ENTREVISTA

“Es el turismo el que vive de nosotros, más que nosotros del turismo”

Claudio Milano, doctor en Antropología Social y Cultural

Saúl García 25 COMENTARIOS 04/06/2023 - 08:29

Claudio Milano, doctor en Antropología Social y Cultural, intervino en las primeras jornadas para debatir y plantear soluciones “ante la saturación turística de Canarias y las amenazas al patrimonio cultural y natural” que se celebraron en Lanzarote (Haría y Casino Club Náutico) y Fuerteventura.

-¿Cómo se sabe que un destino turístico está saturado? ¿Qué elementos lo determinan? ¿O solo depende de una sensación o de una opinión?

-Hay problemas cuando empezamos a ver que están en cuestión algunos derechos de los ciudadanos. Cuando vemos que hay dinámicas de expulsión o especulación, nos damos cuenta de que hay un problema objetivo. No hay un derecho a viajar, pero sí debería haber un derecho a quedarse, un derecho al arraigo. Cuando la vivienda o el sistema de salud de calidad empiezan a ser erosionados de alguna forma, ahí sí que empezamos a tener problemas de masificación. Si hablamos de la saturación, no se trata de que haya una cola en Timanfaya, sino que haya problemas de explotación en el mundo laboral o que haya lanzaroteños que no puedan acceder a la vivienda, o cuando hay una especialización del comercio y una saturación de comercios turísticos frente a comercios para las comunidades locales.

-Es decir, que los derechos ciudadanos se vayan sustituyendo por las leyes del mercado. En los lugares turísticos, todas las políticas se justifican porque son buenas para el turista y el residente queda al margen…

-Es el turismo el que vive de nosotros, más que nosotros del turismo. Lanzarote, o Canarias, de forma general, han sido víctimas de fenómenos de turistificación y se han adaptado, han dejado otros sistemas productivos para especializarse en este. No nos volvemos turísticos de un día a otro, hay una estrategia política, estrategias de turistificación. Si Playa Blanca o Costa Teguise están saturadas, se necesitan otros atractivos. ¿Por qué no algún pueblo, el Mercadillo o la Casa de César Manrique? Encontramos esos atractivos alternativos que dan la oportunidad de agrandar la burbuja turística.

-Toda crítica al sector se responde de forma inmediata con el argumento de que se está en contra del turismo o de que el turismo es el que ha permitido estos niveles de desarrollo y se lo debemos todo.

-Es que a nivel discursivo no hay una alternativa hasta ahora. Ahora se empieza a hablar y a criticar. Se nos tacha de estar en contra del turismo y no es cierto. Estamos en contra de este modelo de turismo extractivo, y deberíamos hablar más de ello, porque es una actividad que utiliza bienes comunes, como el paisaje, el patrimonio cultural o la obra de un gran artista, pero para la extracción de plusvalías en manos privadas. No hay un retorno social a la comunidad de esta inversión que se queda concentrada en manos de unos pocos.

-La industria no parece que tenga capacidad de autolimitarse, pero ¿las instituciones tienen esa capacidad?

-Sí la tienen. Cuando hablamos de gobernanza, hablamos de un sector público. Durante mucho tiempo, en los últimos cuarenta o cincuenta años hemos sido gobernados por una economía financiarizada. Es el sistema público, los gobernantes, los únicos que pueden poner un límite, un coto, como una moratoria a la construcción, a la cantidad de vuelos, hoteles, cruceros...

“En el sistema capitalista no hay soluciones que fomenten la justicia social”

-En qué modelo nos podemos fijar que dé pasos correctos contra la masificación?

-No como modelo en sí pero sí en alguna iniciativa, como el Plan estratégico de turismo de Barcelona, que tiene alguna cosa muy bien planteada, o la ley promovida por el GOB en Baleares, o en Amsterdam donde han intentado regular el alojamiento turístico, pero solo son algunas iniciativas, no hay un modelo en sí, porque dentro del sistema capitalista y neoliberal no hay soluciones que fomenten la justicia social. Al contrario. En los últimos cincuenta años encontramos más desigualdad y concentración del capital.

