No va a haber rebaja del IGIC en el año 2016. Ni tampoco se va a suprimir el Impuestos sobre Sucesiones y Donaciones o se va a rebajar el tramo autonómico del IRPF. Estas medidas fueron defendidas por el PP durante el pleno del Parlamento de Canarias y sobre las mismas se encargaron de echar un jarro de agua fría tanto el presidente, Fernando Clavijo, como la consejera de Hacienda, Rosa Dávila.

Clavijo recordó al portavoz de Asier Antona, durante el turno de preguntas de control, que “yo nunca prometí bajar impuestos durante la campaña electoral”; porque “no me caracterizo por decir eso y luego subirlos, como han hecho otros”.

El presidente sí recordó, pese a que Antona insistía en que esa rebaja de la presión fiscal fue un compromiso del anterior Ejecutivo, presidido por Paulino Rivero, en que “lo que hice fue comprometerme a estudiar una posible reducción de la presión fiscal” cuando dentro de dos años se haya salido realmente de la crisis.

Por su parte, la consejera Dávila fue la encargada de contestar al conservador Jorge Rodríguez que "la rebaja de impuestos del presidente Mariano  Rajoy no encaja en la UE. Ya le están tirando de las orejas. “El Gobierno de Canarias bajará la presión fiscal seguro en 2018, porque podremos hacer la rebaja con todas las garantías para poder mantener los gastos en las políticas esenciales”.

Presupuesto "social" y "equilibrado"

Previamente, Jorge Rodríguez había sugerido que en los Presupuestos canarios para 2016 se rebaje el IGIC, se suprima el Impuesto de Sucesiones y Donaciones “entre padres e hijos”, se rebajara el tramo autonómico del IRPF “para rentas medias y bajas” y se mejoraran “las deducciones vinculadas a la inversión empresarial, la creación de empleo y el I+D+i".

Medidas todas ellas que “repercutirán en el bolsillo de los canarios” pues, a su juicio, "una mayor recaudación debe proceder de una mayor actividad económica y no de una mayor imposición fiscal".

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