Red Eléctrica de España (REE) sigue adelante con el proyecto para instalar entre Playa Blanca (Yaiza) y Mácher (Tías) una nueva línea de 132 kilovoltios (kV), a lo largo de un trazado de 17,8 kilómetros y que duplicaría la capacidad de la actual.

Según la información de la que dispone Diario de Lanzarote, se barajan dos modelos de torretas eléctricas: uno que podría llegar a superar los 44 metros de altura y otro que puede sobrepasar los 49 metros de altura, tanto como un edificio de 16 plantas.

En principio, la empresa tiene vía libre después de que el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) haya rechazado el pleito interpuesto por el Ayuntamiento de Yaiza en contra del proyecto.

La planificación del nuevo tendido en Lanzarote no es nueva, pero hasta ahora su ejecución se ha ido postergando. Ahora, la empresa, que opera en exclusiva el sistema de transporte de energía, ya está elaborando los proyectos concretos para ejecutar el tendido en la Isla.

Red Eléctrica empezó por Fuerteventura: el nuevo tendido, en realidad, se extiende desde Matas Blancas, en Costa Calma (Pájara), hasta Mácher, en el municipio lanzaroteño de Tías.

En octubre del año pasado se inauguró además el nuevo cable submarino, también de 132 kV, que conecta a ambas islas y las configura como un único sistema eléctrico. Se invirtieron 36 millones de euros en este enlace submarino de 14,5 kilómetros de longitud, situado a una profundidad máxima de 80 metros.

En Lanzarote, el siguiente paso para Red Eléctrica es la instalación del nuevo tendido, que ha despertado polémica por el impacto visual que se prevé, en una zona muy sensible, ya que el trazado inicial se dirige por Femés y llega a adentrarse en el Monumento Natural de Los Ajaches, además de atravesar suelo de gran valor agrícola y paisajístico.

Por un lado, la empresa destaca que el aumento de capacidad de la red aporta “robustez y flexibilidad” al “sistema eléctrico en ambas islas”. Por otro, se ha cuestionado abiertamente en Lanzarote que, de los 17,8 kilómetros de nuevo tendido entre Playa Blanca y Mácher, más de 14 kilómetros se contemplasen desde el principio con torretas de gran envergadura.

El proyecto recoge un total de 53 nuevas torretas eléctricas. Empieza en la subestación eléctrica de Playa Blanca, justo al norte de la urbanización Las Coloradas, con un pequeño tramo subterráneo de unos 300 metros hasta la primera torreta que se colocaría.

De ahí, la nueva línea de alta tensión se dirige en línea recta hacia el Monumento Natural de Los Ajaches, que bordea, situándose de forma paralela a la carretera de subida a Femés. No obstante, entre la torreta número 14 y la torreta número 19, alrededor de 1,2 kilómetros de longitud, el tendido se adentra en el espacio natural protegido.

Las nuevas estructuras podrían llegar a ser tan altas como un edificio de 16 plantas

Desde el Pico de la Aceituna, el tendido discurre al este del pueblo de Femés, por el valle, hasta llegar casi a Las Casitas, cuando la nueva red eléctrica atraviesa en dirección al vallito de Uga, rodeando Caldera Gritana y Caldera Riscada.

Desde ahí desciende hasta una amplia zona de potencial agrícola, para atravesar la carretera LZ-2, entre las conocidas gasolineras de Honorio García Bravo, exalcalde de Yaiza, y la rotonda del parque de ocio Lanzarote a caballo.

Aunque la altura de las instalaciones puede ser variable, en este tramo, en una de las cuencas visuales más características del sur de la Isla, con un paisaje agrario tradicional, alguno de los nuevos postes superaría los 40 metros de altura.

Las nuevas torretas eléctricas discurren luego hacia el interior, junto a la Montaña Tinasoria, en un espacio de suelo rústico de protección paisajística según el Plan General de Ordenación (PGO) de Yaiza.

Al entrar en el municipio de Tías es cuando el nuevo tendido eléctrico se soterra a lo largo de unos tres kilómetros, en una zona donde son habituales las edificaciones diseminadas, hasta culminar en la subestación de Mácher.

Tendido eléctrico en el entorno del Monumento Natural de Los Ajaches, cuyo tamaño aumentaría.

¿Cambios en Femés?

