Casa de Cultura, de Jaén; limpieza, de Madrid

Los constructores piden fijar criterios para que la obra pública se la lleven empresas asentadas

Casa de la Cultura Agustín de la Hoz.
M.R. 3 COMENTARIOS 10/01/2014 - 06:08

Se está convirtiendo en habitual que empresas foráneas, que no están asentadas en Lanzarote, se presenten y consigan la adjudicación de proyectos de obra pública en la Isla de escaso volumen económico ofertando su ejecución con precios bajos “rozando lo temerario”.

El paso siguiente es subcontratar a empresas lanzaroteñas, “en ocasiones que optaron a la misma licitación”, para que ejecuten los trabajos, con márgenes tan ajustados que cualquier imprevisto en la obra o la propia situación económica de la empresa genera problemas. No son pocas las ocasiones en las que del presupuesto al que se comprometen ejecutar las obras a lo que luego se reclama cobrar hay un trecho.

Así lo denuncia el presidente de la asociación de constructores de Lanzarote, Neftalí Acosta, quien destaca que ésta es “una situación que no se explica”. Cita como ejemplo el proyecto de embellecimiento en el acceso al puerto de Órzola y la remodelación de las aceras del pueblo, adjudicado a Acciona por 498.666 euros, unos 215.000 euros menos que el presupuesto por el que salió a concurso.

“Al final, las obras se han subcontratado a una empresa de aquí que también se presentó al concurso”, señala Acosta, quien asegura que las empresas de fuera no suelen mandar más que a la dirección de obra. “Aquí falla algo”, destaca el presidente de los constructores de la Isla.

Acosta subraya que hay posibilidades, respetando la “libre competencia” y “dentro de los cauces legales”, de tener en cuenta criterios que permitan valorar en los concursos de obra pública “tener la infraestructura básica en el lugar de ejecución del proyecto”, en casos como las intervenciones en carreteras, o “una garantía real sobre la obra”.

“Si una empresa de fuera se va, búscala después si hay algún problema para pedirle responsabilidades”, señala Acosta, quien recuerda los quebraderos de cabeza de la estación de guaguas en Arrecife, “adjudicada con una baja brutal y que terminó costando más de lo que se presupuestó, quedando subcontratas sin cobrar”.

Si una compañía “está asentada debería tener mayor puntuación”, opina. En cambio, recalca el presidente de la asociación de constructores de Lanzarote, las instituciones públicas de la Isla se están inclinando por tener en cuenta exclusivamente el precio más bajo, que es “lo más sencillo”, aunque resalta que, en ocasiones, “lo barato sale caro”.

Casa de Cultura, de Jaén, y limpieza de cunetas, de Madrid

Dos ejemplos de obras o servicios de escasa cuantía económica que han sido adjudicados a empresas foráneas son la continuación de la rehabilitación de la Casa de la Cultura Agustín de la Hoz, entregada a una empresa de Jaén, denominada INCOC, que rozó la oferta económica “desproporcionada o temeraria”. De una obra de 232.000 euros asegura que la hará por 63.000 euros menos.

Por otro lado, el Cabildo ha adjudicado la limpieza de cunetas, para contratar a desempleados, a TALHER, una empresa de Madrid. El programa cuenta con 167.000 euros.

Comentarios

Pues que se pongan las pilas las empresas de aquí. Yo quiero con mis impuestos pagar al mejor postor sea de donde sea!!!
Pues que se pongan las pilas las empresas de aquí. Yo quiero con mis impuestos pagar al mejor postor sea de donde sea!!!
En las obras públicas, ya se sabe, hay mucho chanchullo y mamoneo. Transparencia, es lo que hay que exigir.

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