El planeamiento municipal de San Bartolomé no se revisa desde hace 24 años. En la actualidad, es el más antiguo de Lanzarote. El nuevo Plan General de Ordenación (PGO) está sobre la mesa, preparado para su aprobación inicial. El documento ordena las áreas de crecimiento del polígono industrial y comercial, las zonas de expansión residencial en San Bartolomé y Güime, define las nuevas carreteras para mejorar la conexión de los núcleos del interior hacia Playa Honda y dibuja el suelo para futuros espacios públicos. Éstas son las principales claves:

CRECIMIENTO DE PLAYA HONDA.  En conjunto, el planeamiento municipal propone 13 suelos urbanos no consolidados: cinco unidades de actuación en Playa Honda de las que ya se han ejecutado más de dos tercios siguiendo el planeamiento en vigor, otro ámbito ordenado en ejecución con instrumento de desarrollo aprobado, y siete ámbitos no ordenados. Además, se delimitan cinco sectores de suelo urbanizable.

De forma específica, el nuevo Plan General establece dos bolsas de suelo urbano no consolidado en Playa Honda: una de 99.000 metros cuadrados y uso industrial en la trasera del Hiperdino, y otra de 46.500 metros junto al acceso al aeropuerto César Manrique-Lanzarote.

Una de las piezas de suelo de mayor superficie que se contempla, con categoría urbanizable, supera los 314.000 metros cuadrados y se extiende desde el acceso al aeropuerto hasta el límite con el municipio de Tías. Otro de los sectores que se dibuja en el Plan General, de 46.500 metros, se encuentra al norte de las actuales edificaciones en la carretera de Playa Honda a Güime.

COLMATACIÓN DE SAN BARTOLOMÉ. En la memoria del nuevo Plan General, el equipo redactor, de la empresa Gesplan, señala con respecto a San Bartolomé que se ha optado por “un reconocimiento de los suelos urbanos y urbanizables” que ya estaban previstos en el planeamiento vigente, “al objeto de lograr una mayor compactación”.

De esta manera, se recoge una bolsa de 57.700 metros cuadrados de suelo urbano no consolidado con destino residencial en la zona de El Quintero, con una previsión máxima de 45 viviendas por cada 10.000 metros. La otra gran área de crecimiento en la cabecera del municipio se encuentra en la entrada desde Arrecife, con una pieza de 38.000 metros y destino residencial. En San Bartolomé hay otras tres piezas de suelo urbanizable contempladas para uso residencial: en total suman 227.600 metros cuadrados.

DESARROLLO DE GÜIME. Uno de los principales núcleos residenciales del municipio, Güime, también ve cómo el Plan General apuesta por una solución para hacer más compacta “la trama urbana” y la “colmatación de suelo urbano vacante”. Eso sí, se excluyen del núcleo “algunos ámbitos” de suelo.

De esta forma, se definen tres piezas de suelo urbano consolidado no ordenado de uso residencial, que suman 54.000 metros cuadrados. Con la densidad edificatoria prevista cabrían hasta 162 nuevas viviendas. El nuevo PGO también define dos piezas de suelo para uso público al norte de la localidad, junto a la carretera, en la parte más próxima a la salida a Montaña Blanca: 6.700 metros para uso comunitario y otros 6.000 metros para un parque.

CARRETERAS Y ALTERNATIVAS. El nuevo Plan General incluye un estudio de movilidad con diversas propuestas y hace hincapié en plantear alternativas a la actual configuración de la carretera LZ-2 que atraviesa Playa Honda, por su “alta intensidad” de vehículos, que supera “su capacidad prácticamente todos los días del año”.

Como alternativas “se barajan fundamentalmente dos”: la creación de una vía de circunvalación al norte de Playa Honda que una Arrecife con la salida a Puerto del Carmen y, por otro lado, “la creación de un bulevar urbano desde la salida de Arrecife hasta el enlace del aeropuerto”. “A su vez, este tramo sería soterrado para dar servicio a los vehículos de paso que no precisen la entrada” a Playa Honda ni al polígono industrial y comercial, se explica en el Plan, que alude a reducir “la contaminación acústica” y favorecer “el tránsito peatonal y ciclista”.

En el documento también se señalan otras posibilidades, como otro paso inferior “que salve la barrera física que produce la LZ-2 entre la zona industrial y el núcleo urbano”, y que podría enlazar ambas partes en una zona colindante al centro comercial Deiland. Tanto en el estudio de movilidad como en el estudio económico se recoge la reconversión de caminos de tierra que van de Güime a Playa Honda en carreteras para mejorar los accesos.