El impuesto sobre el combustible que promueve el Cabildo de Lanzarote ha recibido 286 alegaciones de vecinos de la Isla. Casi todas las alegaciones se presentan bajo el formato elaborado por la asociación de consumidores Aculanza, que consideran que la aprobación va  a repercutir negativamente en la carestía de vida de la Isla. También presentó alegaciones el PIL.

La nueva ordenanza fiscal se aprobó el 28 de marzo pasado y esta semana se prevé que se convoque el pleno del Cabildo para estimar o desestimar esas alegaciones y para aprobar el tributo de forma definitiva.

El nuevo tributo consiste en gravar el combustible a las distribuidoras, aunque las alegaciones consideran que el gravamen va a producir un aumento del precio que acabará pagando el consumidor.

El informe de Intervención del Cabildo señala que el procedimiento llevado a cabo por la Administración se hizo de forma correcta y que las alegaciones no son recursos en sentido estricto. También contesta a las alegaciones del PIL aunque quien debe resolver es el grupo de gobierno.

Entre los vecinos que presentan alegaciones se encuentran varios concejales de Arrecife, del PP y del PIL, como Juan José González Docal, Cándido Reguera, Joel Delgado o Vicente Herbón.

Recaudación

La nueva ordenanza fiscal plantea pasar de los 0,0079 euros por litro de gasolina a 0,02 euros, así como imponer el mismo gravamen al gasoil, hasta ahora exento. Es decir, por cada 50 litros, el Cabildo ingresaría un euro.

De los alrededor de 400.000 euros que se recaudan en la actualidad por esta vía, las previsiones que ha barajado el Cabildo apuntan a unos 2,5 millones de ingresos cada año, destinados a mantenimiento de carreteras y proyectos como el carril bici.