La Confederación Empresarial de Lanzarote (CEL) ha puesto en marcha un programa, que se extenderá durante al menos  un año, para asesorar a profesionales y empresarios que se encuentren en la denominada economía sumergida y que puedan regularizar su situación.

El presidente de la CEL, Juan de León, destacó que la economía sumergida representa “un 28 por ciento” de la actividad empresarial en el Archipiélago y genera “competencia desleal” a las empresas que cumplen con las obligaciones legales.

“El objetivo del proyecto no es otro que sensibilizar a la población, al sector empresarial, a los sindicatos, a los trabajadores, a las administraciones y a la población en general” porque la economía sumergida “es un problema de todos”, subrayó De León.

El presidente de la patronal lanzaroteña insistió en que la intención del programa es “ayudar” y “sensibilizar” para que “quien quiera pueda emerger” desde la economía sumergida. “No estamos para atacar a los empresarios sino para ayudarles a que se pongan al día y realicen su actividad de forma reglada”, subrayó Vicente Stinga, responsable del proyecto.

Stinga detalló que se llevarán a cabo varias acciones, como un punto de información gratuito para asesorar a los empresarios, que se encuentra en la sede de la CEL, en la planta baja del conocido como edificio de los sindicatos, junto a la Policía Local de Arrecife.

El asesoramiento englobará cuestiones laborales, fiscales o administrativas ya que, como explicó Stinga, “muchas veces” la situación de irregularidad no es solo por “no pagar” sino por “no tener licencia de apertura o incumplir en prevención de riesgos laborales”.

“No estamos para atacar a los empresarios sino para ayudarles a que se pongan al día y realicen su actividad de forma reglada”

El proyecto de la CEL incidirá en la “sensibilización” a través de una campaña informativa en los medios de comunicación de la Isla. También estará disponible, en el portal web de la patronal, un apartado con información a empresarios y para comunicar “situaciones irregulares” de forma “confidencial”.

En caso de recibir quejas, la intención de la CEL es “hablar con el empresario y tratar de que se ponga en situación regular, asesorándole”. “Nuestra intención no es denunciar ni poner en la picota a nadie, sino hacerle ver que no es la mejor situación para desarrollar su actividad empresarial”, apostilló Stinga.

El proyecto, que también se ha desarrollado en otras Islas, cuenta con un periodo de vigencia inicial de un año y una subvención del Cabildo de 60.000 euros. El presidente de la Corporación insular, Pedro San Ginés, no descartó “que tenga sucesivas ediciones” en función de sus resultados.

Más información:

Portal de economía sumergida de la Confederación Empresarial de Lanzarote (CEL)