La asociación cultural “Integrantes en el mundo” que reúne a ciudadanos marroquíes residentes en Canarias, ha solicitado este viernes por la mañana con una concentración en la la calle Real de Arrecife al Gobierno de Canarias que haga las gestiones oportunas para que se instale de nuevo una línea marítima entre Canarias y Marruecos.

Desde que el Assalama, el barco de la Naviera Armas, se quedó encallado junto al puerto de Tarfaya en mayo de 2008, no ha vuelto a haber ninguna línea para pasajeros. Existen lineas aéreas pero los marroquíes piden una línea marítima para poder viajar con el coche a El Aaaiún, Tarfaya, Tan Tan o Agadir.

“Ahora tenemos que ir a Cádiz, de Cádiz a Algeciras, de allí a Tánger y luego ir en coche cada uno a su ciudad. Yo voy a Guelmin, que son 1.100 kilómetros”, dice Alí, encargado de supermercado con 15 años de residencia en Lanzarote. Antes viajaba por 200 euros a Tarfaya y ahora paga mil sólo de ida y tiene que ir solo porque no puede pagar los billetes de toda la familia.

“Hay mucha gente en paro y que no pueden viajar a ver a la familia porque el avión es más caro o porque se tardan cuatro días de ida y cuatro de vuelta y no hay tiempo”, señala Ahmed Kherani, delegado de la asociación cultural en Lanzarote, donde residen más de 3.000 marroquíes.

Solicita que se traslade el consulado desde Gran Canaria a Lanzarote, ya que no lo hace desde 2011

Prefieren viajar con el coche para poder llevar o traer mercancía y enseres. Señalan que la línea es rentable porque la usan los marroquíes de todas las islas y podría servir para que viajaran a Marruecos los canarios.

Kherani dice que la conexión marítima no sólo sería buena para los marroquíes sino también para personas de otros países, como Mauritania o Senegal y para el intercambio comercial entre Canarias y Marruecos. “Hay más de 2.000 empresas españolas en Marruecos -señala - y hay inversores marroquíes interesados en invertir en Canarias”.

Consulado móvil

Por otro lado, el colectivo marroquí también pide que el Consulado de Marruecos, que está en Gran Canaria, se traslade de forma periódica a otras islas para poder tramitar los papeles, como la partida de nacimiento, carné de identidad o pasaporte, sin tener que desembolsar el precio del viaje hasta Las Palmas. Hasta 2011 el Consulado se trasladaba y ahora ha dejado de hacerlo mientras que el de otros países sigue haciéndolo.