El ‘caso de las pardelas’ de Alegranza ha comenzado su recorrido judicial. El Juzgado de Instrucción número 2 de Arrecife ha empezado a citar a los imputados que fueron denunciados por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil tras ser sorprendidos comiendo pardelas. En un principio se identificó a 19 personas y al final se terminó imputando a 20, según informó la Benemérita.

El próximo 22 de octubre a las doce de la mañana está citado para declarar el empresario Fernando González Berriel en calidad de imputado después de que el Juzgado de instrucción número 2 de Arrecife dictara el correspondiente auto de admisión a trámite de la denuncia por un delito contra la flora y la fauna.

Los efectivos del Seprona de la Guardia Civil cogieron ‘in fraganti’ a los miembros de un grupo que contaba con autorización administrativa para fondear con embarcaciones en la playa del Veril, en Alegranza. González Berriel fue quien solicitó el permiso. En concreto, el Cabildo de Lanzarote concedió la autorización el 4 de septiembre.

En la solicitud, que se formuló desde el 24 de junio, se pedía permiso para “para fondear en el Veril” de Alegranza y para “acceder” al islote “y pasar el día en la playa” entre los días 5 y 12 de septiembre. La Guardia Civil apareció el 8 de septiembre. El permiso otorgado por el Cabildo resolvía la solicitud para fondear tres embarcaciones: Coscofe, con Juan Carlos González Berriel de patrón; Coscofe II, con José Luis Pérez de patrón; y Life II, con Fernando González Berriel de patrón.

El empresario solicitó el permiso al Cabildo de Lanzarote para fondear tres barcos y acceder al islote del Parque Natural del Archipiélago Chinijo

“Según la solicitud”, se destaca en la resolución del Cabildo de Lanzarote, “se pretende pasear por la playa de arena durante el día, bañarse y si ven suciedad limpiarla”. La Guardia Civil indicó que los denunciados aprovecharon para “desembarcar en la Isla y cazar varios especímenes de pardela cenicienta, aprovechando la época de cría de estas aves”. Fueron sorprendidos con toldos, mesas y sillas, y cocinando supuestamente varias pardelas, especie catalogada como “vulnerable” e incluida en el catálogo español de especies amenazadas.

Cabe destacar que la Guardia Civil puso en conocimiento del Cabildo de Lanzarote las denuncias, “en previsión de la correspondiente investigación por parte de sus técnicos para que se evalúe el daño originado por estas personas en el islote”. Alegranza se encuentra dentro de un espacio protegido por la legislación, en este caso a varios niveles, ya que se enmarca en el Parque Natural del Archipiélago Chinijo, siendo a su vez Zona de Especial Conservación (ZEC) y también Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).