Francisco José Navarro Rodríguez será investido Cachorro de Honor de la Orden del Cachorro Canario de Lanzarote en un acto previo a la tradicional cena de Navidad, que tendrá lugar este martes, 3 de diciembre, a las 20.45 horas, en el Hotel Lancelot Playa de Arrecife.

Inmediatamente antes, a las 19.00 horas, tendrá lugar la asamblea de cierre del año, “en la que daremos cuenta de la gestión realizada y propondremos el plan de actuación para el año entrante”, señala el presidente de la Orden del Cachorro Canario de Lanzarote, Marcial Morales Cabrera.

Al otorgar la distinción de Cachorro de Honor, la Orden persigue reconocer la trayectoria de aquellas instituciones y personas que sobresalen por rescatar, vivir, transmitir y defender la identidad canaria y las costumbres y tradiciones lanzaroteñas, así como por la conservación y difusión de los valores vinculados a la cultura canaria.

A lo largo de la trayectoria de la Orden del Cachorro Canario de Lanzarote han sido distinguidos hasta ahora el artesano Juan Brito, la Fundación César Manrique, el artista César Manrique a título póstumo, el restaurante La Era, el Museo Agrícola El Patio, la Sociedad Cultural, Recreativa y Deportiva Torrelavega, el pintor Santiago Alemán, la Agrupación Folclórica Los Campesinos, el timplista Benito Cabrera, el Museo Tanit, el Archivo Histórico de Teguise, Los Diabletes, el empresario Juan Rosa, el artesano Eulogio Concepción, la Parranda de Marinera Los Buches, la Escuela de Arte Pancho Lasso, el naturalista Alejandro Perdomo Placeres, el ingeniero aeronáutico Dionisio Canomanuel, el Museo del Vino El Grifo, el ingeniero Manuel Díaz Rijo, el fotógrafo Javier Reyes Acuña, el Trío Lanzarote, el luchador Inocencio Morales Pollo de La Vegueta y el timplista Domingo Rodríguez El Colorao.

Al igual que las prestigiosas personas e instituciones antes citada, la Orden considera que Francisco José Navarro se distingue por su contribución a conservar, investigar y promocionar diversas manifestaciones culturales, y por evitar la desaparición o la deformación del patrimonio cultural.