-En Lanzarote hubo un intento de contención y después ha habido una regresión. Se tiende a la desrregulación, como se está viendo con las viviendas vacacionales…

-Hay un tema de demanda. Cuantos más destinos saturados hay, después de la pandemia, más crece la demanda de destinos menos masificados, de mayor calidad. Lanzarote, justamente, entra en este tipo de demanda. Parece más exclusivo, como Menorca y otros destinos de costa.

-Pero esa situación no puede durar mucho porque rápidamente se saturan…

-Que es lo que está pasando, que se saturan más destinos que no estaban saturados. Luego hay reglamentaciones que dependen de Europa o del Estado. Las administraciones dicen que no llegan hasta cierto punto porque hay administraciones superiores. Hay toda esa escala que genera problemas sobre cómo podemos cambiar, actuar, pero siempre hay otras cosas a nivel municipal que se pueden hacer, como planes de uso y regulación del territorio, o el tipo de tiendas o negocios orientados a turistas o a residentes, y esas pequeñas ordenanzas municipales sí pueden cambiar el camino de un destino. Pero vamos hacia la desrregulación y es muy difícil poder remar en contra de esto. El problema no es tanto con las licencias, sino si hay acceso a las viviendas, porque promover viviendas sociales sería más necesario. La cuestión no es tanto estar en contra del turismo, sino a favor de la justicia social o la igualdad. Otro problema de la turistificación es la ausencia de políticas públicas, que permiten que prolifere el mercado. Para no caer en un discurso antiturismo vacío tenemos que ir de la mano: decrecer significa también diversificar la economía. Hay que repensar el modelo. -No sólo es el número de turistas sino su comportamiento. Antes nos quejábamos de que el turista no se movía de su hotel y era de mala calidad, ahora nos quejamos de que se mueve por toda la isla, sin excepción. -Hablar de turismo de buena y de mala calidad es hacer el juego a los que pretenden que la solución sea la modalidad de menos turistas que pagan más. Ya sabemos perfectamente que esos turistas con mayor poder adquisitivo tienen una huella ecológica mayor. Los grandes hoteles y las infraestructuras que utilizan tienen un peso ecológico enorme.

-¿Y si vienen la mitad y están el doble de tiempo? Al menos así la contaminación de los aviones sería menor...

-Que ya sería algo. Prolongar la estacionalidad podría ser, pero tiene que ir de la mano con otras políticas que no son turísticas. Muchos de los problemas turísticos hay que resolverlos con políticas que tienen que ver con otros sectores afectados, como vivienda, salud, transporte, acceso a la educación pública..., que a veces están erosionados por la desrregulación y privatización.

-El Cabildo ha anunciado que declarará la isla turísticamente saturada, aunque aún no se sabe qué va a suponer esto. Hay un gran grupo de personas que no lo entiende, que no ve que esté saturada porque ve otros sitios, otras playas, y dice: no es verdad.

-Ese es el momento de parar el fenómeno. Benidorm, Salou o Maspalomas ya no vuelven atrás, ya están vendidas. Lanzarote, gracias al legado de Manrique, aún está en un momento en que se puede revertir o, por lo menos, empezar a contener. Si no decrecer, que da tanto miedo, sí contener de alguna forma. Por ejemplo, que lleguen menos cruceros. Este es el momento. No sé qué hay detrás de esa declaración, pero este es el momento.

-¿Qué le parece la figura de los nómadas digitales? No se sabe si son turistas o residentes, o si existen esos que se supone que gastan mucho dinero…

-Son residentes temporales ¿Qué poder adquisitivo tienen? Si ganan más, podrán vivir donde no puedan acceder los lanzaroteños. Canarias es el lugar de toda España donde más se está invirtiendo en la post pandemia porque encarna esas necesidades de estos actores como los nómadas digitales, aunque haya diferentes tipologías.

