La normativa que regula el litoral de Arrecife y establece los usos permitidos y las actividades prohibidas ha desatado una nueva guerra entre el grupo de gobierno (PSOE, CC y PIL) y la oposición (PP, Somos, Ganemos y Ciudadanos).

El portavoz de los populares, Jacobo Medina, ha pedido sin éxito que se retire la ordenanza, presentada “sin consenso” y sin contar con el respaldo de la Asociación de pescadores deportivos del Charco de San Ginés.

El varado de embarcaciones en el Charco para reparación, limpieza y pintado queda prohibido. Los pescadores han reclamado la habilitación de un foso, para no tener que “pagar 180 euros en el puerto deportivo cada vez que tienen que varar y reparar un barco”, tal y como destaca Borja Rubio, portavoz de Somos, quien denuncia la “privatización” de un uso “tradicional”.

Para Medina, “se quieren cargar la actividad pesquera del Charco” y asegura que no van a “permitir que se quiten barcos y chalanas” de la zona. La visión del equipo de gobierno es diametralmente opuesta.

El grupo de gobierno defiende la nueva ordenanza y acusa de “populismo” a la oposición

El teniente de alcalde, Rafael Juan González (CC), subraya que la nueva normativa, que está aprobada de forma inicial y en fase de alegaciones, “lo único que hace es poner de moda la legislación vigente”.

González destaca que “no se pueden limpiar los barcos en la ribera, por mucho que tradicionalmente se haya venido haciendo”. Y también acusa de “populismo” a los partidos de la oposición por alarmar sobre el futuro del Charco de San Ginés. “En ningún lugar de la ordenanza pone que se vayan a quitar los barcos”, asegura.

En la actualidad hay unas 113 embarcaciones, de las cuales solo tres están dadas de alta para pesca profesional. El resto son barcos de recreo o de pesca deportiva. El problema puede venir porque la ordenanza establece que “queda prohibida la presencia” en el Charco, fondeado, varado o circulando, de cualquier barco que no esté correctamente matriculado.

Desde la oposición se sostiene que la normativa “matará el alma del Charco de San Ginés”

González señala que en esa situación se encuentra “la mayoría” de las embarcaciones, pero aclara que legalmente “no pueden estar en la ribera ni en ningún sitio de la costa”.

Mientras que para la oposición el Ayuntamiento “matará el alma del Charco” con la ordenanza del litoral, el grupo de gobierno sostiene que ha analizado las medidas que se plasman en la normativa desde 2015 con colectivos y entidades vinculadas al mar y al medio ambiente.

Aunque desde el grupo de gobierno municipal se admite que se pueden “discutir” prohibiciones, como la de fumar en las playas, descartan retirar la ordenanza: “No podemos volver atrás después de dos años de trabajo”.