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Bar Charco Vivo (antiguo Ginory): matrimonio por excelencia

A diario, en el antiguo Ginory sirven de 180 a 200 kilos de corvina

María José Rubio 15 COMENTARIOS 24/08/2023 - 07:32

Norberto Ginory fue el fundador del bar que abrió el 5 de diciembre de 1960. Su hijo, Antonio Ginory Camejo, fue la segunda generación al mando y quien inauguró el restaurante que está al lado. Ahora, la antigua Casa Ginory, “el de toda la vida”, y el restaurante cercano, se llaman Charco Vivo.

Antonio se jubiló, su hermano Meme se desvinculó del negocio y le dio paso, tras más de 50 años de legado familiar, a Roberto Machín Barrios, un trabajador que llevaba “toda la vida” con ellos y que desde 2016 tomó las riendas del bar.

Roberto empezó de ayudante de camarero en Ginory en 1989. “Me fue a buscar Antonio cuando eran las fiestas de Soo. Me ofreció un buen horario y me quedé hasta la fecha”, recuerda de sus comienzos en el mítico establecimiento.

Cuando empezó Roberto, en la carta estaban el bocadillo de pescado rebozado y la tapa de calamares, sin muchas más opciones. “En el bar estaba la barra y poco más. El comedor no estaba. Ellos vivían aquí, donde está el comedor a día de hoy”, explica Roberto. En esa zona de la calle Juan de Quesada nació el artista César Manrique.

Ginory sigue siendo sinónimo de tradición. Muchos clientes han sido fijos durante décadas y han pasado el testigo también a sus descendientes. “Muchos venían desde chinijos con sus padres”. Roberto recuerda, por ejemplo, a la gente “de la pastelería La Salud, que venían siempre, o a la familia Brito, de Bricej...”. “Acudían muchos fieles”, apostilla.

En la actualidad han modificado su horario, para abrir desde las 7.30 horas de la mañana, una hora más tarde. “También nos merecemos un descanso”, indica Roberto con una sonrisa. Desde antes de las ocho de la mañana sus tres camareros “corren” llevando cafés y bocadillos de la cocina a la barra o a la terraza. Entre ellos está Juan, el más veterano.

Un clásico es llegar del aeropuerto o del barco e ir a por un bocadillo del Ginory. “Hay sábados, cuando llega el barco de Gran Canaria, que la gente está esperando a que abramos el bar para venir a por el bocadillo y a por la tapa de pescado”, comenta Roberto.

El boca a boca, sin duda alguna, es su soporte publicitario. “Hay peninsulares que vienen todos los años”, dice.

El aumento del precio de las materias primas ha afectado a este conocido bar. “Me acuerdo que la corvina la encontraba a dos euros el kilo. Ahora se han encarecido los precios y casi no se encuentra corvina ni calamar. A nosotros, evidentemente, nos perjudica la subida de precios”, detalla el propietario.

“No te queda otro remedio que subir tú también el precio. Si antes algunos clientes venían tres veces en semana ahora vienen una vez a desayunar”, dice Roberto. Un bocadillo de pescado cuesta ahora 4,50 euros. “Tal vez antes, en pesetas, no llegaba ni a un euro, estaba en unas 150 pesetas”, comenta.

Su afamado pescado tiene una receta particular. “Las recetas de Norberto se guardan en un libro. Pero, evidentemente, el rebozado tiene un secreto que no decimos. Algo mágico del padre que lo inventó. Es un rebozado con matices”, afirma Roberto.

“Las recetas se guardan en un libro. El rebozado tiene un secreto que no decimos”

A diario, en el antiguo Ginory sirven de 180 a 200 kilos de corvina, y necesitan unas 200 barras de pan. En el actual Charco Vivo siguen manteniendo las garbanzas, los calamares, el pescado rebozado y el matrimonio por excelencia. Es el plato estrella y el más vendido, sin duda alguna. ¿Cómo surgió? “Le comenté a Antonio que si poníamos juntos en un plato los calamares y el pescado, como un matrimonio que se va feliz para su casa después de comerlo”, explica Roberto acerca del origen de esta combinación culinaria.

Roberto no ha querido cambiar el estilo de la antigua casa Ginory. Si uno tira de hemeroteca, de las pocas fotografías que se pueden consultar del antiguo propietario, Antonio, el estilo sigue manteniéndose fiel. Paredes blancas, bordes azulados en los marcos de las puertas y la barra intacta. “Si la cambias, tal vez pierde la esencia”, dice el actual propietario de un bar que le ha marcado: “Es parte de mi vida”.

