Garantizar el mantenimiento y la continuidad de los servicios de atención y prevención en materia de drogodependencias y otras adicciones, adaptando las mismas a las necesidades y a la realidad de la sociedad actual, son las bases en las que se sustenta el primer 'Plan Insular sobre Adicciones 2014-2018' de la isla de Lanzarote.

El plan fue presentado por el consejero de Bienestar Social del Cabildo, Marciano Acuña, este martes por la mañana, “y pone especial atención entre otros segmentos  en el sector poblacional de los jóvenes y las mujeres”.

En esta presentación participaron también el Delegado del Plan Nacional de Acción Sobre Drogas, Francisco de Asís Babín, y el Director General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, José Díaz Flores.

El consejero quiso destacar la trayectoria de la red de drogodependencias y Centro de Atención (CAD) que gestiona el Cabildo, durante todos estos años. “Una red que de forma muy incipiente comenzó a prestar asistencia en esta materia en el año 1986”, recordó.

“Desde entonces no ha dejado de prestar dicho servicio, complementándose posteriormente con otras unidades derivadas del servicio canario de Salud y otros servicios del Cabildo”, apuntó Acuña, quien destacó también que durante el último año 1.020 personas en Lanzarote requirieron de cierta atención en materia de drogodependencias y adicciones.

Para el consejero, este Plan que será “pionero en Canarias” en cuanto a atención de adicciones -nuevas tecnologías, ludopatías o fármacos, además de otras drogas y problemas derivados del consumo de  sustancias, como el alcohol o el cannabis-, supone "un paso más para seguir adaptando esta red insular a las nuevas realidades detectadas en los últimos años”.

El plan, participado además por numerosos actores, fue aprobado por unanimidad del pleno de la Corporación el pasado 28 de marzo, con lo que, según Acuña, “cuenta con el respaldo de todas las fuerzas políticas representadas en la primera Institución Insular”.

“Este plan de acción es especialmente extensivo en cuanto a las sustancias que en el mismo se consideran como drogas”, señala. Observa por tanto acciones y medidas para prevenir y reducir el consumo tanto de las llamadas “drogas legales” como de las “ilegales”, así como actuaciones dirigidas a otro tipo de adicciones.

El plan destaca la importancia de la promoción de la salud y de los hábitos de vida saludables como la mejor estrategia de prevención de las adicciones.