitalino, Manuel Fajardo, de retirar las banderas oficiales que ondean en la sede de la Corporación y arriar la enseña nacionalista, que incorpora a los colores canarios siete estrellas verdes, con motivo del Día de la Bandera.

“En primer lugar, debo aclarar que en ningún momento fui informado de este hecho por parte de los socios de Coalición Canaria, quienes actuaron de manera unilateral y caprichosa”, señala Montelongo.

Respecto al hecho en sí, los socialistas de Arrecife manifiestan su respeto a las banderas oficiales. La canaria tiene tres franjas verticales blanca, azul y amarilla con el escudo central.

Además, según señala Montelongo, “el Ayuntamiento de Arrecife es la administración pública que representa a todos los vecinos y vecinas residentes en la capital, nacidos en cualquier parte del mundo y con las ideologías más dispares”.

“Y por tanto”, agregó, “la neutralidad de las insignias y símbolos debe ser defendida en cualquier caso, sin interferencias partidarias de ningún tipo”. A su juicio, el izado de banderas “políticas” debe hacerse “en espacios y contextos vinculados a los partidos o ideologías y nunca en las instituciones que representan a toda la comunidad”.

Respaldo del 50 aniversario

Por su parte, la Coordinadora 22 de octubre, integrada por organizaciones, colectivos y personas que a título individual han sumado esfuerzos para la conmemoración del 50 aniversario de la bandera nacional canaria, tricolor con siete estrellas verdes, aplaudió la decisión del alcalde.

Así, se retiraron las banderas oficiales, “incluida la del Estado español y la de la comunidad autónoma, para izar, en el lugar que suele ocupar la española, la bandera que, aun sin ser oficial, consideramos como más representativa para los canarios y canarias”.

Consideran desde la Coordinadora que la tricolor de siete estrellas “fue asimilada, desde su creación en el exilio en octubre de 1974, como símbolo de libertad, lucha por la democracia, igualdad y progreso social para el pueblo de Canarias”.

“Su colocación en la fachada del Ayuntamiento de la capital de Lanzarote, medio siglo después de su creación, fija un precedente muy interesante en lo que a la reivindicación de los valores que la inspiraron se refiere”, resaltan.