En la última década, gracias a los avances de la tecnología, la sociedad mundial se ha globalizado de forma notable. Si bien se siguen conservando ciertos rasgos que nos dividen en territorios, tal y como el idioma o las tradiciones, la mayoría de los países están interconectados las veinticuatro horas del día. De este modo, los países cambian día a día influenciados por otros, y el mundo progresa más rápido que nunca. Seguidamente, comentaremos qué supone la globalización en varios ámbitos y cuáles son sus limitaciones.

Las nuevas formas de invertir

Para empezar, la globalización ha sido clave para la economía, ya que ha permitido la apertura de los mercados. Además, gracias a la conexión a Internet, se pueden realizar inversiones desde una punta del mundo a la otra en cuestión de segundos y sin salir de casa. El catálogo para elegir es amplio, por lo que cualquier experto de la materia puede encontrar su mercado ideal. En este punto, entran en juego los husos horarios, dado que los mercados operan a distintas horas. Hay que tener presente que nuestra mañana puede ser la madrugada en otro país, por lo que estamos limitados por ello.

Aun así, algunos mercados están operativos veinticuatro horas al día durante toda la semana, como por ejemplo el de Bitcoin o el de Ethereum. Por tanto, la inversión online en la mayoría de las criptomonedas no depende de horarios y por lo tanto es más accesible. También son destacables las denominadas plataformas de social trading que han surgido gracias al mundo interconectado en el que vivimos. Éstas permiten a los usuarios observar las transacciones de expertos de todo el planeta, ya sea para imitarlos o para estudiar los mercados.

Trabajo a distancia

Otro fenómeno creado gracias a la globalización es el trabajo a distancia, sobre todo en el terreno freelance. Hoy en día, ya no es necesario acudir a una oficina para poder obtener un sueldo pero seguimos limitados por la diferencia horaria. En consecuencia, una empresa tiene más oportunidades de encontrar talentos pero si son de zonas horarias muy distintas, podrían tener dificultades para comunicarse y organizarse. Asimismo, podrían haber malentendidos por diferencias culturales a la hora de realizar algunos proyectos. De todos modos, las cifras del año pasado indican que este tipo de empleos seguirá creciendo. Por ejemplo, de acuerdo con Freelancer, en el tercer trimestre del 2019 la demanda de desarrolladores freelance para asistentes virtuales subió un 55,6 %.

Comunicación y redes sociales

Uno de los factores clave que ha permitido la globalización es la facilidad con la que ahora podemos comunicarnos. Ésta ha hecho posible el mencionado trabajo a distancia y ha creado una nueva forma de ver el mundo. Hablar por videoconferencia de forma fluida y recibir mensajes de forma instantánea y sin costes adicionales ya es una realidad, por lo que la cercanía entre personas que viven a miles de kilómetros se reduce cada día más. A través de redes sociales como Twitter, es incluso posible expresar una opinión y hacer que ésta llegue a millones de desconocidos en cuestión de segundos.

Sin embargo, las redes sociales pueden ser un arma de doble filo, ya que publicar contenido inapropiado podría causar críticas negativas y hasta la pérdida de un trabajo. Por otro lado, también hay que tener en cuenta que una gran parte del contenido que circula es falso y solo se debe confiar en medios de comunicación reconocidos. Esta problemática va más allá de las conocidas noticias falsas o fake news, dado que se pueden encontrar usuarios que confían en falsos remedios milagrosos de tiendas online o vídeos virales y no acuden a especialistas. Asimismo, tal y como indica La Vanguardia, varias apps conocidas recogen nuestros datos  y comercian con ellos, por lo que siempre hay que leer la letra pequeña.

En conclusión, la globalización es un fenómeno que ha roto barreras y nos ha brindado numerosas posibilidades, pero también tiene limitaciones y contras que deben considerarse. Estar interconectados permite que invertir y trabajar a distancia y nos posibilita comunicarnos con conocidos de forma sencilla. Ahora también es más simple acceder a todo tipo de información nacional e internacional pero es necesario contrastarla y cuidar el contenido que compartimos.