Ástrid Pérez, en tacones sobre una pila de cadáveres
Lo mejor que pueden hacer los cargos públicos del PP en Lanzarote es hacer poco y mal, no sea que vayan a cabrear a la presidenta local.
Ástrid Pérez lleva muy mal que destaque alguien que no sea ella, y, por tal motivo, ha sembrado el camino de cadáveres políticos. Su férreo control del partido y sus habilidades para poner de su lado los suficientes apoyos para mantenerse resulta sorprendente pues, en teoría, hace tiempo que perdió toda credibilidad para mantener su palabra y sus compromisos con quienes le brindan apoyo. El penúltimo movimiento, del que debe estar ideando la excusa para justificarlo, es con Jacobo Medina al que mantiene como consejero pero manda descabezar de la vicepresidencia del Cabildo. Jacobo no ha destacado por un perfil bajo, principalmente ante los medios de comunicación, y no es la primera vez que Ástrid intenta neutralizarlo. La vez anterior rompió el pacto en el Cabildo, donde ella nada tenía que ganar y Medina perdió su proyección. No me sorprendería que lo acuse de desleal porque corría la voz de que aspiraba a presidir el partido en Lanzarote. No es seguro que eso haya salido de la boca de Medina, pues es más que probable que lo haya hecho correr ella para señalar que ese es el motivo de la pérdida de confianza. Pérez no necesita un psicólogo ni ir a terapia, pues no creo que padezca patología alguna más allá de que sea una gansa que no quiera trabajar y para quien la política se muestra como su fuente de ingresos ad eternum. Para lograrlo, debe estar en permanente atención sobre la irrupción de eventuales líderes y cepillárselos sin contemplaciones.
En los próximos comicios ya sabe Jacobo lo que le toca, algo así como desparecer del mapa, figuradamente. La otra amenaza, y esta más evidente que la de Medina, es la de Yonathan de León, que ya puede ir pensando que ni por asomo va a ir el número uno a la alcaldía de Arrecife a pesar de su popularidad, o precisamente por ello.
Ástrid se va a garantizar la alcaldía y el Parlamento, y sólo si le vuelve a salir la bicoca de presidirlo, dejaría al número dos, como hizo en este mandato, y que bien puede volver a ser Yonathan, para que arrime votos a su causa mientras ella se apoltrona y agranda su figura en tan confortable sillón.
Siempre he pensado que la colocaron en la presidencia del Parlamento para alejarla de la isla y renovar el partido, pues ella, que es un verso libre, hace lo que le conviene y no está para disciplinas impuestas desde fuera. El PP regional no sopesó las inmensas habilidades de Pérez para estar en misa y repicando. Hay una máxima que debe decir algo así como “si no lo quieres, asciéndelo”, pero no sopesaron lo voluntarioso que es el personaje. Medidas como esta se adoptan siempre en todos los partidos, y muestras sobradas hay de ello. Lo habitual es que los mandes al Senado a que se olviden de él o de ella, y que luego se jubilen de lo público con cierto honor, pero no están teniendo éxito con la ínclita.
El nivel de abducción en el PP local parece tremendo, pues no existen críticos, existiendo sobradas razones para ello, como es haberse cargado gente válida para mantener el poder por parte de una persona tan poco brillante. Y digo que es tan fácil como garantizarle a Ástrid los apoyos y luego dárselos a otro, pues ella nunca va a reconocer determinadas capacidades en terceros ni a devolver el favor a quien pueda hacerle sombra. También es probable que la partida para mantener el control -el juego sucio- se esté produciendo entre mindundis, resentidos, envidiosos y negados a los que les va bien estando donde están, esto es dándole coba a la presidenta y a los que les basta con figurar. Lo dicho, seguro que una rebelión discreta terminaría con esa forma de estar en política como la que representa Ástrid Pérez, y todo sea dicho, tampoco es que sea exclusivo de ella. También puedo equivocarme y que no haya huevos ni talento para conspirar. De ser así, ella es la más lista y parece razonable pensar que le quede una larga carrera por delante, así sea con los tacones pelados entre el montón cada vez más alto de cadáveres.
Comentarios
1 Anónimo Mié, 29/01/2025 - 08:30
2 Joshe Mel Mié, 29/01/2025 - 13:41
3 Anónimo Mié, 29/01/2025 - 14:43
4 la buena mujer ... Mié, 29/01/2025 - 19:04
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