El grupo de gobierno del Ayuntamiento de Arrecife (CC y PSOE) ha aprobado en pleno el presupuesto de 2014 para el Ayuntamiento de Arrecife con el apoyo de las dos concejales no adscritas y el rechazo de la oposición. El grupo de gobierno también rechazó las seis enmiendas presentadas por el PP y las dos que había presentado el concejal del PIL.

El presupuesto para 2014 será de casi 50 millones de euros. Más de tres cuartas partes de este dinero se emplearán en gasto de personal y gastos corrientes, 19,2 y 18,3 millones, respectivamente.

Los gastos corrientes aumentan en 1,4 millones, aunque el grupo de gobierno quiso destacar que practica una política de contención del gasto y que está justificado ese aumento porque se dota de más dinero a los nuevos contratos de residuos, limpieza, y parques y jardines, que están en fase de licitación, por los que no se gastará todo ese dinero cuando se adjudiquen. Otra parte de ese aumento se destina a Vías y Alumbrado y otros 248.00 euros a la Escuela Infantil.

Las inversiones serán de 3,8 millones y están destinadas principalmente a la Casa de la Cultura (400.00 euros), saneamiento (240.0000), la Casa de la Juventud (180.000), la plaza de El Almacén (140.000) o inversiones en infraestructuras (300.0000). La deuda de la Corporación asciende a casi 30 millones de euros.

PIL y PNL tacharon el presupuesto de “continuista”, mientras que Alternativa criticó que bajen las inversiones y que aumente el gasto corriente. El P acusó al grupo de gobierno de falta de gestión por mantener infraestructuras o servicios cerrados, de hacer que baje la recaudación y de subir los impuestos, y de aumentar en un 6 por ciento el gasto en personal.

Intervención

El interventor, en su informe sobre los presupuestos, señala que la asignatura pendiente del Ayuntamiento es el control y actualización tanto de servicios públicos (como la vigilancia y mantenimiento de instalaciones deportivas, educativas y sociales).

Así como de los gastos corrientes de las dependencias municipales, como el suministro de agua, energía eléctrica, limpieza y seguridad, que requieren contrataciones que limiten el gasto y dotarse de una política de austeridad y eficiencia.