Arrecife: el impulso que no llega
El centro de Arrecife vive horas bajas. La lista de puntos débiles es amplia: la pérdida de empuje comercial, el abandono de inmuebles antiguos y espacios públicos, las dificultades de accesibilidad o los deficientes servicios han generado un poso de pesimismo sobre el presente y futuro del casco urbano. En el otro lado de la moneda, la capital de la Isla sigue teniendo inmensas oportunidades: el desarrollo del Puerto, el auge del Charco de San Ginés o el incremento de turistas son factores que invitan a la esperanza. Analizamos las claves de cómo está la ciudad y cuáles son sus principales retos.
01. EL PRESENTE DEL COMERCIO
Hace cinco años, Arrecife tenía unos 131.000 metros cuadrados dedicados al comercio, algo más de la mitad de la oferta global de la Isla. En la actualidad, a pesar de las aperturas de establecimientos en los polígonos comerciales del extrarradio, la superficie total dedicada al comercio ha disminuido en casi 6.500 metros cuadrados, según los datos del Gobierno de Canarias. El censo del Ejecutivo regional evidencia cómo mientras Arrecife retrocede, municipios como San Bartolomé o Yaiza dan pasos hacia adelante al incrementar su oferta comercial.
En las calles del centro de la capital de la Isla dedicadas tradicionalmente al comercio –la calle Real, Hermanos Zerolo, Fajardo, Manolo Millares o Canalejas- un estudio efectuado por la Cámara de Comercio de Lanzarote ha detectado unos 250 establecimientos en funcionamiento. Se trata de negocios que, de media, tienen plantillas de no más de cinco empleados y menos de 300 metros, en los que predomina el sector textil, el calzado o los complementos.
El reciente recuento efectuado por la Cámara también se topó con un dato preocupante: hay unos 115 locales comerciales cerrados y “las nuevas aperturas se cuentan con los dedos de la mano”. “Hay locales en los que, en pocos meses, abren y cierran distintos comercios y no terminan de asentarse”, señalan desde la entidad empresarial, que pone el acento en que el índice de “supervivencia” de los nuevos establecimientos es bajo. Se mantienen, con dificultades, las casas comerciales “con trayectoria” que han conseguido, a lo largo de los años, “fidelizar a sus clientes”.
02. ACCESOS COMPLICADOS
Los responsables de las organizaciones empresariales consultados llegan a conclusiones parecidas: al casco urbano de Arrecife cuesta llegar, bien en vehículo particular o bien en transporte público. Otro dato: las guaguas urbanas, con recorridos que conectan los barrios con el centro, transportaron en el último año a 323.816 personas. Hace cinco años fueron 266.000 pasajeros más.
La remodelación de calles ha eliminado centenares de plazas de aparcamiento y las grandes áreas donde se estacionan vehículos, como el solar frente a Ginory o la antigua Rocar, lo lógico es que tiendan a desaparecer. Se trata de terrenos de propietarios privados con pleitos millonarios contra el Ayuntamiento por haberlos calificado de uso público en los años 90, sin compensar ni expropiar.
Otra cuestión a resolver es cuando el visitante ya se encuentra en el centro de la ciudad. El nuevo presidente de la asociación Arrecife Zona Centro, Miguel Cabrera, incide en que “se debe cuidar la señalización” y explica que el visitante se topa con determinados “puntos negros” y también se pierde. En esas situaciones, “se da la vuelta y se va” sin tener la “oportunidad” de conocer los comercios del centro. El colectivo propone que la zona comercial se identifique con unos tótems que además den la bienvenida a los potenciales clientes. Entre ellos, por ejemplo, los 184.000 cruceristas que llegaron a Arrecife en el primer semestre del año.
03. ENTORNO DEGRADADO
“El talón de Aquiles” de la capital de la Isla, señala el presidente de la Cámara de Comercio, José Torres, es “el entorno degradado del centro de Arrecife, que no invita a que los ciudadanos lo disfruten”. “En los barrios hay deficiencias de asfalto, de aceras y de alumbrado, pero no se ve el abandono de calles enteras como en el centro”, añade. En las vías principales hay edificios incluidos en el catálogo arquitectónico municipal de 2008 (con 70 bienes pero anulado por el Tribunal Supremo desde 2013), inmuebles incorporados en el documento de aprobación inicial del Plan General de 2014 (más ambicioso, con 169 bienes y limitaciones de alturas en ciertas zonas como el Charco o La Plazuela), y edificios que no están protegidos pero que se encuentran deteriorados y cerrados a cal y canto.
Miguel Cabrera, presidente de Arrecife Zona Centro: “Pedimos al Ayuntamiento que la normativa sea flexible y permita intervenir a los propietarios en los inmuebles”
En los últimos años, la única rehabilitación relevante de un inmueble con valor patrimonial ha sido la de la antigua Fábrica ‘La Defensa’, en la calle Real. En un tramo de 250 metros en la misma vía, en los últimos años han echado el cierre una tienda de máquinas de coser, una de discos, una zapatería o dos tiendas de ropa en inmuebles protegidos. En el Plan General se presentaron como alegaciones una intervención en el Mercadillo o la construcción de un edificio donde se encuentra una antigua nave en la ribera del Charco, con planta baja destinada a librería y planta alta para vivienda, pero, en líneas generales, no hay previstos proyectos vinculados a edificaciones antiguas en el centro.
