"Las hormigas tienen la organización social más complicada del mundo después de los humanos". Edward O. Wilson

Si les dijera que las hormigas conquistaron mi nevera, no me creerían, pero sí, es cierto. Coincidiendo con la última ola de calor de octubre, al abrir un día la nevera allí estaban, circulaban por su interior como solo ellas saben hacerlo: en fila, sigilosas, persistentes.

Que se metieran en el frigorífico me pareció tan raro, que pensé habían buscado refugio climático allí dentro. Pura fantasía, enseguida me di cuenta de que la nevera apenas enfriaba; se había estropeado y por alguna rendija consiguieron colonizar el paraíso.

Que olfateen la casa con sus eficientes antenas, lo tengo más que asumido. Me las encuentro por todas partes, incluso encaramadas al sillón o a la pantalla del ordenador. He comprado esos productos insecticidas que venden los supermercados, pero nada. Así que me resigno a vivir entre ellas, y con unas hormigas sedentarias de unos 3 cm que compré hace tiempo; las hormigas me fascinan, aunque lo de la nevera me ha superado.

Viviendo entre ellas he comprobado que el zumo de manzana les encanta, se vuelven locas por ese producto que llegó a Canarias en 1966, el Appletiser; si dejo un vaso con un resto, enseguida lo detectan. El Appletiser es para ellas lo más, y ellas, lo más para la biología, pues hace unos 130 millones de años que habitan la Tierra. Desde el punto de vista evolutivo, ese dato es muy interesante.

Fue leyendo al zoólogo estadounidense Edward O. Wilson que aprendí a verlas. Considerado el entomólogo más importante y destacado de su tiempo, Wilson dejó tras su muerte, en 2021, un legado excepcional; sus trabajos y publicaciones contienen infinidad de datos acerca de los insectos sociales. Se le conocía como el "Señor de las hormigas" por ser experto en esas criaturas con cinco ojos de las que hay descritas unas 14.000 especies, aunque este número podría quedarse corto si se estudiara minuciosamente los hábitats terrestres del planeta. Ninguna hormiga vive en el mar.

Los trabajos del mirmecólogo resultan fascinantes, ya que concluyen que las hormigas poseen un nivel de organización y división de trabajo tan exquisito y colaborativo que la colonia en sí funciona como un superorganismo, concepto que utiliza y da nombre a uno de sus últimos libros. Para el autor, ese comportamiento grupal, cooperativo y cohesionado, es la principal causa de su éxito evolutivo.

Sorprende que una colonia de hormigas pueda albergar hasta más de veinte millones de individuos, casi todas hembras que se organizan en castas, la reproductora y la obrera. Sorprende saber que los pocos machos viven siendo cuidados por las obreras hasta la época de apareamiento con la reina, y luego son expulsados o matados. Sorprende que en ese mundo suyo que es el hormiguero, el objetivo de todos los componentes sea la supervivencia de la colonia en sí y no la individual. Por ello, entre otras cosas, las obreras colaboran sistemáticamente en el cuidado de las crías que no son suyas, una crianza colectiva a costa de la esterilidad de esa casta.

En definitiva, un comportamiento tan complejo en el que no falta la comunicación entre individuos a través de feromonas que desencadenan respuestas de alarma, atracción, reclutamiento o de reunión. Además, de mecanismos especiales para distinguir a los miembros de otras colonias, distinguir castas, etapas de desarrollo, edad de los individuos... Y un largo etcétera que Wilson explica minuciosamente haciendo hincapié en el éxito de la eusocialidad, el nivel más avanzado de vida social entre los insectos. Insectos sociales son las abejas, hormigas, avispas y termitas. Eusociales, las hormigas y las termitas.

Silvio Rodríguez compuso hace más de 30 años "Ando como hormiguita", una preciosa canción que sonó mientras ponía en funcionamiento la nueva nevera. En la Antártida no hay hormigas, lo dice el señor de las hormigas.

P.D. "La eusocialidad (en griego "eu": "bueno/real" + "social") es el nivel más alto de organización social que se da en ciertos animales, con las siguientes características: viven juntos dos o más generaciones, los adultos cuidan de las crías y los miembros están divididos en una casta reproductora y una casta no reproductora." Definición extraída de Wikipedia.