El máximo órgano ejecutivo de Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC), la ejecutiva o sábor nacional, ha decidido por unanimidad la puesta en marcha de una nueva estructura insular que se hará cargo de la dirección política e institucional de la organización en las islas de Lanzarote y La Graciosa. Esta estructura insular ha sido consensuada y aprobada previamente por los miembros de NC-BC en Lanzarote y La Graciosa y remitida a los órganos nacionales.

Al frente de esta nueva estructura estará el diputado Yoné Caraballo, que será el presidente insular de la organización canarista. Le acompañará en la vicepresidencia primera la actual consejera insular Daisy Villalba, y en la vicepresidencia segunda el concejal de Haría, Marcos Lemes.

Además, esta estructura insular estará compuesta por 11 secretarias insulares que se darán a conocer en las próximas semanas. Cada secretaría contará con un secretario insular encargado de organizar, dirigir y representar a la organización en el área asignada.

“Esta ejecutiva insular tendrá tres retos. El primero es consolidar la marca de NC-BC en los municipios en los que tenemos representación; el segundo es llegar a tenerla en aquellos donde no lo hemos conseguido; y el tercero es Arrecife”, comenta el nuevo presidente insular Yoné Caraballo.

Según Caraballo, “la consolidación del proyecto canarista en Lanzarote pasa por poseer una estructura y comité local fuerte en la capital. Para ello ya estamos trabajando en la coordinación de un comité local que combine los valores de la política de los cuidados que hemos ido trabajando en estos últimos años, la renovación de los liderazgos políticos y la esencia del ser arrecifeño”.

Otra de las tareas que tiene encomendada la nueva ejecutiva es reforzar la organización a nivel orgánico con nuevos simpatizantes, en un proceso de apertura y dinamización.

“Necesitamos un partido dinámico que se mueva al compás de la ciudadanía. No queremos ser un partido al uso, endogámico y cerrado, sino un partido movimiento que esté constantemente testando y pisando la calle”, argumenta Caraballo.

Del mismo modo, el nuevo presidente ha indicado el compromiso de esta nueva ejecutiva insular por abordar los retos que quedan pendientes en Lanzarote y La Graciosa.

“La adaptación y mitigación al cambio climático; el reto demográfico; la crisis hídrica; la vivienda; la justicia social; la sanidad o la soberanía alimentaria son cuestiones que NC-BC en Lanzarote seguirá incorporando en la agenda política. No nos ahuyentaremos de debatir las problemáticas reales de la sociedad lanzaroteña y proponer nuestro modelo de isla-hogar”, expone el presidente insular.

Con todo, en este mes de noviembre se dará a conocer los componentes de esta ejecutiva llamada a “consolidar el proyecto de NC-BC en Lanzarote”.