La intención es llegar esta década a 245 megavatios de eólica, con espacio en todos los municipios de la Isla, pese a reconocer la “ocupación del territorio” como el mayor impacto
El Plan de Energía define 89 kilómetros cuadrados para aerogeneradores en Lanzarote
La intención es llegar esta década a 245 megavatios de eólica, con espacio en todos los municipios de la Isla, pese a reconocer la “ocupación del territorio” como el mayor impacto
El Plan de Transición Energética de Canarias (PTECAN), que se encuentra en exposición pública por parte del Gobierno autonómico, contempla para Lanzarote un área “potencial disponible” de 89,3 kilómetros cuadrados para instalar aerogeneradores.
Según los planos del PTECAN, se podrían instalar aerogeneradores en los siete municipios y por buena parte de la geografía insular, tanto en áreas costeras como del interior.
Así, en la zonificación se contempla desde el norte de la Isla, en los alrededores de Ye, a las inmediaciones de Punta Mujeres y Arrieta, pasando por el entorno de Mala. En el municipio de Teguise, la zonificación incluye amplias áreas en los alrededores de La Villa, especialmente hacia el borde del Risco de Famara, entre Costa Teguise y Tahíche, y tanto al este como al oeste de esta localidad.
Tal y como se puede apreciar en el mapa específico sobre la ubicación geográfica de la eólica terrestre, la previsión es contar con amplios espacios de aerogeneradores en Tinajo, tanto en el interior como en la costa, hacia La Santa.
En cuanto al municipio de Tías, el PTECAN define importantes bolsas de suelo en el límite con San Bartolomé, así como entre Puerto del Carmen y las localidades del interior. Por último, en el municipio de Yaiza se recogen también áreas para energía eléctrica en piezas rústicas en dirección a Playa Quemada, en las inmediaciones de Uga y Yaiza, y en Playa Blanca.
En un decreto reciente firmado por el todavía presidente Ángel Víctor Torres, que da vía libre a un parque eólico de seis megavatios en la zona de Las Caletas, se subraya que, “actualmente, hay instalados en la isla de Lanzarote 31,5 megavatios, por lo que se encuentra en estos momentos muy rezagada del objetivo trazado”.
La intención del Plan de Transición Energética es multiplicar la energía eólica en Lanzarote, para tener instalados 245 megavatios de potencia en 2030 y hasta 500 megavatios en 2040. En cuanto a la zonificación para energía fotovoltaica terrestre, las áreas contempladas son similares a las destinadas a la eólica, si bien los objetivos de potencia son inferiores: 33 megavatios en 2030 y 180 megavatios en 2040. La superficie a ocupar, de forma potencial, alcanza los 196 kilómetros cuadrados.
La intención es multiplicar la energía eólica y disponer del 10% de la superficie de Lanzarote
El Plan de Transición Energética reconoce que “una de las externalidades de mayor importancia del sector energético” es “la ocupación del territorio para la satisfacción de las necesidades”.
Fuerteventura forma con Lanzarote un mismo sistema eléctrico, al estar interconectadas por un cable submarino que se acaba de renovar recientemente, para llegar a los 132 kilovoltios, duplicando su capacidad, tras una inversión de 32 millones de euros por parte de Red Eléctrica.
En la vecina isla, en los últimos años se ha generado una ola de rechazo social a la instalación de parques eólicos sin una ordenación territorial previa, próximos en algunos casos a viviendas, como sucede en El Time, pendiente de que resuelvan los tribunales.
En Lanzarote, hasta ahora, la instalación de aerogeneradores ha estado principalmente en manos públicas: la empresa Inalsa controla el 60 por ciento de Eólicas de Lanzarote, que explota el parque eólico de Los Valles, y los aerogeneradores que se han implantado en la última década son del Consorcio de Aguas.
Por otro lado, hace dos años el Ayuntamiento de San Bartolomé, propietario del suelo donde se encuentra el obsoleto parque de Montaña Mina, inició el trámite para retirarlo: se puso en marcha en 1992, con una concesión de 25 años, ya vencida, y la empresa que lo explotaba (Plantas Eólicas de Canarias) fue a la quiebra y fue absorbida por otra sociedad (Energías Limpias de Burgos).
No obstante, con el nuevo PTECAN a las puertas de ser aprobado, el escenario puede ser totalmente diferente: el suelo disponible para aerogeneradores y placas fotovoltaicas se volverá muy apetecible para las compañías energéticas y, si las instalaciones se declaran de interés general, su implantación podría vincularse a procesos de expropiación para la obtención de los terrenos, como está sucediendo a gran escala en la Maxorata.
Aerogeneradores en Lanzarote. Foto: Adriel Perdomo.
