4 COMENTARIOS 01/07/2024 - 07:59

En la carrera sin fin entre las palabras y los hechos, parece que se están imponiendo las palabras. Pero sin los hechos. Será necesario atender a lo que nos dicen, pero es más necesario aún atender a lo que ocurre. Y también a lo que no ocurre.

El empobrecimiento, o incluso la desaparición de un debate público de calidad es un hecho. Es más complicado saber cuándo, cómo y por qué ha ocurrido, pero parece que ha venido para quedarse. La informalidad ya no tiene castigo. La mentira es una opción más. La falta de rigor es abundante y la ignorancia no solo no se esconde, sino que se exhibe sin pudor. Todo esto, en el ámbito de la política.

Vale todo. Hay acciones políticas, basadas en intereses particulares, que se venden como acciones salvadoras o esenciales. Qué aburrido es tener memoria. Había que hacer una carretera para que La Geria no muriera, y después un Plan para salvar al sector. Sin esa carretera y sin ese Plan, el vino va a morir de éxito.

Había que comprar una casa para hacer un museo y hacer otro museo submarino imprescindible, y privatizar el agua para salvar el servicio. Nada era como se vendió. También hacía falta un Plan General urgentemente en Arrecife para que no muriera y había que devolver el tráfico a la Avenida para revitalizar el centro, pero ahora se presume de las excelencias de un “paseo peatonal” en El Reducto. Si es paseo, es peatonal.

También había que nombrar la isla saturada, pero antes había que quedarse mirando cómo se construía el hotel más grande de la Isla, pagar una pasta para que un informe dijera que los nómadas digitales iban a salvarnos y construir otra carretera más, porque hay pocas.

Y resulta que ahora, del creador de “ni un turista más ni un turista menos”, llegaba el contundente no voy a permitir que se consuma territorio” con esa nueva carretera. Pues vamos a ver hasta dónde llega la contundencia porque de momento ya se ha aplazado, como siempre, el debate público.

Comentarios

Nos reiremos por no llorar Gracias Saul, ni una palabra más ni una menos, claro y conciso como siempre.
Si pudiésemos utilizar para echarlos del gobierno y cargo a los políticos por las obras y proyectos prometidos y olvidados ( o a lo peor cambiados a lo contrario ) aportando como pruebas todo lo plasmado en los medios de comunicación contrastados , cada año en la isla tendríamos nuevo o nueva president@ del Cabildo y alcaldes en los ayuntamientos. Soñamos pero de momento , como dices Saúl , no queda más que enfadarnos y exigir al menos respuestas a nuestras preguntas . PD el sueño extensible a la presidencia del gobierno .
No hay debate público porque la población de este país cree que la política es como el fútbol: eliges un partido y lo apoyas hasta la muerte. Además estamos alcolizados, drogados y asoliados. Que Eli Merino siga teniendo vida política después de decir que la covid19 vino para desacerse de tanta gente vieja es síntoma claro de que nuestra sociedad está podrida. Somos como un pureta que con 40 años vive para la fiesta del fin de semana. Droga, alcohol y el lunes vuelve a un trabajo de mierda donde hace lo mínimo para tener paro. Como sociedad tenemos el "Carpe Diem" tatuado en la frente. Que debate ni que leches. Te meto un navajazo y listo.
Aplastante artículo. Gracias Saúl por decir lo que pensamos muchos.

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