El sindicato UGT ha cargado este miércoles contra los representantes públicos por su "silencio" ante la situación que ha abocado a Harinera Lanzaroteña, una empresa con seis décadas de trayectoria, a presentar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) por cese de actividad.

UGT ha mostrado su "apoyo y solidaridad" a los 11 empleados de la empresa "ante la difícil situación en la que se encuentran". Harinera Lanzaroteña tuvo que plantear un despido colectivo por razones económicas de la empresa.

El sindicato entiende que con el cierre de Harinera Lanzarote la Isla "pierde un referente" y se aleja de la diversificación económica que "en tantas ocasiones, los responsables públicos dicen trabajar".

"La utilización de ayudas económicas al sector, utilizadas de forma irregular por las administraciones,  ha conllevado al cierre de esta empresa, beneficiando exclusivamente a aquellas empresas instaladas en las Islas capitalinas", señala el secretario de UGT, César Reyes.

Para el representante sindical "sin lugar a dudas esto es un fracaso que va más allá de lo empresarial", y considera  "corresponsables" a los representantes públicos de la Isla, que con su "incapacidad han ido en contra de los intereses empresariales y laborales" de Lanzarote.

La empresa inició el pasado mes de octubre los trámites ante la Dirección General de Trabajo del Gobierno de Canarias para acometer un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) sobre toda su plantilla.

"Acumulación ilegal de ayudas"

Harinera Lanzaroteña, de las pocas compañías del sector industrial de la Isla, se ha visto perjudicada por el régimen de subvenciones al transporte de mercancías, que beneficia a las empresas asentadas en las dos Islas capitalinas frente al resto.

Además, la empresa lanzaroteña llegó a denunciar ante la Comisión Europea incumplimientos de la cláusula de acumulación en el Régimen Específico de Abastecimiento (REA) de las Islas Canarias (REA), al percibir ciertas compañías diferentes ayudas para un mismo producto, lo que además de vulnerar la legislación supone competencia desleal.

El consejero de Harinera Lanzaroteña, Agustín Márquez, ha denunciado en varias ocasiones que las autoridades estaban consintiendo una “acumulación ilegal de ayudas al transporte”, mediante la que una misma mercancía recibe subvenciones a la importación, al transporte entre la Península y Canarias, y entre Islas dentro del Archipiélago.

Esta situación pone en desventaja al tejido industrial de las Islas no capitalinas frente a las empresas que tienen su sede en Gran Canaria o Tenerife, que pueden vender a precios inferiores incluso a los ofrecidos por las compañías de las Islas no capitalinas, al tener mayor volumen de producción y tener subvencionados por completo los costes de transportes.

Pérdidas acumuladas

Harinera Lanzaroteña, fundada en la década de los 50 del pasado siglo, acumula pérdidas desde el año 2014 y su situación ha llegado a convertirse en insostenible. En el año 2015 sus ingresos ascendieron a 1,6 millones pero tuvo unas pérdidas de 206.789 euros. En el ejercicio 2016 el volumen de ingresos disminuyó a menos de 1,4 millones y el resultado del ejercicio fue de 142.653 de pérdidas.