Imágenes

Hay antiguas cantinas y bares que forman parte de la memoria, que han sido el escenario de los primeros cafés -o coñacs-, las tapas para hambrientos a las seis de la mañana o la arrancadilla para los más rezagados en regresar a casa tras una noche de fiesta. Diario de Lanzarote hace un recorrido por una muestra de algunos de estos emblemáticos negocios, que mantienen la tradición y sus señas de identidad en un sector cada vez más plagado de franquicias y establecimientos impersonales, y que hacen honor al verso de aquella canción de los años 80: “Bares, qué lugares”.

Comentarios

Tengo el placer de haber comido en este lugar y también conozco a este hombre trabajador (Roberto) muchas felicidades amigo y espero que sigas así demostrando tradición y como no talento.
Las dos ultimas veces que he ido el pescado no sabia a nada y habia mas rebozado que pescado ahi lo dejo pero han bajado la calidad y los precios son los mismos.
Todo está bueno, pero claro un bocadillo 4,5 euros, un pan y 2 filetes de corvinato, que les cuesta el kilo 8 euros y ña aprovechan toda. Lomos para filetes. Espinas que se venden, se hacen garbanzos , croquetas, y últimamente pescado como a la portuguesa con las propias Espinas. Que pena que no cambien ña carta, sota , caballo y rey. Están los precios muy caros, 1 cortado 1,2. Refresco 1,8. zumo pequeñito apenas llena el vaso 2 euros. Los montaditos de pescado antes 1,5 ahora 2 euros, ña subida de la materia prima no justifica los precios que cobráis. Un matrimonio por ese precio y, un poquito más y te comes una ración de pescado fresco wn otro lugar. Después un fallo muy grande, en el menú por casi 11 euros, no ponen pescado, no es justo. Seguiré yendo pero 1 vez a la semana como mucho, la corvina vale el kilo refrigerada 15 euro, y 1 kilo haces muchos bocadillos, imaginé lo que ganan los dueños, una pasada, pero aquí todo el mundo a llorar..
Un bocadillo de Corvina 4,50€ no es ningún regalo. Todo se ha puesto caro cierto, cómo también lo es que algunos se aprovechan de la situación. En Uga en La Cantosa bocadillo de pata con queso ahumado 3,50€ el kilo de pata está 4 veces más barato que la Corvina. Pero no solo es el costo de la materia prima, los sueldos, la luz, el gaz y todo lo demás. Que quiero decir con ello, que ya no se puede salir por ahí sin dejarte un dinero. Los precios los ponen ellos y nosotros somos libres de elegir.
Yo estuve viajando a Lanzarote por motivos laborales más de 25 años , cada 15/30 días nunca deje de pasar por el Ginory a desayunar el día que estaba en la Isla , incluso después de jubilado he viajado de vacaciones y por supuesto la visita es ineludible , el bocadillo de pescado o el matrimonio ya es un clásico ( y por favor ) no cambien
lo que no veo justo es que critiquéis de los precios sin saber lo que gastan ellos en lo que ay que pagar para que ustedes estén bien atendidos y bien comidos y además los gastos del mantenimiento del local que no es gratis y todo ay que pagarlo
Que fácil es criticar los precios y sacando la cuenta de lo que le vale al propietario un kilo de corvina y un pan.....que bonita y que mala es la ignorancia. No solo hay que sacar la cuenta de lo que vale un pan y la corvina, también hay que contar la parte proporcional de la la luz, el agua, el alquiler, el aceite, la harina, los huevos, los sueldos de los camareros, el robo de la seguridad social, el robo de hacienda la maquinaria con lo que se hace todo que también hay que pagarla porque no la regalan. La gente habla muy rápido sin tener ni idea de lo que cuesta mantener un negocio y creen que tener un negocio es hacerte rico en tres días sin trabajar, nada más lejos de la realidad, sin saber que muchas veces los propietarios no cobramos ni un sueldo trabajando 12 horas como mulas y llevándonos el trabajo a casa a diario. Y al que le parezca caro que se vaya al supermercado, haga la compra de todo lo necesario, se va a su cocina lo elabora, frega todo lo que ha usado y se sirve su bocadillo con un poco de suerte le puede salir a 4.40 el bocadillo. IGNORANTES