“Pedimos al Ayuntamiento que la normativa sea flexible y permita intervenir a los propietarios en los inmuebles, porque de lo contrario”, dice Cabrera, la experiencia demuestra que “se les pone una cruz y se deja que se caigan”, añade. Tampoco el espacio público corre mucha mejor suerte: el actual parque Islas Canarias tiene numerosos desperfectos y poco se parece al que se diseñó, el parque Ramírez Cerdá está infrautilizado y la plaza de Las Palmas requiere de un proyecto de reforma urgente.
Batería de propuestas para la capital
Mejora urgente del entorno urbano
“Nos gusta ir a un sitio que esté limpio, bien cuidado, agradable”, reconoce la concejal de Comercio de Arrecife, Isabel Mesa (PIL), quien considera que la actividad comercial “es fundamental” pero “no le estamos dando la importancia adecuada”. Si se marchita definitivamente el comercio y se degrada el entorno, el centro urbano está en serios apuros. “O la ciudad se pone bonita o las firmas comerciales se terminarán marchando del centro”, recalca el presidente de la Cámara de Comercio. Al contrario, opina, si el casco urbano “pega un cambio” se convertirá en un polo de atracción comercial que atraiga a nuevas marcas. Desde la organización empresarial se apuesta también por generar atractivos aprovechando la marina de Arrecife. “Algo tan sencillo”, indica Torres, como construir una escalinata, integrada en el entorno, para facilitar el baño en la “piscina natural” de la zona del Puente de Las Bolas.
Recuperar el hábito de “bajar a Arrecife” a comprar
Isabel Mesa, concejal de Comercio: “La actividad comercial es fundamental pero no le estamos dando la importancia adecuada”
En apenas un lustro, el Charco de San Ginés ha despegado como la gran zona de restauración de Arrecife. Han abierto más bares y restaurantes y los clientes se han multiplicado. En el otro lado de la balanza se encuentra el área comercial. El presidente de Arrecife Zona Centro destaca que “hay que tratar de que la gente recupere el hábito de volver a comprar” en el casco urbano. Una propuesta, apunta, es informar a los potenciales compradores de dónde se puede aparcar y que los comerciantes se hagan cargo de abonar al cliente el coste de dejar el vehículo en un parking privado. “Sería un estímulo”, resalta.
Una alternativa extendida en numerosas ciudades europeas es fomentar la rotación de vehículos en las plazas de aparcamiento de las calles más céntricas. ¿La fórmula? Estableciendo un periodo máximo de tiempo durante el que un vehículo puede estar aparcado en horario comercial y que se pueda controlar mediante discos horarios –los hay de cartón- en el que se indique la hora de llegada.
Impulso al Puerto y a su entorno comercial
Arrecife está a la espera de que se materialice la inversión prometida por el Gobierno central de 28 millones para la ampliación del muelle de cruceros de Arrecife y del abrigo de la zona portuaria, para mejorar las condiciones del Puerto. La mejora de la promoción del Puerto capitalino, para atraer más actividad y el desarrollo de su entorno es otra de las oportunidades de futuro.
Organizaciones empresariales como la Cámara de Comercio destacan que Arrecife dispone de importantes bolsas de suelo industrial y comercial cerca de la zona portuaria que están pendientes de que se desbloquee su ordenación urbanística, y cuyo desarrollo consideran que fomentaría la actividad económica en la capital.
Es el caso de Tenorio, un sector de 288.000 metros cuadrados que lleva años esperando para regularizarse. Al sur de Tenorio se encuentra el sector Altavista Este, de 190.000 metros. Lindando también con Tenorio, pero pegado a la Circunvalación, se encuentra el sector urbanizable Industrial Altavista, de 169.000 metros cuadrados. Justo en la trasera del muelle está contemplado el sector industrial Los Mármoles, con 239.000 metros cuadrados de superficie.
Comentarios
1 Alcalde Sáb, 21/10/2017 - 08:59
2 picudo rojo Sáb, 21/10/2017 - 09:20
3 Triste Sáb, 21/10/2017 - 11:28
4 La vecina del q... Sáb, 21/10/2017 - 11:45
5 Anónimo Sáb, 21/10/2017 - 13:06
6 Ciudadana Sáb, 21/10/2017 - 15:28
7 ¿ Y el Plan ? Sáb, 21/10/2017 - 17:23
8 Sonia Sáb, 21/10/2017 - 18:32
9 ateo Sáb, 21/10/2017 - 18:51
10 ateo Sáb, 21/10/2017 - 19:02
11 Abran la avenid... Sáb, 21/10/2017 - 23:30
12 M ateo Dom, 22/10/2017 - 08:34
13 Naufragio socia... Dom, 22/10/2017 - 12:16
14 Nieves Dom, 22/10/2017 - 12:28
15 Lola Dom, 22/10/2017 - 14:22
16 Harto Dom, 22/10/2017 - 15:18
17 Pepelleo Dom, 22/10/2017 - 16:45
18 Kepler Dom, 22/10/2017 - 16:55
19 ateo Dom, 22/10/2017 - 16:59
20 Ciudadana Lun, 23/10/2017 - 15:00
Añadir nuevo comentario