Hace ya dos meses que varias calles del barrio de Altavista no tienen alumbrado público. Los vecinos han grabado un vídeo en el que, entre la oscuridad, aparece una mujer caminando por la acera, con la cabeza gacha, iluminada por su teléfono móvil. También se han puesto de acuerdo para dejar encendidas las luces de algunas terrazas particulares para ver algo. Muchos tienen miedo, sienten la inseguridad que provoca la oscuridad.

Este apagón generalizado afecta principalmente a las calle Jerez y Vicente Guerra, pero también a La Joaquina, La Fermina, El Antonio o Chafariz. Los vecinos se han quejado en numerosas ocasiones ante el Ayuntamiento de Arrecife, que les ha contestado que es un problema que se deriva de la distribuidora de la luz y el cambio de contadores.

El problema es el siguiente: el contador de Unelco-Endesa de la calle Jerez tiene una potencia contratada de 1,3 kilovatios. Hay decenas de farolas y con esa potencia no da ni para una de ellas. Existe una normativa que obliga a colocar contadores inteligentes y adaptar las potencias contratadas al consumo real. La potencia que ahora se fija para esa zona pasa de 1,3 a 53 kilovatios. No solo es mucha más potencia, sino que el tramo del coste por kilovatio es diferente.

Después de varios avisos para que se actualizara la situación, sin éxito, la distribuidora ha decidido cortar el suministro. El Ayuntamiento tenía un plazo de tiempo para adaptarse, hacer las obras oportunas, redactar un proyecto y contratar un nuevo boletín pero no lo ha hecho. En esta zona de la ciudad había pocas farolas y muchos solares, que se han convertido en edificios y han hecho multiplicar las farolas.

Desde el Ayuntamiento se les dice a los vecinos que no solo es un problema de esas calles, sino que afecta a otras, como Padre Claret, Donantes de sangre, Palencia, Bilbao o Francos, aunque en otros puntos de la ciudad se ha ido solucionando, y que también afecta a otros municipios de la Isla y de fuera de la Isla.

También les aseguran que han pedido un plazo superior para redactar proyectos de adecuación de la potencia porque el alumbrado es un servicio público esencial. “Entiendo que se corte si no se paga, pero no por esto que es un servicio público”, dice Mariano Andrés Gallego, que es propietario de la empresa Comunigestión y administrador de fincas afectadas por el apagón. No le convencen las explicaciones del Ayuntamiento: “Deberían haber hecho algo más de presión para seguir dando servicio hasta que lo solventaran”, señala.

“Entiendo que se corte si no se paga, pero no por esto que es un servicio público”

Los vecinos le plantean al Ayuntamiento incluso que instale un grupo electrógeno, y que si hay que vigilarlo, “que pongan a un policía local”. Eso a corto plazo. A medio plazo piden que se haga ya el proyecto de adecuación, pero que den la luz hasta entonces con un transformador provisional.

En otros barrios se ha arreglado. En 2022, el Ayuntamiento anunciaba obras en el barrio de Las Salinas por 369.300 euros para modernizar el alumbrado público del barrio, casi doscientas farolas, y los nuevos cuadros de mando para una potencia de menos de 30 kilovatios.

Por otra parte, el consumo eléctrico anual del Ayuntamiento de Arrecife es disparatado y supera el millón de euros. “Se echan la pelota unos a otros y los perjudicados son los vecinos”, dice el administrador de fincas, que destaca que lo que el Ayuntamiento llama una “nueva normativa” es del año 2016, así que ha tenido tiempo para arreglar la situación.

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