Los objetivos
En el Plan de Transición Energética de Canarias se apuesta por la “total descarbonización” de las Islas en el año 2040, a través de un “cambio profundo del sistema energético”. En Lanzarote, la potencia energética convencional procede de la central térmica de Punta Grande. Con más de 200 megavatios de potencia instalada, la intención es que se vaya reduciendo de forma paulatina hasta los 133 megavatios en 2030.
Por el contrario, la energía eólica en tierra se aspira a multiplicar hasta rozar los 245 megavatios al inicio de la próxima década. Todavía no se recogen, en ese horizonte, parques eólicos marinos en Lanzarote, al menos en las previsiones del Plan de Transición Energética, aunque se vincula su desarrollo a los planes estatales. Sí se contemplan tres megavatios de potencia de placas fotovoltaicas en el mar (“asociadas” a los puertos de Arrecife y Playa Blanca), otros 33 megavatios de complejos fotovoltaicos en tierra y más de 25 megavatios de esta fuente de energía para autoconsumo.
El Cabildo no ha elaborado una ordenación a escala insular y decidirá el Gobierno canario
Con menor relevancia, se espera la implantación de 10 megavatios mediante turbinas de hidrógeno, más de dos megavatios a través de biomasa y un megavatio gracias a la tecnología undimotriz, que captura la energía de las olas. “A partir de estos datos se obtiene una cobertura de demanda anual con energías renovables del 61,7 por ciento”, señala el PTECAN para Lanzarote.
Con este desarrollo previsto para las energías renovables, las emisiones totales en la Isla de gases de efecto invernadero, en el año 2030, serían de 776.000 toneladas de CO2, de las que el 49 por ciento provendrían del sector eléctrico, el 32 por ciento del transporte terrestre, el uno por ciento del transporte marítimo y el 18 por ciento del sector del transporte aéreo. “Esto supone una reducción de emisiones totales del 25 por ciento respecto a la alternativa cero”, es decir, la situación de partida, sin hacer nada por implantar renovables, explica el PTECAN.
En el documento se reitera que la energía renovable “predominante” en Lanzarote será la eólica terrestre, que proporcionará “energía durante todo el año, aunque bastante menos durante septiembre y octubre”. “La energía fotovoltaica se reduce también en los meses de otoño e invierno”, se añade.
¿Cuánto cuesta?
Una transformación energética del calado que se plantea no es barata. Los costes de inversión contemplados ascienden, en el caso de Lanzarote, a 543 millones de euros: 55 millones hasta la finalización de 2023, unos 135 millones en los dos años siguientes y 353 millones entre 2026 y 2030. No obstante, para lograr la descarbonización completa habría que invertir otros 322 millones hacia 2035 y 428 millones de euros más para 2040.
Se apuesta por una fuerte inversión privada: 455 millones de euros esta década
En cualquier caso, el PTECAN apuesta por una fuerte inversión del sector privado, que se ocuparía principalmente de implantar aerogeneradores y plantas fotovoltaicas: entre 2022 y 2030 se esperan más de 455 millones de euros de fondos privados, por menos de 90 millones públicos. Las instituciones públicas de la comunidad autónoma inyectarían apenas 37 millones y el Gobierno central cerca de 50 millones.
Con la Ley de Cambio Climático de Canarias, aprobada el pasado mes de septiembre, es el PTECAN, que elabora el Ejecutivo regional, el que establece “los criterios de localización de las instalaciones de energía renovable” en las Islas, con una vigencia de 10 años, aunque se puede prorrogar por más tiempo o revisar a los cinco años. Lo que contenga el Plan del Gobierno de Canarias será “de obligado cumplimiento”.
En la etapa de Dolores Corujo se anunció una Ordenanza insular para fijar criterios de “homogeneización” para la implantación de energías renovables, donde se definiesen los lugares adecuados. Ni siquiera llegó a salir a información pública ningún borrador. Tampoco se elaboró un Plan Territorial para ordenar los parques eólicos y fotovoltaicos.
Como ha cuestionado el propio Gobierno autonómico, del Cabildo lanzaroteño solo han emanado “una serie de manifestaciones políticas”, que consistían en rechazar cualquier aerogenerador privado y limitar las placas solares básicamente para autoconsumo.
Comentarios
1 Juan Alberto Mié, 14/06/2023 - 10:14
2 ADIOS BALBINA Mié, 14/06/2023 - 12:36
3 Eólica Zero Mié, 14/06/2023 - 12:55
4 suicidas Mié, 14/06/2023 - 13:40
5 Playero Mié, 14/06/2023 - 13:44
6 Eólica Zero Mié, 14/06/2023 - 21:20
7 Lanzarote Jue, 15/06/2023 - 14:42
8 Yoli Vie, 16/06/2023 - 20:16
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