Arrecife. Lo que hacen con los árboles
Norte de Londres. Un cerezo (prunus cerasus) ha sido objeto de una brutal poda, casi como los servicios municipales de Arrecife acometen las podas de nuestros árboles urbanos. Un mural sobre la pared medianera colindante, firmado por el artista Banksy, denuncia la tropelía por medio de una pintura que recrea la masa arbórea perdida.
El turismo que acude en tropel a Londres a ver el árbol abusado y el mural-denuncia debe alucinar, lo mismo que el que acude a Arrecife, de ser cierto lo que se afirma sobre su compromiso medioambiental. Como la ciudadanía -esa masa informe, que debe considerar en el Ayuntamiento que somos- no cuenta con el crédito de los gobernantes, vamos a transmitirles que al turista que nos visita tampoco le gusta el disparate que perpetra la empresa de parques y jardines con las motosierras.
Lo primero que recoge la biblia del jardinero es que si se desea plantar un árbol, hay que valorar, entre otras cuestiones, el espacio del que se dispone, la elección de la especie atendiendo a su pleno desarrollo, si lo queremos de hoja caduca o perenne, la forma de la copa (redondeada o piramidal) o si se plantará cerca o lejos de una construcción.
Arrecife carece de demasiadas cosas interesantes, si excluimos su bahía. Ya no contamos con edificios históricos como había hasta los años setenta. No tenemos moderna arquitectura porque no se aprecia talento alguno en nuestro Colegio de Arquitectos, carecemos de amplias zonas peatonales y de cualificadas zonas de sombra porque no nos gobiernan personas observadoras. No disponemos de un gran parque arbolado ni unas aceras igualmente arboladas, a pesar de que es la única medida que puede mejorar la imagen de la ciudad en muy poco tiempo, y carecemos de criterio y de sentido común (carecen ellos, quiero decir) para unificar el mobiliario urbano para ver si dejamos de parecer un muestrario de cachivaches. Por cierto, la comodidad de los bancos y asientos en el espacio público pasó a mejor vida, rendidos como están algunos por priorizar el diseño frente a la practicidad y la ergonomía. No me sale cómo calificarlos. Por todo ello, resultan más valiosos cada uno de los ejemplares arbóreos que existen, y, por eso mismo, cada acción de responsabilidad municipal que se ejerce sobre los árboles se nota mucho.
En Arrecife, desde hace pocos años, cuando se decide plantar, no se sale del mismo recurso, hacerlo con flamboyanes (delonix regia), árboles impropios para bordes de acera por su potente desarrollo radicular y por el desarrollo aparasolado de su copa. Estas dos condiciones, experimentadas en los que se plantaron hace algunos años, no evita que se sigan plantando en aceras. Son acciones que cuentan con la aprobación municipal, y que muestran el absoluto desconocimiento y la falta de observación sobre el espacio urbano. Es la misma medida que han adoptado durante los últimos años todos los municipios de todas las islas canarias, por cierto.
Lo que queda del ficus de la foto, una de las mil variedades de la familia Moraceae, a la que también pertenece la higuera (ficus carica), es como los que se vienen plantando masivamente en primera línea de Puerto del Carmen que, como Arrecife, parece coincidir en la falta de competencia del servicio de parques y jardines; De un alcalde del que dicen que está al tanto de todo, parece que esta es una de las cosas que se le escapa. Es tal la agresividad de sus raíces y el extraordinario desarrollo de las copas, que en pocos años habrá que considerar la tala de todos los ejemplares. De momento lo arreglan con tijera, como quien hace un curso de topiaria.
Del mismo modo que el Ayuntamiento realiza advertencias a la empresa Urbaser por las deficitarias actuaciones en la limpieza de la ciudad y lo hace porque el concejal del área, Jacobo Lemes, está atento a estas cuestiones, y porque es su obligación, la empresa de parques y jardines debería ser amonestada por el concejal del área, siempre suponiendo que se entere de algo. Lo grave es que estamos pagando por unas tareas destructivas para el conjunto arbolado que, además, perjudica a la imagen de la ciudad, al bienestar de la población y a la percepción de nuestros visitantes.
Algo que se está generalizando en las intervenciones sobre nuestro parque arbóreo es la limpieza de los troncos de manera que las copas se forman a gran altura, como si una manada de jirafas se hubieran comido todo lo demás y no llegaran hasta ahí. No se percatan nuestros jardineros de que a esas alturas las copas no producen beneficio alguno a los viandantes, ni tan siquiera el del disfrute de un árbol armonioso y bien tratado.
Arrecife, a falta de otros atractivos, bien pudiera convertirse en la ciudad más verde, con más árboles por habitante y con mayor calidad de sombra de este lado del Atlántico. Para nosotros y para los que deseen visitarnos. Ahí queda, para que hagan con la propuesta lo que le parezca bien al alcalde o al concejal, Vicente Herbón, Roberto, del Partido Popular, del que espero que ame tanto Arrecife como debiera amar Boiro (La Coruña). De momento, el afecto por la ciudad no se le nota.
Tampoco se le notaba al anterior, a Tomás Fajardo, útil para el PSOE y para la empresa a la que dejó hacer lo que le vino en gana y parece que legó la fórmula. De la responsable municipal del cumplimiento del contrato, mejor ni hablar.
Al igual que sucede con los flamboyanes, se han plantado tipuanas (tipuana tipu) frente a fachadas y en bordes de acera, sin considerar que son unas bonitas especies más propias de parques o alejadas del frente construido. Sus raíces destrozan el pavimento y sus copas son difíciles de controlar para mantener determinado volumen. Si bien es frecuente ver jacarandas (jacaranda mimosifolia) en Arrecife, hay que señalar que tienen una floración espectacular pero apenas producen sombra. La conclusión es que con las posibilidades con las que contamos para acceder a información altamente cualificada sobre arbolado de espacios urbanos, ya tenemos las condiciones para hacerlo bien. Que nos digan ellos qué es lo que está sucediendo para hacerlo tan mal, porque, desde fuera, lo que parece es que a ninguno el asunto les interesa lo más mínimo.
Comentarios
1 Anónimo Jue, 11/04/2024 - 17:06
2 Anónimo Jue, 11/04/2024 - 17:09
3 Anónimo Vie, 12/04/2024 - 10:17
4 Anónimo Vie, 12/04/2024 - 15:23
5 al 2 Sáb, 13/04/2024 - 01:43
6 Conejero Sáb, 13/04/2024 - 16:04
7 mariárbol Dom, 14/04/2024 - 00:28
8 Al 6 Lun, 15/04/2024 - 20:09
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