Este martes por la mañana se ha procedido a retirar el cachalote de nueve metros de longitud y más de nueve toneladas de peso que apareció el viernes en una zona de difícil acceso en la costa de la localidad de Órzola.

Se trata de un ejemplar "joven" de una especie en la que los individuos pueden alcanzar los 70 años de vida, según explicaron desde el área de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote, que ha coordinado la retirada del cachalote.

El ejemplar ha sido trasladado al complejo ambiental de Zonzamas para efectuarle una necropsia, con la que se tratará de determinar, si fuera posible, las causas del fallecimiento, según explicó el consejero Marcos Bergaz.

Bergaz indicó que el traslado del cachalote ha sido "complicado" al encontrarse en una zona de difícil acceso. De hecho, se llegó a valorar recuperar el cadáver por vía marítima, opción que se descartó ante el mal estado del mar. Al final se ha utilizado una grúa y una plancha para transportarlo.

Además de para determinar las causas del fallecimiento, la retirada del cachalote fallecido se ha llevado a cabo por razones "sanitarias", según explicó este martes el consejero de Medio Ambiente, puesto que las viviendas más próximas se encontraban "a unos cien metros" de donde se encontraba el ejemplar.

El consejero avanzó que el esqueleto del cachalote se incorporará al futuro museo de cetáceos que el Cabildo de Lanzarote quiere habilitar, cuya idea ya ha sido trasladada a la Autoridad Portuaria de Las Palmas junto a la del Museo del Mar de Lanzarote. Entre las posibles ubicaciones se encuentran las antiguas naves de Frigorsa, en el puerto de Naos.

Vídeo