La Audiencia Provincial juzga a Jamil B., acusado de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, para el que la Fiscalía solicita una condena de cinco años de prisión. Se le acusa de colaborar con una ‘mafia’ dedicada al tráfico de inmigrantes irregulares desde Marruecos a Lanzarote.

Jamil B. fue arrestado en la madrugada del 25 de marzo de 2011, cuando arribó una patera a las costas de la localidad de Playa Blanca, en el municipio de Yaiza, que había zarpado del litoral marroquí “con al menos nueve inmigrantes a bordo, los cuales habían pagado dinero a los traficantes” para “traerlos hasta España, donde pretendían entrar de manera ilegal”.

La Fiscalía señala que el acusado, que tenía 20 años cuando sucedieron los hechos, estaba en situación legal en el Archipiélago y que se encontraba en Lanzarote después de haberse trasladado desde Tenerife, donde residía.

Añade que alquiló dos vehículos “con la finalidad de recoger a los extranjeros que llegaban en la patera y que el acusado sabía que llegarían a la costa de Playa Blanca esa noche y así facilitar su entrada” en el país “sin ser interceptados por las autoridades”. Sin embargo, fue localizado con uno de los inmigrantes, Fubad E., “cuando ya había recogido a otros inmigrantes y los había alejado de la costa”.