El Ayuntamiento de Yaiza galardonó a las Salinas de Janubio durante los actos conmemorativos del Día Internacional del Turismo celebrados el pasado fin de semana en Playa Blanca.

La distinción municipal fue entregada por la alcaldesa Gladys Acuña y recibida por Francisco Padrón Viñas, propietario de la firma que explota las emblemáticas salinas, que ya cumplen más de cien años de actividad productiva, convirtiéndose además en un reclamo turístico de quienes visitan Lanzarote.

La propiedad expresó su “inmensa alegría y gratitud” por el reconocimiento institucional. Las salinas emplean actualmente a siete personas, con un balance productivo de un millón de kilos anuales, aunque su capacidad es mayor.

La propiedad sigue reivindicando a los gobiernos central y regional la consideración de la sal como producto agroalimentario y no minero. “Pedimos salir del régimen de la minería y depender de Agricultura”, reclamaba Carlos Padrón, hijo de Francisco, que hace parte de la tercera generación de propietarios, en presencia del maestro salinero Modesto Perdomo.

Janubio sigue apostando por la sal artesanal pero demanda mejores condiciones de competencia. “Hay que gravar la sal que viene de fuera”. Carlos Padrón, que es vicepresidente de la Asociación de Productores de Sal de Canarias, advierte que es un problema que padecen todas las salinas del Archipiélago.

Janubio posee la mayor superficie de salinas de Canarias con 450.000 metros cuadrados entre cocederos y salinas.  Un pequeño porcentaje de la producción se exporta  a Alemania y Janubio provee de salmuera a pesqueros vascos.

En el acto los asistentes pudieron degustar gofio, recibieron de recuerdo sal de Janubio en pequeñas bolsas impresas con la imagen turística de Playa Blanca y disfrutaron de la batucada Menuda Caña, del dúo Volcano o de la Orquesta Clásica de Lanzarote.