“Persecución” a las pequeñas empresas de turismo activo de Lanzarote
Fue en abril de este año. Un sábado. Cuatro furgonetas de empresas de turismo activo estaban con sus clientes caminando en el entorno de la Caldera de La Rilla. Apareció un inspector del área de transportes del Cabildo y multó a todos con un mínimo de 600 euros. A unos por no llevar mampara en la furgoneta, que es obligatoria para separar a las personas del material, y a otros porque, como no llevaban material especializado, dio por supuesto que se estaban dedicando a transportar a personas de forma ilegal.
No era la primera vez. Desde hace años, el área de transporte se dedica a multar a este tipo de empresas aplicando una legislación que se ha quedado obsoleta y que prácticamente es imposible de cumplir. Desde el propio Cabildo, el consejero de transportes, José Juan Cruz, reconoce que la legislación no está adaptada a las nuevas demandas de turismo activo y que en el mes de julio habrá una reunión para avanzar en un nuevo marco jurídico, pero que mientras tanto tiene que seguir tramitando las multas si los inspectores las inician.
“Desde 2008 yo he pagado en sanciones por transporte más de 7.000 euros”, dice Carmen Portella, de la empresa 'Lanzarote active club', una empresa que pertenece a su vez a la Asociación de empresas de turismo medioambiental de Lanzarote, que se constituyó en noviembre del año pasado y que pertenece también a la Asociación canaria de turismo activo y a Aneta, la asociación nacional. De momento agrupa a diez empresas del sector que se dedican al senderismo, a excursiones con kayak de mar, el turismo ornitológico, etnográfico...
“Nos gastamos nuestro dinero en promoción, vamos a ferias, captamos a los clientes en origen y vienen ya con las excursiones contratadas”, señala. Son pequeñas empresas, de dos, tres o cuatro empleados. Fomentan un turismo de calidad, trabajan con grupos pequeños y su actividad coincide con uno de los objetivos de la Estrategia Lanzarote 2020, la misma que el grupo de gobierno ha asumido como su hoja de ruta: “Promover un turismo sostenible y de calidad poniendo en valor nuestro rico patrimonio natural y cultural (...)”.
“Queremos contribuir -señala Portella- a que se conozca la naturaleza de la Isla y somos respetuosos con el medio ambiente, lo conocemos y los damos a conocer”. “No somos un turismo egoísta, por ejemplo no vamos a la parte de atrás de La Rilla porque sabemos que anida el halcón de berbería”.
Estas empresas, dicen desde la asociación, son las primeras interesadas en que no se degrade el medio ambiente porque viven de él, y consideran que podrían incluso colaborar a su vigilancia en aquellos espacios protegidos que apenas se vigilan. Sin embargo, desde la Administración, más que facilidades, se ponen problemas. Tienen que instalar una mampara para separar a las personas del material aun cuando no lleven material, y si no lo llevan, Transporte considera que están haciendo de taxistas. El caso es que para hacer senderismo no hace falta material, o como mucho usan bastones de trekking que no se tienen en cuenta.
“No tiene sentido de lo que nos acusan porque si fuéramos unos piratas del transporte, ¿para qué queremos tener una empresa dada de alta? Si fuera un pirata, sería un pirata del todo, no me molestaría en tener una empresa de turismo activo para camuflarla de taxi”, dice Ismael Escot, de la empresa Ecotour Lanzarote, que asegura que los inspectores, en algunas ocasiones, han llegado a entrevistar a los clientes. “Es denigrante”, señala.
Estas empresas no pueden cargar ni descargar en el aeropuerto, algo que ven lógico, pero tampoco pueden hacerlo en ningún puerto. “No podemos llevar excursiones a La Graciosa ni a Lobos porque no podemos dejar a los clientes en el puerto y no vamos a dejarlos fuera de él para entrar luego de forma clandestina como si estuviéramos haciendo algo malo”, dice Marcelo Espino, de Canary Trekking, otra de las empresas asociadas.
El área de transportes del Cabildo multa a las empresas de senderismo y turismo activo por una legislación que las compañías consideran arbitraria
Tampoco pueden hacer excursiones por el sendero de la costa de Timanfaya o por los conos de La Graciosa porque en esos lugares están prohibidas las excursiones con ánimo de lucro “Sin embargo, - asegura- un grupo de amigos puede ir donde quiera, y muchas veces van con menos conocimiento y cuidado que nosotros”.
“Nos estamos preocupando -señala Marcelo -de poner en valor la isla, de diversificar la oferta, y se nos está maltratando. Yo he estado saliendo de un curso de Geoparques del Cabildo para ir a otro departamento a pagar una denuncia de Transportes”.
Por otra parte, el Cabildo pone las multas pero si la empresa decide ir a un contencioso, pagando los gastos de representación legal que a veces son por la misma cuantía, no se presenta a los contenciosos.
La Asociación asegura que en otras islas no se está persiguiendo a las empresas del sector y han solicitado una reunión con los inspectores y los técnicos para conocer la razones de lo que consideran una verdadera persecución que muchas veces nace de denuncias de otros profesionales del transporte que consideran que se les está haciendo competencia desleal. A las multas del Cabildo también se suman algunos municipios, a través de su Policía Local.
Comentarios
1 Control Lun, 04/07/2016 - 15:26
2 Bota a fumeiro Lun, 04/07/2016 - 15:40
3 temuime Lun, 04/07/2016 - 15:44
4 tindaya Lun, 04/07/2016 - 22:06
5 Conejero culto Lun, 04/07/2016 - 22:59
6 Teguise Lun, 04/07/2016 - 23:22
7 ciudadana Mar, 05/07/2016 - 07:48
8 Fran Mar, 05/07/2016 - 09:10
9 Francesca Mar, 05/07/2016 - 09:25
10 Timbaiba Mar, 05/07/2016 - 10:53
11 Timbaiba Mar, 05/07/2016 - 10:55
12 Timbaiba Mar, 05/07/2016 - 11:32
13 Fran Mar, 05/07/2016 - 17:25
14 Timbaiba Mar, 05/07/2016 - 18:50
15 Fran Mar, 05/07/2016 - 19:23
16 Gorka Sáb, 07/01/2017 - 06:14
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