“Hay pequeñas ordenanzas que sí pueden cambiar el camino de un destino”

-Lo que vemos de momento es que no ocupan la plaza de un turista, sino de un residente.

-Eso es. Y además hay otro asunto, porque este tipo de agentes que se mueven tienen disponibilidad económica. Viven bajo el lema de Airbnb (live like a local) de vivir como un local. No querrán vivir en Costa Teguise, sino en el centro de la ciudad, y eso chocará con los derechos de los residentes.

-¿Cómo saber cuándo ya es suficiente y empieza la gentrificación? Arrecife siempre ha estado fuera del circuito turístico, ahora participa y parece una buena noticia, pero quizá en poco tiempo ya estará totalmente turistificada.

-El camino es muy corto. Los procesos de gentrificación empiezan cuando hay lugares abandonados y entra el capital porque el suelo es más barato. Podría ser que sea más fácil invertir en Arrecife que en Playa Blanca, donde el suelo para fines turísticos sería más alto.

-¿Se debería limitar de alguna forma la compra de inmuebles por parte de no residentes?

-Sin duda. Cualquier regulación tiene que pasar por ahí. Uno de los derechos que vemos erosionado para los residentes es el acceso a la vivienda, e incluso a quedarte en tu barrio.

Comentarios

Verdades como puños. Pero no pasa nada, porque la isla rinde homenaje a Manrique. Y con ya está todo solucionado.
Dios mío que desvarío! Los pensadores de izquierda o se actualizan a las necesidades del humano en el siglo XXI, o volvemos al medievo. La antropología hay veces que da risa.
Lo que no se entiende es que la derecha tenga tanto votos e incluso gane el cabildo CC. Es que s insostenible la situación de la isla...
La soluciones que suelen funcionar están siempre en el camino del medio. El análisis de este señor concluye que solo con leyes proteccionistas y restriccion de la oferta se puede aliviar la presión. El libre mercado da precisamente eso, libertad a los participantes de elegir. Todo lo que sea mas control estatal es sinonimo de desastre. Pero sí coincido en que falta control. Puedes controlar que dejas hacer o no al turista, puedes controlar que tipo de turista dejar entrar o no, puedes controlar que servicios puede usar ese turista o no… eso si lo puedes controlar o al menos regular.
¿Cuáles son las “necesidades del humano en el siglo XXI”? Ya que, en su opinión, no son: vivienda, servicios, diversificación…
Placer inmediato.
Solo los politicos coruptos ganan con los hoteles, y el turismo todo incluido.... pero quieren prohibir el pequeño negocio de los ciudadanos que alquilan una habitacion o un piso en Airbnb.... la isla urgentemente necesita mas energias renovables, depuradoras para los vertidos, desaladoras de agua para los campesinos y solo asi podemos salir de la precariedad de la esclavidud de los cadenas hoteleras!
El turismo es como un gran monstruo que lo devora todo. Cuando saturan las zonas de playa que ocupó a partir de los 70, fija su mirada en otras zonas que están bien conservadas porque la población natural las conservó. La consecuencia es el desplazamiento de los residentes al poner nuchas casas como alojamiento vacacional y elevar los precios. Eso provoca movimientos de población a las zonas marginales y con peores servicios. Eso es lo que provoca el turismo sin control.
Será mejor que los canarios tengamos que volver a emigrar o qué vengan de otros lugares porque el nivel y la calidad de vida es bueno.
Yo si creo que hay que limitar el turismo y limitar el número de viviendas vacacionales. Los pueblos tienen que seguir siendo pueblos y no convertir todo en centros comerciales.
Siempre hay un tonto para amplificar a un malintencionado (comentario 5)...
