Dos homenajes, uno póstumo y otro en vida, en la misma forma, rebautizando calles de Playa Blanca, en gratitud a dos vecinos sureños, Bienvenida Martín Betancort, fallecida en 2013 a los 83 años de edad, y Jaime Quesada Martín. La alcaldesa de Yaiza, Gladys Acuña, dijo en el acto que  "el homenaje no salda una deuda con ellos ni mucho menos, pero sí recuerda su vocación de servicio, entrega a su gente y tierra y valiosísima aportación en áreas cuál más importantes: la salud y la educación".

La calle La Tegala de Playa Blanca, vía céntrica donde se encuentra localizada la parada de taxis, pasa a llamarse Bienvenida Martín 'La Practicanta', mientras que la calle Varadero, por la que se accede al centro del pueblo con la Oficina de Turismo de Playa Blanca como referencia, adopta el nombre de Jaime Quesada 'El Maestro'.

Una nutrida representación familiar de los homenajeados participó en el acto institucional celebrado en la Biblioteca Municipal de Playa Blanca para luego acompañar a los responsables públicos de Yaiza a descubrir las placas de las calles rebautizadas.

Bienvenida Martín Betancor, conocida en el pueblo como 'Menía', fue en tiempos en que no había ni consultorio ni farmacia la tabla de salvación de vecinos y turistas de Playa Blanca que buscaban quien les curara o inyectara, pero hasta matrona de muchas lugareñas fue. Para 'La Practicanta' del pueblo, no había hora de servicio.

"Su vocación solidaria le llevaba a salir de casa a aplicar una inyección o curar una herida a plena luz del día o de madrugada y sin recibir remuneración porque ni era su objetivo ni lo esperaba",  advertía Gladys Acuña. "Corran a casa de Menía", era la recomendación de los marineros a sus hijos por si pasaba algo cuando ellos trabajaban en la mar.

El consultorio del municipio estaba en Uga y el médico remitía los pacientes para que 'La Practicanta' los inyectara cuando el tratamiento lo exigía. Además, el transporte era muy limitado así que ella aprovechaba cualquier viaje de un conocido a Arrecife para abastecerse de medicinas.

Por su casa pasaron los hijos del tenor Alfredo Kraus, médicos que venían de vacaciones a Playa Blanca que ya tenía la referencia de Bienvenida, turistas heridos y gente de a pie que encontró en ella una mano tendida. 'Qué ejemplo para todos y un orgullo para su familia y para todo el municipio de Yaiza", apostillaba la alcaldesa.

Ese orgullo de familia y el trabajo inconmensurable de 'La Practicanta' lo dibujó estupendamente una de sus nietas, Raquel Rodríguez Machín, en un emotivo texto escrito en forma de carta dirigida a su abuela que la joven profesora compartió con los presentes.

Yaiza también distinguió merecidamente a Jaime Quesada Martín, testigo excepcional de la evolución de Playa Blanca. Llegó en el año 78 al pequeño colegio del pueblo que funcionaba justo en la casa que acogió el acto de este domingo cuando el centro apenas contaba 14 alumnos, vivió su traslado en el 91 al edificio actual y se jubiló en el 2013, aún siendo director con 37 años de servicio, con más de 800 alumnos en el CEIP Playa Blanca.

Jaime Quesada, galardonado en 2005 por el Gobierno de Canarias con la medalla Viera y Clavijo, no se cansó de servir a la comunidad educativa de Yaiza. "Jaime además nos ha enriquecido con su faceta literaria, tanto en la prosa como en el verso", recordaba Gladys Acuña. 'El Maestro' es autor de varios proyectos dirigidos al Programa de Animación Lectora y sus cuentos han sido utilizados como material de trabajo en centros de Lanzarote. En uno de ellos, casualidad o no, 'La Practicanta' aparece como personaje de Playa Blanca.

Jaime hizo gala de su buen humor en el homenaje. "Espero que no le cambien el nombre a la calle porque, que recuerde, la misma ya ha tenido cuatro, incluyendo el mío". Y es verdad, se llamó Avenida General, luego De Llegada, El Varadero y ahora 'El Maestro'. Quesada contó los cambios de nombre de calles desde épocas remotas, rememorando aquella Playa Blanca, hasta nuestros días, entrelazando la historia con los cambios de estaciones del año y rematando con un poema. Jaime, hombre sencillo, siempre se ha considerado eso, un maestro de escuela. Y la calle de él, la de 'La Practicanta' y todas, como dijo con muy buen criterio, "son de todos, de los que están, de los que se han ido y de los que vengan".