El ‘Cavallino rampante’ ruge entre volcanes
A Ferrari le gusta Lanzarote. Desde su paso hace unos años por la Isla había abierto la puerta a repetir para hacer la preparación previa a las temporadas de competición. Hace unos años fue el departamento de F1 con Fernando Alonso en la cabeza, y ahora es el departamento de GT el que ha decidido venir, con Miguel Molina como abanderado del equipo italiano.
El piloto, nacido en Gerona hace 29 años, debutó el año pasado en Ferrari y, al acabar su contrato, la marca le ofreció una renovación por dos años y medio más. “Personal y profesionalmente estoy muy a gusto, porque he entrado muy bien en el grupo, me tienen en consideración y los resultados han ido saliendo”, cuenta en un parón de su entrenamiento en el Club La Santa. “Yo venía de carreras sprint y ahora es de resistencia, colaboras con otros pilotos, luchamos por lo mismo... para mí era un año muy difícil, pero cuando Ferrari te pone en las manos el coche oficial en LeMans y te dan esa responsabilidad, te sientes valorado”, dice satisfecho. “No puedo estar en un sitio mejor”, apostilla.
La pretemporada es muy peculiar. Antes de comenzar ya tienen las 24 horas de Daytona, prueba que este año tuvo una repercusión especial en los medios españoles por la presencia de Fernando Alonso. Los pilotos españoles aplauden que Fernando Alonso haya hecho Daytona. “Nos ha dado repercusión a nosotros, y gracias a eso se están viendo carreras diferentes a las que conoce la gente. Eso ayuda al deporte español, porque cuanto más seamos más nos divertiremos”. En Estados Unidos eran cuatro los españoles que participaron, entre ellos Antonio García, del que Molina se deshace en elogios: “Lleva muchos años compitiendo en EEUU y no se ha hablaba de él siendo campeón del Daytona, de Lemans, así que gracias a Fernando, se nos ha visto”.
El equipo Ferrari GT, con el español Miguel Molina a la cabeza, se ha preparado durante una semana en Lanzarote
Respecto a su participación en la primera prueba del año considera que se ha quedado con “sensaciones muy buenas”. “Empezamos igual que acabamos el año, cuando habíamos ganando las 12 horas de Abu Dabi”, explica. “En Daytona dejé el coche primero, pero luego tuvimos un problema técnico que incendió el coche... en fin, cosas de las carreras”.
Este 2018 sera un año cargado de competiciones para el español, que espera hacer unas 17 pruebas en total. “Todavía toda la temporada no está cerrada pero es muy probable que vuelva a repetir la Blancpain, las carreras de larga duración de más de tres horas y las 24 horas de Lemans, que es el objetivo número uno y el proyecto más grande que tiene la marca, donde ya nos han confirmado que correré con el coche oficial junto a Sam Bird y Davide Rigon”. Molina señala que “hay dos campeonatos más, pero están en el aire”.
Con todo esto, el de Lloret de Mar tiene “buenas expectativas porque el 2017 fue muy bueno pero siempre se puede mejorar”, aunque confiesa que “lo más complicado del año será optimizar el tiempo con la familia ahora que he sido padre, nos adaptaremos”.
Stage en Lanzarote
El equipo GT de Ferrari desplazó a la Isla a Miguel Molina, Davide Rigon, Sam Bird, James Calado, Alessandro Pierguidi y Andrea Bertolini, todos pilotos oficiales, y a un equipo técnico de seis personas. En la Isla estuvieron una semana realizando mucha actividad en bicicleta y algo de natación pero especialmente muchos juegos en equipo como voley, tenis o padle. “El objetivo es crear un vínculo más cercano porque en pocas ocasiones tenemos tiempo de estar relajados y hacer trabajo de equipo, así que es positivo aprovechar este tiempo”.
Para Miguel, visitar Lanzarote no es nuevo. Ya lo había hecho con el equipo Audi, que también hizo pretemporada este año en Lanzarote, e incluso había venido antes de vacaciones. “La primera vez que vine fue con unos amigos y con mi pareja y aprovechamos para visitar los monumentos de la Isla”, recuerda el piloto. Ahora “y gracias a la bicicleta, disfruto de los paisajes mientras entrenamos”. El piloto de Ferrari reconoce que “Lanzarote es una Isla muy tranquila, tiene pocos coches, ideal para entrenar, para desconectar y estar tranquilos”, y señala que “con todo el estrés y el ruido que llevamos durante el año, venir aquí a relajarnos es una maravilla, aunque vengas a entrenar”.
Pilotos españoles de nivel
Si a Miguel Molina se le recuerda el paso por Lanzarote del departamento de Formula 1 de Ferrari y se le pregunta por la posibilidad de que pilote uno en un futuro, responde tajante: “Estoy satisfecho donde estoy”. Molina confiesa que tuvo su “oportunidad” en el año 2010. “Estaba todo hecho con Force India pero decidieron coger a otro piloto que aportaba dinero”, afirma. “Mentiría si dijera que no me gustaría probar uno y vivir las sensaciones, pero tengo la suerte de vivir de esto, del trabajo que hago, de mi pasión”. Tras una semana lejos de válvulas, motores, circuitos, trazados, mecánicos y demás, toca volver a encontrarse con todo ese ruido, con esa vida apasionada.
Con Molina se demuestra que hay pilotos españoles de altura que se han ido labrando su futuro lejos de los flashes y las cámaras, trabajando en silencio por lo que les gusta. Su primer test oficial será a mediados de marzo en el Circuito Paul Ricard de Francia y la primera prueba del Campeonato Blancpain, en Zolder (Bélgica) en abril. Lanzarote enarbolará la bandera roja del “cavallino rampante” para animarle.
Comentarios
1 Tinache Sáb, 03/03/2018 - 11:10
2 Simplon Dom, 04/03/2018 - 00:29
3 Tinache Dom, 04/03/2018 - 09:46
4 Lola Lun, 05/03/2018 - 11:47
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