El presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro San Ginés, ha rechazado la posibilidad de que Repsol instale una base logística en la Isla para sus sondeos petrolíferos, pues ha insistido en que son incompatibles con el modelo económico de Canarias, basado en el turismo.

"Repsol tiene la batalla perdida y cuanto antes asuman que aquí no nos vendemos y que su única salida es que nos dejen en paz, pues mejor", asegura San Ginés en un comunicado, en respuesta a las manifestaciones del presidente de la empresa, Antonio Brufau.

Sobre estas declaraciones, San Ginés además ha lamentado además que Brufau haya elegido Gran Canaria en lugar de Lanzarote y Fuerteventura para ofrecer una rueda de prensa, pues estas dos últimas islas son las "principales afectadas por el proyecto petrolero".

El presidente del Cabildo de Lanzarote recuerda que tras más de veinte meses de campaña contra el proyecto petrolífero, su corporación insular, en colaboración con otras entidades públicas y privadas, ha evidenciado que las extracciones "destruirán mucho más empleo en las islas que los escasos que pueda generar".

Además, sostiene que el Cabildo ha demostrado que Canarias no solo no se beneficia económicamente de la explotación, sino que afrontaría pérdidas en los ingresos turísticos, y ha constatado que un derrame de crudo podría alcanzar la costa de cualquier isla canaria y contaminar una extensa superficie oceánica de gran riqueza biológica para el planeta.

Unas perforaciones que alcancen 7.000 metros de profundidad, bajo un lecho marino de cotas ultraprofundas y ubicado en un dorsal con actividad sísmica, no tranquiliza en modo alguno por mucho que Brufau afirme que es positivo para las islas, apostilla San Ginés.

El vicepresidente del Cabildo, Joaquín Caraballo, añade que, aunque Brufau afirme que la probabilidad de un derrame es remota o que se va a disponer de la más moderna tecnología, "ni estamos preparados ni dispuestos siquiera a asumir tan elevado riesgo. En ningún caso y bajo ningún concepto".

En cuanto a la seguridad defendida por el presidente de Repsol, en relación a las prospecciones, el Cabildo asegura que la realidad "contradice totalmente su criterio", tal y como reconoce en su página web, donde figuran registrados 6.985 vertidos en sus instalaciones entre los años 2006 y 2010. El Cabildo menciona en particular los ocurridos en la provincia de Tarragona, que Repsol expone como ejemplo de buenas prácticas.

Preguntas sin resolver

Así mismo, la corporación formula una serie de preguntas a Brufau en relación a la alarma lanzada por las más importante patronales turísticas de Europa, en relación a los sondeos, y a la campaña internacional que según el Cabildo se está gestando contra la petrolera.

También se interesa por el dinero que pagaron las petroleras alemana RWE Dea Energy y la australiana Woodside, por la venta de parte de su concesión para llevar a cabo las prospecciones autorizadas en 2001 por el Gobierno presidido por José María Aznar, dónde tributó fiscalmente Repsol por esas operaciones, el ingreso que obtuvo la Hacienda española y el porcentaje que se destinó a Canarias.

El Cabildo concluye en su nota preguntando a Repsol si es consciente del impacto y alcance que tendría en Canarias la noticia internacional de que una marea negra afectara a las islas.