2 COMENTARIOS 07/04/2025 - 08:44

En esta vida es importante sentirse útil. Ni siquiera serlo, tan solo sentirlo. Hay ocasiones en que la cosa se complica: en el Senado, por ejemplo. Son todo ventajas: distancia, dietas, aforamiento…, pero hay que trabajarse la utilidad.

Para no dejar de ser la eterna promesa de la política lanzaroteña, Pedro San Ginés trabaja incansablemente. Ahora se acaba de apuntar el tanto del próximo aumento de la plantilla policial del aeropuerto: de 49 a 94 agentes.

Dice que esto “vuelve a poner de manifiesto la importancia de contar con representantes nacionalistas en el Congreso y en el Senado que puedan defender el interés de los usuarios canarios y de quienes nos visitan sin tener que pedir autorización a partidos estatales”. 

Para empezar, tarde o temprano, el Gobierno iba a tener que aumentar la plantilla porque la situación ha cambiado después del Brexit. En segundo lugar, la reivindicación nace de los sindicatos policiales.

Lo del interés de los usuarios es más que relativo. No es que haya graves problemas de seguridad, es que ahora hay que sellar los pasaportes a millón y medio de personas que van y vienen y que se han salido de la UE. Y nótese la paradoja, presumir de traer más policía nacional como un logro de un partido nacionalista que no pide autorización a partidos estatales.    

Resulta que Vox también se quiere apuntar el tanto. Ya es para hacérselo mirar. Y que el Parlamento de Canarias aprobó una proposición no de ley en ese este sentido, que la presentó CC pero fue aprobada por unanimidad. 

Ahora veremos si la medida es útil o no, porque por muchos policías que traigan, mientras no hagan una zona internacional y amplíen el número de cabinas para sellar los pasaportes, probablemente se sigan produciendo las mismas aglomeraciones.   

Comentarios

Saúl, no se puede pedir menos saturación turística y al mismo tiempo decir que lo único que mantiene a raya la situación--la capacidad del aeropuerto--tiene que incrementar. Mas bien debería reducir la capacidad de sellar pasaportes.
A ver si mejora la industria del cine y se van pallá todos estos politicuchos. O el teatro.

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