Pasadas las dos de la madrugada del jueves una llamada alertó a los efectivos del Centro coordinador de emergencias de Lanzarote. Se había desatado un incendio en una caravana aparcada desde hacía tiempo en un solar de la calle Vicente Vilas González, detrás del colegio Adolfo Topham.

El fuego calcinó rápidamente el vehículo, que servía de alojamiento ocasional para varios indigentes. Los bomberos pudieron finalmente extinguir las llamas pero en el interior del vehículo, o en lo que poco que quedó de él, encontraron un cuerpo totalmente quemado.

La Policía Judicial, al cierre de esta edición, continuaba recabando las pruebas para intentar determinar la identidad del fallecido y las posibles causas por las que se originó el incendio. En principio todo apunta a un accidente o un descuido aunque no se descarta que el incendio, que redujo a cenizas el vehículo casi por completo, pudiera haber sido provocado.

Los primeros indicios apuntan a que el fallecido puede ser Esteban, un indigente que solía dormir en esa caravana, que tendría más de 40 años de edad y era bastante conocido en el centro de Arrecife al ser ‘gorrilla’ en zonas como los aparcamientos de la calle Portugal.