Toda la razon tiene amigo,es un bar habitual para mi y puedo decir que todos los que trabajan alli no paran y ademas tienen una sonrisa para los clientes. Respecto a los precios ¿que quieren ustedes todo por 2 euros? Todo lo que pides es de calidad y los bocadillos abundantes y sabrosos,tiene cocina de toda la vida y casera en poquitos va quedando comida asi. Los que critican que se vayan a un Macdonals a comer una hamburguesa prefabicada y miren por cuanto les sale,seguro que acaban pagando mas.
La receta de ginory es rebozado por un tubo y el pescado muy finito, espero que lo hayan entendido.
La comida ,desde hace años muy buena.la gente no para de ir.ynlos camareros, ellos de correr., Para atender lo más rápido posible.el menú muy bueno ,y apto para todos los bolsillos.el (matrimonio es excelente,)y el bocadillo espectacular.yo pienso que al que no le guste que no vaya.por supuesto puede opinar,pero dejemos a Roberto que siga con ese legado,y que deje la barra,y la carta tal cómo está.pued la verdad que es algo entrañable, tener algo antiguo,y no tan moderno..el charco es nuestro emblema,y las espinas y pechos que venden están para chuparse los dedos,una bolada por12€.hace tiempo era más económica,la gente hacia cola desde las 3 de la madrugada para coger el sitio,ahora 5€ más caro igual que todo pero vale la pena está todo muy bueno.y opinar es justo,pero no machacar,el que quiere ir va,y el que no que no vaya.es muy fácil,pero no tenemos por tierra algo ,que es orgullo de nuestra tierra,va por ginory,por los hijos camareros,por lo s hermanos,y en especial a Roberto por seguir con el legado, ánimo amigo.se ve que tú amas esa profesión,igual que tus camareros un abrazo,y un saludo . Susi
La comida ,desde hace años muy buena.la gente no para de ir.ynlos camareros, ellos de correr., Para atender lo más rápido posible.el menú muy bueno ,y apto para todos los bolsillos.el (matrimonio es excelente,)y el bocadillo espectacular.yo pienso que al que no le guste que no vaya.por supuesto puede opinar,pero dejemos a Roberto que siga con ese legado,y que deje la barra,y la carta tal cómo está.pued la verdad que es algo entrañable, tener algo antiguo,y no tan moderno..el charco es nuestro emblema,y las espinas y pechos que venden están para chuparse los dedos,una bolada por12€.hace tiempo era más económica,la gente hacia cola desde las 3 de la madrugada para coger el sitio,ahora 5€ más caro igual que todo pero vale la pena está todo muy bueno.y opinar es justo,pero no machacar,el que quiere ir va,y el que no que no vaya.es muy fácil,pero no tenemos por tierra algo ,que es orgullo de nuestra tierra,va por ginory,por los hijos camareros,por lo s hermanos,y en especial a Roberto por seguir con el legado, ánimo amigo.se ve que tú amas esa profesión,igual que tus camareros un abrazo,y un saludo . Susi
Al que le parece caro el bocadillo de 4.5€ comparando lo que vale un kilo de corvina... parece que te has olvidado algún ingrediente (pan, harina, huevos, aceite, gas, luz, agua, limpieza, sueldos de camareros y cocineros, irpf, trimestrales, mobiliario, servilletas, cuberteria, electrodomésticos, impuestos por mesas y por terraza...) Pero seguro luego vas a McMierda y pagas gustoso tus 12€ por una hamburguesa escuálida con la loncha de queso y trozo de lechuga medido, la cocacola aguada con toneladas de hielos y con unos camareros que no pasan de la treintena porque hasta ahí suelen aguantar el abuso
8 años llevo yendo a ginori, algo tiene ese sitio que tiene su magia, cada vez que me viene visita, es parada obligatoria, lo de los precios, si que es verdad que por lo que vale un matrimonio, recuerdo de haberlo comido por 2017 por 7/8€, y que ahora valga 12, pues te dan ganas de irte a gastarte esos 12 en un menú de medio día, o gastarte los 20/25 que te sale todo en algún sitio con más opciones, pero que una vez al mes me tengo que pegar el Capricho de un bocata mixto, eso es asin!
Buen producto,la atencion rápida,son amables y el precio muy razonable,y para los que critican los precios,que monten ellos un bar den calidad,paguen todo el personal,impuestos y lo pongan el bocadillo a los precios que ellos dicen,es muy fácil criticar sin estar en el negocio.
Decepción, bocadillo de pescado muy caro para la mala calidad que tiene, pan chicloso y el bocadillo muy malo, perdió su esencia este bar, no vuelvo mas

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