Gerardo Fernández

La otra cara del intercambiador en el Sur

¿Para que gastarse 500.000 euros? De momento para hacer parada de la línea 34, interna del municipio de Tías, y poder coger la guagua que va a Playa Blanca (línea 61). Estos dos servicios ya son atendidos en varias paradas de alrededor, incluso donde no hay viviendas ni población (punto limpio). No hemos construido una importante cantidad de paradas nuevas “preciosas” que son la admiración de propios y extraños.

Nos preguntamos que será eso del Plan Insular de Movilidad Sostenibl. Seguramente que los horarios se cumplirán rigurosamente, que las guaguas no pararán en medio de la calzada, que se arrimarán al borde de la acera y que no se pondrán en marcha hasta que los  pasajeros estén bien ubicados, entre otros deberes.

El edificio se encuentra en la calle “Carlos I” y no en la Rambla Islas Canarias, (ya empezamos faltando a la verdad).  Dice la noticia sobre la reciente inauguración que el nuevo edificio moverá 180.000 pasajeros… lógico ya que la línea 34 y la 6l paran allí.

Curiosamente, en ninguna de las fotos que ilustran la noticia se observa la parte sur del edificio. ¿Por qué será? Es la parte más bonita e interesante. Algo así como los jardines de Aranjuez, pero en  abstracto, con escombros por doquier.

Los residuos de construcción y demolición, al verterse sin haber  realizado separación de componentes catalogados como residuos peligrosos generan un impacto que no es sólo paisajístico, sino también de contaminación química. Entre 50 y 100 metros de la zona tenemos el instituto, la guardería y el propio intercambiador.

Dice el incomparable Cicerón: “Nada es más hermoso que conocer la verdad, nada es más vergonzoso que aprobar la mentira y tomarla por verdad”. Decimos la frase porque no tiene respuesta el Cabildo, sigue en sus trece de favorecer descaradamente a la empresa concesionaria… deben ser muchos los intereses creados.

Ni siquiera han tenido el orgullo de señalizar en el piso “Guagua”. Tarde o temprano lo “pagarán” por ¡anticanarios! Sigo con mi amigo: “De todos es errar, sólo el necio permanecerá en el error”.

Comentarios

Eso lo veía yo desde que comenzaron las obras y no podía dar crédito, pero como en los últimos años no se tiene en cuenta el embellecimiento, el medioambiente ni nada de nada, de toda obra nueva que se haga, pues ya me parece hasta normal. Pasen por la carretera Tiagua-Tinajo, hace 2 años podimos ver un bonito palmeral a la entrada de Tinajo, actualmente, después de la nueva obra, podemos ver basura acumulada en los arcenes, ahulagas creciendo sin control, una manguera (la que antiguamente regaba las palmeras) tirada en el arcen... Así con todo.
El problema ya no es ese, porque eso llegará un día en el que se limpie y ya está el problema está en que la zona ya no quedará nunca como en su estado original, ahora quedará, una vez retirado ese escombro, una gran explanda en medio de la nada.

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