Según ha podido saber este periódico, se han venido produciendo contactos entre el Cabildo de Lanzarote y Red Eléctrica para abordar el proyecto de la nueva línea de alta tensión. De hecho, la compañía estaría valorando modificarla en la zona de Femés, en concreto entre la torreta número 13, antes del tramo de carretera de subida más pronunciada al pueblo, y la torre número 38, en el extremo oriental del valle.

Sin embargo, hasta el momento no ha trascendido que se haya concretado ningún cambio efectivo, ni en el trazado ni en las características del proyecto, que discurre en su mayor parte por línea aérea. También se desconoce el alcance de esa posible modificación, si es que llegara a producirse. En su momento trascendió que, si se llegaba a soterrar, las instituciones insulares tendrían que aportar financiación.

Si nada cambia, habría 14 kilómetros de tendido aéreo con 53 torretas

El último cargo público en alzar públicamente la voz para exigir el soterramiento del tendido eléctrico fue el alcalde de Yaiza, Óscar Noda. “Si abogamos por líneas de sostenibilidad y por la defensa del paisaje como valor esencial de la Isla debemos hacer un gran esfuerzo para soterrar el cableado y quitar las torretas”, proclamó delante de la presidenta de Red Eléctrica, Beatriz Corredor, cuando se inauguró el cable submarino.

En aquel momento, Noda criticó el “fuerte impacto visual” que supondrían las nuevas torretas en Femés y Las Casitas.

La experiencia en la vecina isla de Fuerteventura ha sido desfavorable. En la Maxorata, Red Eléctrica se ha mostrado totalmente reacia al soterramiento del nuevo tendido. De forma oficial, alegó que la planificación eléctrica “establece que todas las líneas de la red de transporte se plantean como aéreas”, salvo que se den unos “condicionantes insalvables” que lo impidan.

Red Eléctrica también se ha escudado en “una serie de dificultades técnicas, como es el aumento significativo del tiempo de reposición” o la “imposibilidad de reenganches”. De forma paradójica, Red Eléctrica alude a una “pérdida de calidad paisajística” allí donde se soterra el cableado, por “la destrucción de la vegetación y los movimientos de tierras”.

El futuro tendido se adentraría más en zona agrícola, con instalaciones campo a través.

Campo a través

Red Eléctrica pone el foco en la transformación del suelo para el soterramiento de la línea eléctrica, una fórmula de la que rehúye, sobre todo por razones económicas. Aunque los precios se han incrementado, en el sector se estimaba que, en núcleos urbanos, para un kilómetro de línea aérea necesitaba invertir unos 160.000 euros, mientras que si era soterrado rondaba los 670.000 euros. Es decir, cinco veces más caro, aunque dependiendo de las características del proyecto el coste se podría llegar a multiplicar por 10.

Se ha valorado modificar el proyecto en Femés, pero no hay una decisión

Eso sí, la nueva línea aérea en el sur de Lanzarote tendrá más impactos sobre el territorio que la afección visual. En los tramos sobre los que se considera que no hay nada que negociar (entre Playa Blanca y antes de la subida a Femés, y desde el extremo oriental del valle y la frontera del municipio de Tías), para colocar las nuevas torretas se utilizarán caminos que ya existen y están en relativo buen estado, pero también se acondicionarán otros y, en numerosas partes, se llevará la maquinaria campo a través para levantar las torretas. Es lo que sucede antes de Femés pero también, sobre todo, en la amplia zona agrícola próxima al municipio de Tías.

Sentencia

El Ayuntamiento de Yaiza ha intentado anular el proyecto, pero con escaso éxito. En una sentencia de este pasado mayo, el Tribunal Superior de Justicia falló en su contra. En mayo de 2017, la entonces alcaldesa, Gladys Acuña, hoy jefa de gabinete del presidente del Cabildo, fue facultada por el pleno para interponer acciones legales y acordó solicitar que el Gobierno de Canarias anulase voluntariamente la aprobación del proyecto de Red Eléctrica.

El TSJC interpreta que trasladar al Ejecutivo aquel acuerdo plenario no supuso iniciar un expediente de revisión de oficio. Se envió la certificación del pleno, pero “no se formuló solicitud de revisión de oficio”, por lo que no “existía obligación” del Gobierno. Un fallo en toda regla.