Puff, vaya entrevista, vaya discurso confuso, superficial, mal articulado, plagado de lugares comunes e insolvente. Si este es el pensamiento alternativo que necesitamos sin falta, que nos coja confesados. Un poquito más de calidad, un pizco mas de exigencia intelectual, por favor. Y a leer
Brillante eso de que es el turismo el que vive de nosotros más que nosotros del turismo. Una ocurrencia desternillante si miras el peso del turismo en el PIB de Canarias, de Lanzarote, de Baleares o de España. Una ocurrencia brillante, poscolonial, turismofóbica, esperpéntica... Sólo se le puede o urrir a un profesor universitario
No entiendo a la gente que como tú, no tolera opiniones distintas a las tuyas.
"Turismofobia" es un término que usan los dinerófilos para pintar de irracional una postura sensata. Son gente que, si propusieran usar la isla como un vertedero y cobrar a países ricos por la tonelada de basura, quien se opusiera no sería una persona racional, sino una persona víctima de la "basurafobia". Tengo unas preguntas para esa gente: ¿creen que existe el exceso de turismo? En caso afirmativo,¿en base a qué indicadores lo juzgan y cómo tiene que estar la situación para que ustedes digan que hay exceso de turismo? Cuando se superen esos límites, ¿se quedarán para darle solución o simplemente se irán a explotar otro rincón del mundo como acostumbran? Una cosa es tener un turismo racional donde se cuida esa gallina de los huevos de oro y otra muy distinta el explotar esa gallina hasta la muerte temprana, asar el pollo y vender el guano. Los zorros no deben estar al mando del gallinero, pero quizás esté hablando mi "zorrofobia".
Alucino con tus capacidades adivinatorias y paranoicas pero estás en la isla adecuada, aunque eso debes saberlo ya hace rato
Por la forma de expresarte, y haciendo uso de esas capacidades adivinatorias que te alucinan, he de decirte que debes ser uno de esos conejeros nacidos entre tuneras que piensa que este trocito de tierra le pertenece y que cuida como oro en paño. Seguro que es de los que ponen el grito en el cielo por todo, pero usa coche quemando diésel y gusta hacer barbacoas de carne ecológica. Vamos, de esos que piensan que el mundo les debe algo y que si no naces aquí, tus derechos son limitados. Un canario auténtico, de los que cantaban conmigo aquello de “canarios somos, canarios seremos…” Me equivoco? Frepic awañak?
Touchè!! Has dado en el clavo con todo, incluidas las tuneras, pobre diablo
Puro racismo y actitud colonial. Por actitudes como esa fueron erradicados los aborígenes y prácticamente no conocemos nada de ellos.
Siempre aparece pseudo griego que prefiere salirse por la tangente
Felo, mi niño, no te has enterado de nada, anda, vuelve a leer el artículo que al que le falta leer es a tí.
Vaya circo, juegan a ver quien es más intelectual.. !! Me exploto del egoísmo y Narcisismo. No defiendan Lanzarote si no como chiquillaje inseguros compiten a ver quien dejas el texto más interesante ..así con todas estas mentes pensante . Queridos Gusiiii luzzzz .. apagamos la luz , porque si en cada problema vamos a leer todas estas tonterías..
A 22: Vaya circo. Juegan a ver quien es más tonto y bruto porque les da inseguridad exponerse más allá del insulto y la burla.
¡Gran idea! Ataquemos la fuente de riqueza y modo de vida de 200.000 personas en Canarias. Hablemos del malvado dueño de una cadena de hoteles, para así no tener que mirar a los ojos a los trabajadores, a los dueños de apartamentos pequeños complejos, a los transportistas que abastecen las zonas turísticas, a los dueños de tiendas, restaurantes y otros locales de hostelería, a los taxistas y , en general, a los demás canarios atacados por este desvarío. Esto es no tener el norte claro.
Estamos vendiendo nuestra isla, pronto será como Las Américas o Playa del Inglés. Perderemos la Reserva de la Biosfera... ¡Que triste! Aunque alguno igual se alegra.

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