El Partido Popular ha puesto este martes las cartas sobre la mesa ofreciéndose abiertamente a volver a gobernar con Coalición Canaria en el Cabildo de Lanzarote “ante la inestabilidad y parálisis” que a su juicio atraviesa la institución.

El PP ha planteado a los nacionalistas “el mismo acuerdo” que se fraguó tras las últimas elecciones y que apenas duró unos meses, justo cuando Coalición expulsó a los populares con el argumento de que estaban preparando una moción de censura contra Pedro San Ginés.

El Partido Popular, dirigido por Ástrid Pérez, emitió este martes un comunicado en el que sostiene que esa alianza “reflejaba fielmente la voluntad que los ciudadanos manifestaron en las urnas en las últimas elecciones locales”.

“La propuesta del Partido Popular responde a la evidente e incontestable inestabilidad en la que se encuentra actualmente el Cabildo de Lanzarote así como a la parálisis existente desde el punto de vista de la gestión”, añade.

Por el momento, el grupo de gobierno (CC y PSOE) sólo ha perdido varias votaciones en el Debate sobre el estado de la Isla, aunque no convocó el pleno ordinario de octubre alegando cuestiones de agenda.

El PP considera que en el Cabildo se ha producido un “estancamiento institucional” que se traduce en la falta de sesiones plenarias o en “la ausencia de una estrategia de defensa de los intereses de la Isla” de cara a los presupuestos autonómicos de 2014.

El Partido Popular entiende que “la situación de inestabilidad que se vive en la principal institución insular es el resultado de la política de pactos desechada por CC desde el inicio de la legislatura y cuyos nefastos efectos estamos comprobando ahora”.

No obstante, la minoría que padece el grupo de gobierno se debe a la indisciplina de los consejeros nacionalistas Sergio Machín y Mónica Álvarez, que han alegado enfrentamientos con San Ginés.

Que gobierne el más votado

Par el PP, “el tiempo ha demostrado que el mejor acuerdo para la gobernabilidad de las diferentes corporaciones locales en las que no existían mayorías absolutas” era el pacto entre nacionalistas y conservadores.

Ofrece que presidan las instituciones quienes ganaron las elecciones

“Aquel [pacto] en el que el PP gobernaría en las corporaciones donde hubiese obtenido el respaldo mayoritario de la ciudadanía”, como en Arrecife, “mientras que en el resto apoyaría a la fuerza política más votada”, caso de Cabildo y Teguise.

Desde el Partido Popular se recuerda que mientras “cumplió su compromiso”, Coalición “negó su apoyo allí donde el PP ganó las elecciones”. De ahí que cerrase un pacto con el PSOE en el Ayuntamiento capitalino.

“Misma voluntad”

“A día de hoy”, concluye el comunicado, “el Partido Popular mantiene la misma voluntad de dar estabilidad a las instituciones que la que se puso de manifiesto en junio de 2011, cuando se suscribieron los distintos acuerdos de gobernabilidad”.